y me quería morir...
y ya no tenía razón ninguna de existencia,
o eso pensaba...
y llegó,
me agarró de la mirada,
se sentó a mi lado
y nos fumamos las horas
mientras se llenaba de mis palabras
sucias y vacías...
y lo aguantó,
y me volvió a preguntar
con los ojos
que qué coño me pasaba,
qué era lo que me asustaba
si hacía tiempo
que no me importaba
que ya no me amara...
y se quedó,
y se acabaron las palabras vacías,
las palabras sin sentido
dieron paso a palabras sucias,
pero de un sucio suave y aterciopelado,
ese sucio que te encanta,
ese sucio que te llena el cuerpo y te sacia,
ese sucio...
y no se ni cómo, ni cuándo, ni dónde, ni por qué...
bueno, me hago una ligera idea...
ahora...
no hay más que momentos sucios,
ese sucio que te hace reir,
ese sucio con el que disfrutas,
ese sucio que te hace vibrar,
ese sucio...
y ahí está,
con el espíritu bloqueado,
pero con ganas de bailar
y demostrando cada día
que es cierto, yo valgo más,
pensando que es el momento
de correr sin mirar atrás
y caminar este paseo
sin pensar a dónde llegará...
y dime que sientes ¿nudos o latidos?...
te digo lo que siento yo,
porque no me hace
falta ninguna metáfora para definirlo,
velocidad, pasión desmesurada,
deseo extremo,
ganas de derretirme
atada a tus caderas...
lo siento, he fallado,
no sé hablar sin metáforas...
**devylotik** (the other side of me...)
Tú y tus caderas...