Abro otra página de mi Diario. Esta vez voy a ser brevísimo, todo lo más breve que pueda porque a ciertas personas es mejor olvidarlas cuanto antes pero una vez dicha la verdad. Jorge lleva desde diciembre diciéndonos que no nos preocupemos de nada porque su piso de Parla (Madrid) está disponible para cuando lo deseemos y por el tiempo que lo necesitamos sin cobrarnos nada excepto los gastos. Está bien. Aceptamos su palabra y damos por válida su palabra. Pero mira por donde todos los hipócritas siempre tienen alguna excusa para no cumplir con su palabra dada. Eso es propio de hombres sin valor alguno. La excusa puede ser cualquiera pero el faltar a la palabra dada una tras otra vez es propia de hipócritas y no existen excusas para ello. En fin. Que menos mal que mi Princesa no es así y por eso la amo desde que nació hasta la Eternidad. Y al hipócrita de Jorge no deseo ni conocerle.