Sola y cabizbaja se encontraba,
Otras cavidades oscuras la observaban,
No sabía que la miraban;
Pero su cuerpo sentía que sola no estaba.
 
Era bella y comparación no tenia,
Podría buscar en el mundo; pero otra
Como ella no encontraría,
Era única en su clase y verse podía.
 
Su cabellera era larga y oscura,
Como la noche adornada de estrellas,
Una hermosa figura que la hacía bella,
Que pretendía estar solo con ella.
 
Sus deseos fueron grandes a tal punto
De llevársela al inframundo,
Quería que fuera solo para ella y tenerla
Hermosa pero nunca fea.
 
La mujer fue privada de su libertad,
Así que una decisión debía tomar,
Tomó una daga perdida y su rostro
Comenzó a desfigurar.
 
La muerte la vio bañada de sangre,
Ya no era más la joven deslumbrante que
Poseía el brillo de un bello diamante.
 
Así que la muerte le quito lo único que
Poseía en su vida, su mortalidad para que sufriera.
 
Vaga errante por las calles solitaria y despreciada,
Mientras que la muerte a una nueva tiene
En su mirada.