Uno a uno...asì es como debiera comèrmelos, no me caben tantos en la boca, me cuesta hasta respirar, pero es asì como me nace comer estos pequeños y pecaminosos bombones...a puñados, casi empujàndolos para hacer màs espacio...hoy es mi cumpleaños, sòlo yo lo sè...y no es relevante...aunduve todo el dìa buscando el momento para encerrarme en el baño y atragantarme con estas delicias; soñaba con el momento en que les quitara el papel  con desesperaciòn, eufòrica y llorosa.La mujer de la tienda me mirò como adivinando mis intenciones y dramàtica situaciòn..."Sì, para regalo y con una tarjeta, sòlo escriba algo tierno, no sè, feliz cumpleaños amiga...cariño, lo que desee" .De seguro adivinò el acto de la autoentrega del paquetito satinado y sintiò làstima.
   Despertè muy temprano, con la jaqueca tìpica del barbitùrico noqueador de noches que quieren ser màs largas y atormentadoras;mirè mi rostro en el espejo:pecoso, blanco como papel,ojeroso, de boca pequeña casi sin labios...intentè sonreir y aparecieron mis dientes pequeños, casi infantiles, en un rictus màs parecido al de una indigestiòn que el de una sonrisa.Caminè casi a rastras al baño, mientras iba desnudàndome y regando mi ropa por el pequeño departamento.LLeguè desnuda al baño, me miro un instante eterno...no tengo pechos de mujer, unas protuberancias lechosas acusan mi femeneidad cumpleañera,la ducha se alarga innecesariamente por muchos minutos...casi ni cuenta me doy de còmo salgo y me tiro a la cama.Vestirse.Algo simple, una falda hasta la rodilla, una blusa que me queda enorme, zapatos planos, monocromàtico todo...peino mi pequeña melena rojiza y ya estoy tomando un cafè amargo que raspa mi esòfago.
Al llegar a la oficina, varios me miran con indiferencia, pasan las horas, llega la hora de almuerzo y estoy aquì comiendo , devorando, casi ni tragando...en unos minutos estarà todo en el inodoro, rejurgitado, sin digerir.El papel en el suelo "Feliz cumpleaños, mi niña". fue simpàtico el gesto de la vendedora.