MAX AUB (2)

 
1. ¡Me negó que le hubiera prestado aquel cuarto tomo…! Y el hueco en la hilera, como un nicho…
(18 palabras).
 
2. ¡Tanta historia! ¿Qué más daba ese que otro? ¿A poco usted escoge su clientela?
(14 palabras).
 
3. De mí no se ríe nadie. Por lo menos ese ya no.
(12 palabras).
 
4. Le olía el aliento. Ella misma dijo que no tenía remedio…
(11 palabras).
 
5. ¿Tengo la culpa de ser invertido? Y él no tenía por qué no serlo.
(14 palabras).
 
6. ¡Yo quería un hijo, señor! A la cuarta hembra me la eché.
(12 palabras).
 
7. Lo maté porque me lo dijo mi mamá.
(8 palabras).
 
8. Lo maté sin darme cuenta. No creo que fuera la primera vez.
(12 palabras).
 
9. Estaba tan furioso que cuando quise abalanzarme había desaparecido. Si la rematé con tanta saña fue por eso.
(18 palabras).
 
10. ¡Cómo iba a permitir que se acostara con una mujer a la que le habían trasplantado el corazón de María!
(20 palabras).
 
11. Lo maté porque bebí lo justo para hacerlo.
(8 palabras).
 
12. ¡Tenía el cuello tan largo!
(5 palabras).
 
13. Me echó un trozo de hielo por la espalda. Lo  menos que podía hacer era dejarle frío.
(17 palabras).
 
14. No lo hice adrede.
(4 palabras).
 
15. El balón era mío y muy mío. La navaja, no. Pero de lo que se trataba era del balón.
(19 palabras).
 
16. Pueden saberse todas las lecciones de corrido, papá, pero no ser tan bizco… Si se dio con un canto…
(19 palabras).
 
17. Yo no quise darle tan fuerte.
(6 palabras).
 
18. ¡A poco los hijos de los millonarios tienen algo especial en la cabezota!
(13 palabras).
 
19. A mí, mi papá me dijo que no me dejara… Y no me dejé.
(14 palabras).
 
20. ¡Sí, le dije a la recondenada que el chocolate quemaba!
(10 palabras).
 
Adenda.-  En el prólogo a su libro Crímenes ejemplares, de donde se hizo esta selección, Max Aub escribe: “Confesiones sin cuento: de plano, de canto, directas, sin más deseos que explicar el arrebato. Recogidas en España, en Francia y en México, a través de más de veinte años”.
 
“Esto que sigue no es sino murmullo –pedestre, pero murmullo. Murmullo de agua sobre musgo”.
 
“Otros quedan perdidos en cien libretas que no son de hojear con detenimiento, sería no más perder tanto tiempo  para tan poco”.