SILENCIOS Y PALABRAS
Publicado en Sep 22, 2012
Prev
Next
Image


 
 "Si activas tu mente con drogas sicodélicas, la única forma como puedes describir cuanto sientes es electrónicamente" , escribió el polémico y perseguido escritor y sicólogo norteamericano Timothy Leary, fundador de una secta seudomística marginal, llamada Liga para el descubrimiento espiritual, donde el LSD era elemento básico y sacro de comunión y unidad del individuo consigo mismo y con el mundo.

Todavía se puede leer, con algún provecho intelectual y sicológico, su texto Las siete lenguas de Dios, sobre la estructura y funcionamiento de la mente humana. Expone su teoría de los siete circuitos de la conciencia, que más adelante aumenta a ocho en su obra Exosicología. Nixon llegó a considerarlo el hombre más peligroso de Norteamérica, hasta el punto de perseguirlo, atraparlo, juzgarlo y condenarlo a 95 años de cárcel.

 Leary afirmaba que los cambios entre circuitos podían estimularse y lograrse mediante  alteración de la conciencia, usando técnicas de meditación o consumiendo drogas sicodélicas especiales para cada uno de los ocho circuitos. Por cuanto  concierne a mis vivencias de escritor, y teniendo presente que los Versículos del demonio publicados periódicamente aquí en Textale son producto de algún tipo de experiencia cercana a las descritas por Leary, cuando activo mi mente con poesía, la única forma como puedo describir cuanto siento es con palabras. O con silencios. Un particular silencio eligiendo estructuras de manifestación literaria, poética o narrativa como el haiku, la poesía zen o los cuentos atómicos.

Pero palabras y silencios se rechazan aunque habitan  un mismo cuerpo: el mío. Chocan entre sí, aunque convivan en una misma mente y un mismo cerebro: los míos.Y aunque se sostengan en  la misma conciencia. Cuando hago poesía con la palabra, confirmo que niego el silencio, contamino lo silencioso, las cualidades de lo silente, dentro y fuera de mí. En mi mundo interior o en la ciudad donde vivo.

Nada bueno puedo esperar entonces de mis palabras, si cuanto pretendo es el silencio para aprehender con este el mundo, para vivirlo y manifestarlo a través de mis sentidos.Y si intento hacer poesía con el silencio, niego la palabra. Sobran las imágenes. Para nada sirven las metáforas. Ninguna función desempeñan los ritmos. Cualquier experiencia con el lenguaje está de más. Cada letra es una bofetada y el párrafo o la estrofa, el simple verso, serán el suicidio interior del poeta.

El poema será siempre la mayor y más elegante transgresión del silencio. Violación de los silencios donde se fraguan los poemas. Lo irónico de la escritura: ¿a quién esperamos encontrar en el texto? ¿Al autor de ese poema que estás leyendo? ¿A ti mismo, reflejado en sus ideas y  sentimientos o en algo que rechazas o aceptas? ¿Al mundo donde nos circunscribimos?  ¿Qué señales esperamos del poeta y del poema? Quien lee un poema, parece buscar el camino para escapar de lo real. Un sendero para acceder a lo irreal.
Embriagarse uno con las palabras. Inyectárselas, aspirarlas, digerirlas. Ser acariciados en los sentimientos o  las emociones, en lo intelectual, por las palabras. No es necesaria ninguna droga sicodélica. No es esencial ninguna técnica de yoga. Basta con abrir por completo cada uno de nuestros sentidos al mundo de la cotidianidad, y el milagro de la palabra o del silencio estará ahí, frente a nosotros.

Creo que es válido finalizar esta reflexión, incluyendo el texto de la Escuela de arreglo floral que describe la flor así: "Un asiento es una flor; un jarrón es una flor; una tabla y un puesto son también flores; el agua es una flor, las hierbas y las ramas son -por supuesto- flores; el florista es una flor, y la mente también es una flor".
 

 
 
Página 1 / 1
Foto del autor Umberto Senegal
Textos Publicados: 901
Miembro desde: Feb 13, 2012
0 Comentarios 327 Lecturas Favorito 0 veces
Descripción

Breve ensayo en torno al silencio y las palabras dentro del proceso de escribir.

Palabras Clave: Timothy Leary LSD poesía poemas silencios palabras técnicas mente cerebro circuitos niveles conciencia zen realidad cotidianidad.

Categoría: Ensayos

Subcategoría: Análisis



Comentarios (0)add comment
menos espacio | mas espacio

Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.

busy