Te haria presa del destino,
si yo pudiera,
llenaría mi ego de ti,
donde mi sangre hierve.
De nácar te cubriría
y con un tul, que se
ciñe a tu piel,
con un velo cubriría
el universo, de escarcha
de sal haría el tiempo.
Me lleva a tu cintura,
de azar regaría el campo
donde nacieras tu.
Esculpidos tus senos
que traslucen los días,
te pintare de negro,
el rincón donde oscuro
nos declaramos,
serán tus ojos
que velaran sin descanso.
Poco ,poco me parece
poco,lo que demanda
mi ego,
donde la cumbre culmina.
La poesia se oculta,
dicen que el sol se va
y que la luna tambien,
los dias y las noches,
pero no es verdad es
mentira,se esconden
tras de la luz,
son nuestros dias
se van,
la mañana se repite
por igual la noche
hace,
por eso no quiero
a nadie,donde tus
pasos que pisas
nadie los vuelva
a pisar.
pep