ESOS OTROS SUEOS
Publicado en Feb 09, 2009
ESOS OTROS SUEÑOS Por: Armida Martìn Subo las escaleras sin detenerme, caminando como si danzara...como una pluma...siempre subo así. Me encanta sentir bajo mis pies la ligereza que me da la juventud. ¡ Esa cinturita!, me digo al pasar frente a un espejo...Aunque suene a presunción, soy una mujer hermosa. Al abrir la puerta, me encuentro con la total soledad que me acompaña desde hace años, soledad que he elegido, que he aceptado. Camino hacia el fondo, abro la puerta de mi habitación perfectamente arreglada , tal cual la dejé antes de salir en la mañana...¡como me gusta el orden!... Me desnudo lentamente, y así, sin nada de ropa, me acerco al aparato de música...busco Carmen, esa ópera maravillosa, de la cual ya tengo elegidos los extractos de mi preferencia. Contrariamente a lo usual, la ponga a un nivel bajo...el estruendo me impediría pensar y es lo que deseo hacer esta anoche... Dentro de mi apartamento el clima está controlado, así que aún haciendo bastante frío afuera, el ambiente es sumamente agradable. Sin ningún prisa, me adentro al cuarto de baño, abro las llaves del agua fría y caliente y dejo que la bañera se llene....pongo algo de sales que inmediatamente comienzan a hacer espuma...voy a mi bar, me sirvo un vodka-tonic con bastante hielo - es lo único que tomo de vez en cuando -y me sumerjo plácidamente en el agua burbujeante... Que bien me siento... repaso mi vida llena de éxitos profesionales, sin altibajos dramáticos desde que era estudiante...muchos amores, algunos desengaños, pero también amada por uno que otro de esos hombres que desgraciadamente, quizás para mí, pasaron sin pena ni gloria... Allí, en la privacidad de mi agradable cuarto de baño, deseaba pasarme un largo tiempo...Cada vez que sentía que el agua comenzaba a enfriarse, abría la llave de la caliente para seguir disfrutando de ese momento ìntimo que hoy había decidido alargar lo más posible. Que sensual puede sentirse una en absoluta privacidad... De vez en cuando miraba hacia el espejo que tengo en frente y me contemplaba en èl, completamente desinhibida...mi busto firme...mis caderas redondas, mis piernas bien torneadas...acariciaba mi cuerpo tomando la espuma entre mis dedos y pasàndola a todo lo largo de mi figura...tratando que la suave caricia de mis manos me llevara a sensaciones que erizaban mi piel...mientras tanto, de vez en cuando, tomaba un gran sorbo de mi bebida... Cerré los ojos sintiendo una placidez inexplicable...dejàndome envolver por la mùsica que me llegaba desde la habitación, pensè que tal vez, solo tal vez, me hubiera gustado en ese preciso momento faltar a mi promesa, y fumarme uno de los cigarrillos que por años habìa desechado...sonreì, mejor ni pienso en ello me dije; un sorbo de este vodka aún helado, me confortará y me ayudará a descansar. De pronto, tuve la fuerte necesidad de arrebujarme entre las sábanas de mi grande y ancha cama, que me esperaban tibias ....si, si..allì quiero estar...Me levantè, usando los dedos de mis pies para destapar la bañera, y sintiendo como el agua desaparecìa con rapidèz...me envolví en mi bata y literalmente corrì...corrì a acostarme...La tirè al suelo y me abracè a las almohadas...deseando seguir sintiendo como unas manos àgiles y expertas, recorrìan mi cuerpo suave y perfumado . Un estremecimiento y un frìo helado me hicieron despertar de pronto, gotas de sudor bajaban por mis mejillas...quise sentarme y no me fuè posible...recuperando mi conciencia plena, pude darme cuenta de la realidad, esa que me ha acompañado desde que puedo recordar...todo habìa sido un sueño... A un costado de mi cama, como siempre, como cada dìa, estaba inmóvil, mi fiel y silenciosa compañera... mi silla de ruedas...
Página 1 / 1
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|