LO QUE UN CAF TRAJO A LA MEMORIA
Publicado en Nov 17, 2012
¿Por qué no?...
El tiempo ha pasado como agua temporal de río y la pregunta golpeó insistente sobre la mesa donde se encontraba bebiendo un mediocre café, aunque debía reconocer que el lugar le gustaba mucho por la vista a la plaza. Se vió sentado a sí mismo, un par de mesas al fondo con Fátima. No hablaban mucho por cierto. Quizás por el cúmulo de historias apiladas en sus gargantas o por el recuerdo cómplice y furtivo de una noche extinta. ¿Por qué no?... El atolladero de autos era atróz. Ese momento, ese espacio de exquisita melancolía se diluía a través del sonido de indolentes claxones que sonaban una y otra vez. - "¡Qué hijos de puta!" - pensó justo en el momento en que había cerrado los ojos y la vió en completa desnudez, bella y pura. Con la mirada alojada en la profundidad de su alma. ¡Qué ganas locas de hacerle el amor y enredarse entre las sabanas y hacer de ese instante una eternidad! ¿Por qué no?... Se dijo a sí mismo aquella noche... ...y nunca más la volvió a ver.
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|