Buen soneto, prolijo, ducho en la rima. La rima de los tercetos es la variante más libre, y en este caso está bien resuelta. Si componer uno era el cometido, está más que logrado. Lo bueno de los sonetos es su exigencia en cuanto a cantidad de versos: nos obliga a pensar la rima y el tema al mismo tiempo que la llegada de los tercetos apura a la conclusión, por lo que en el proceso de escribir aprendemos muchísimo sobre como encontrar en nosotros el numen que buscamos afuera. Así que, estimada, no se preocupe tanto por la inspiración, que el trabajo de sonetista, a fuerza de horas de silla (tengo otra versión del dicho, pero no es adecuado a una dama) se logra esa supuesta inspiración tan mentada.
Saludos!

Agradezco a los gentiles caballeros que me obsequian con tan generosos comentarios.
Esto me obliga a esforzarme para merecerlos.
Saludos y otra vez, gracias.
Haydée

Me declaro ignorante en sonetos y rimas. Me cuesta y admiro a quienes lo hacen. En este caso tu desafìo lo has concretado maravillosamente. Despuès de los comentarios de los expertos Filiberto hoy y tal vez Verano màs adelante puedan aportar màs. El comentario de Alfonso, que dice ser osado, es impecable. Ni hablar del amigo y maestro Filiberto, todo un experto
Felicitaciones y tambièn estrellas de sonetos

Mi muy querida haydeé / tu modestia me conmueve / y a mi corazón remueve / lo digo con buena fe / a vos te sobran méritos / te otorgo todos mis créditos //
El amigo, colega y compatriota Alfonso líder en el promedio de lecturas por poemas publicados en Textale, con una décima espinela de muy buena factura se adelantó para hacerte reconocimiento. Muy buena iniciativa y lógico reconocimiento. Pero tuvo la extrema generosidad de colocarme al lado del inalcanzable Verano (son gajes de la amistad),

Mi querida "protegida" haydeé, loas al mérito de tu envidiable Soneto, máxima calificación sideral y adjunto mi sólido cariño. Filiberto


.

Mi querida amiga Haydée,
ya has superado el reto,
para componer un soneto
hay que ponerle bastante fe,
comenzar con tino y buen pie,
terminarlo sin arrogancia,
para así darle prestancia,
tal como lo has realizado,
con tan perfecto acabado,
es un triunfo a la constancia.

Tal vez no califico para hacer una crítica a un soneto,
menos cuando quien lo escribe, tiene sus bien ganados
quilates. Los maestros Filiberto y Verano los harían con
conocimiento de causa, pero mi osadía está desbordando
los límites de mi congénita modestia.
No por eso dejaré de felicitarte ni de enviarte un montón
de estrellas.
Besos: Alfonso