Recuerdo el día en el que te conocí pero no el ultimo en el que me lastimaste, recuerdo cada sonrisa que con picardías te provoque pero no los mares de lagrimas que tan fácil lograbas hacerme llenar. Recuerdo cada rose de mis manos con las tuyas pero no los duros golpes que me dabas sin dudar, recuerdo, recuerdos solo eso son, duro es aceptar realidades fácil es evitarlas.
 
Es duro que cada recuerdo intentando hacerte feliz sea manchado por tu intención de jugar, un juego en el cual tu fuiste quien creo las reglas, decidías quien jugaba y quien no, como juez y verdugo siempre lograbas mantenerme en una realidad, irreal que creaste para retenerme como tu A bajo la manga, como ultimo recurso, detenerme en esta realidad, confundido, solo, despojado de mi vos, sin salida, hasta que finalmente terminaste el juego del cual fuiste la única vencedora.
 
Recuerdos de cosas que solo existieron en esa realidad en la cual permanecí cautivo solo eso me encontré al terminar tu juego, me encontré en una realidad tan dura que solo pensaba en regresar a ese mundo irreal que creaste para mi aunque solo me utilizaras, aunque nada fuera real, nada mas importaba, el dolor que esta realidad para mi desconocida provocaba tanto dolor que pensaba en dejar de respirar pensando que tal vez así ese dolor me dejaría.
Varios años han pasado desde aquel perverso juego, algunas heridas aun siguen abiertas, dicen que el tiempo todo lo cura pero las cicatrices siempre quedan, como huellas, marcas de esas que no ves frente a un espejo pero que se ven en tus palabras, en tus ojos, en esos pensamientos y reflexiones, siempre a la defensiva, diversos son los rasgos de heridas como estas, personalidades frías, duras son solo corazas que se forman después de haber sido herido tan profundamente.
 
Volver a comenzar después de heridas del alma es duro, pero no tanto como simplemente dejar de avanzar, estancarte, acostumbrarte al dolor, a las noches sombrías, tristes y solo, a los días que poco a poco van consumiendo tu alma, sin voluntad para buscar mejorar, porque ya es tarde y no tienes salida. Pero si tu voluntad es fuerte a tiempo, con el tiempo comprenderás que lo ocurrido no es mas que una enseñanza de la vida, una como pocas de la que aprendes mas de lo que puedes ver, con el tiempo terminas agradeciendo lo ocurrido por haberte llevado a convertirte en esa persona que eres hoy.
                                                                                                                               Brunnix