Aquí estamos los "militronchos" dejando pasar el tiempo. El aburrimiento es algo más superable que este soporífero Servicio Militar Obligatorio. Es mejor no aburrirse demasiado. Así que saco excelentes notas en Instrucción y Deportes. La planilla ha quedado perfecta. Aquí estamos los "militronchos" mientras yo me troncho de risa pero con más paciencia que Job. ¡Jó que experiencia más sensorial, sensitiva y sensacional!. Pero me han endilgado un CETME que está más averiado que "La Cafetera" de mis años de campamento veraniego. Estamos en el campamento. Hay que tirar como sea. El CETME se encasquilla cada vez que disparo hacia la diana. Pero como yo no soy de los que creen que mi CETME es mi novia, como dicen los más veteranos a los que no hago ni caso ni nada parecido cuando entramos de novatos, corrijo la planilla. Al 6 lo convierto en un 8 y quedo como soldado ejemplar. Por cierto... al alférez "Rostro Pálido" y al teniente "Jeta" no les di dos hostias porque Dios es grande y yo soy cristiano. El capitán González me designa como el mejor. No le importa lo del 6 convertido en 8 en esto del tiro con CETME. ¡El seis convertido en ocho y yo me troncho... de risa... pero con más paciencia que Job! ¡Jó que experiencia más sensitiva, más sensorial y más sensacional! Aquí estamos los "militronchos" dejando pasar el tiempo. Aclarado el misterioso caso del 8 en tiro con CETME. La vaca se salvó de milagro. Y es que hay algunos, a mi lado izquierdo y a mi lado derecho, que ven menos que tres en un burro y mandan las balas a lo más alto de la loma. Supongo que la vaca no tuvo más ganas de pastar en el campo de tiro. Es mejor no aburrirse demasiado y yo me paseo por entre las compañías con la compañía de mi sombra y este CETME que está más "gripado" que una Vespa subiendo la Cuesta de las Perdices.