Marcas de Deseo
Publicado en Dec 05, 2011
Solos…en esta isla de cuatro paredes…Llegamos sin planearlo a cada rincón de esta escena donde el control se pierde y la pasión no frena… Tu aroma me desespera, me lleva a tu cuello, para pasear lentamente por los caminos de tu piel, dejando la huella del delicioso placer que mi curiosa y rebelde lengua quiere conocer…. No me detengas, déjate llevar, dime mi amada amante que me amas de verdad…Déjame demostrarte como te amo al amarrarte en mis brazos, cárgate contra la pared y que mis manos se aventuren desde tus pies hasta el misterio de tu entrepierna…Tu boca reclama la mía, sin importar que fuimos ayer o que pasara mañana, nuestras lenguas nos guiarían, serán nuestra conciencia, serán nuestro lenguaje…
Y así de la pared a la cama, nos perdemos en los roces de esta caliente sensación, sin ataduras, sin vergüenzas ni límites… Tu cuerpo contra el mío, cargada en mi pecho, o descansado en tu vientre… Me excita la senda de tu boca que conduce más abajo, a esos senos hechos de deseo, hechos para vestir con mi saliva y marcar en su rozada corona un camino que te lleve a la más ardiente locura… Los pequeños gemidos que reclaman más de todo y al mismo tiempo más de nada… Me dan el derecho de conocer de extremo a extremo tus caderas, tu vientre y abrigar tu ombligo con mis labios para que sea testigo de este deseo que arde en mi pecho que disfruta cada extensión de tu piel… Sin perder mi rumbo, aun en la más profunda oscuridad de nuestro íntimo encuentro, veo claramente como amo tu cuerpo, como mis manos, mi lengua, mi nariz, todo me dice que eres perfecta para mí… Con el hambre de tu piel devoro lentamente con esos movimientos de aquí y allá, descubrir en tu sexo el más exquisito manjar, perderme en tu aroma…Borracho de placer… No quiero saber nada del mundo…Solo quiero saber que quieres esta vez… No encuentro postura, no encuentro forma, no encuentro por qué tu encima de mí, cambias totalmente mi ser, esclavo de ti, a merced de tu deseo… Te arrebato de tu voluntad, te hago prisionera de lo que ocurre al final… Pues mientras arre cuesto tu cabeza a mi pecho, escuchas a mi corazón en latidos dedicados a ti… Y en la acelerada respiración… En mis manos que naufragan en tu espalda, en mi boca que busca la gruesa sensación de tus labios… El orgasmo mutuo se hace notar… Pronto el complacerte, el complacerme se vuelve una alegría sin igual, queriendo que asi sea el paraíso o el castigo eterno, no importa el nombre, no importa el lugar, no es sexo lo que acabamos de realizar… Es la expresión de nuestro amor motivado por la sed carnal… Que nos llevó hacer el amor…Mirarnos con inocencia y perversión al mismo tiempo… Cerramos este capítulo… En un te amo…En este sentimiento tan sincero
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