Se apedillaba Machón y era uno más, de esos muchos más que he tenido la desgracia de conocer, que se creía el Gallo Kiriko a la hora de jugar al fútbol y a la hora de meter las narices donde nadie le llamaba. Pero, claro, era Machón y como machón se comportaba. ¿Cómo va eso? Quizás se esté refiriendo a cómo va a terminar el partido. Pues bien. Con un solo jugador excelente (en el caso de Higueras por ejemplo) bien "sobado" que quedó Machón y todo su equipo "de gala". ¿Cómo va eso? Tal vez se refería a lo de conocer chavalas verdaderamente guapas. Pues ya ves, Machón machón, me defiendo me defiendo como gato panza arriba pero ten cuidado con meter la pata que te vas a romper si te mira alguna que merezca un poco la pena. Efectivamente, Gitano me lo hizo saber. Machón se rompe todos los días. ¿Cómo va eso? O es probable que se estuviese refiriendo a cómo se debe emplear la cabeza para rematar un saque de esquina. Y se lo demostré. A punto estuvo de quebrarse la cabeza cuando entré a rematar. Y hasta el lindo Don Antonio se quedó perplejo. ¿Has comprendido ya, machón Machón, cómo se mete la cabeza para rematar bien un saque de esquina? Y le dejé con el lindo Don Antonio Ordóñez. Quizás hasta es posible que le hubiese ido mucho mejor ordeñando vacas.