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M CLASE DE AMOR
Publicado en Nov 29, 2012
 El cobrizo color del otoño, pinta un monte de ensueño. En mí vida también es otoño, pero no es bonita. Mis colores no son rojizos ni cálidos. En mí vida todo es gris. Gris mi existencia, gris mí pasado, gris mí futuro. Sentada en una roca del camino, siento que mí soledad es cruel Mi soledad es cruel, aunque buscada La compañía a veces es más cruel que la soledad Por eso me gusta el bosque. En él me siento sola. Pero nadie me daña, nadie me menosprecia, nadie me engaña. La gente es un engaño, la vida es un engaño. El amor, es el mayor de los engaños, el mayor de los verdugos. Si amas de verdad, estás expuesta a toda clase de peligros. Si amas de verdad, lo más seguro es que ese amor te haga sufrir. Quizás idealice demasiado el amor por eso me desilusión fue más grande Para mí el amor es y seguirá siendo algo muy especial Algo tan especial que no se puede comparar con nada Para mí el amor es ese que se expresa con una mirada. Ese que tan solo el roce de su piel te haga sentir un escalofrío. Ese que hace que ese amanecer sea distinto y maravilloso. Que las tardes de lluvia sean bonitas. Que el olor de la tierra mojada te deje recuerdo. Que una flor sea más valiosa que la mejor joya. Que el recuerdo del primer beso, dure tanto como tu vida. Que el mejor de los regalos sea un hijo. Ese es el amor que yo esperaba. Ese es el amor que nunca tuve. A lo mejor no existe esa clase de amor. A lo mejor solo existe en mi loca imaginación. A lo mejor nunca debía de haber esperado un amor así. Pero lo esperaba y me canse de esperar. Por que el amor que yo entregaba se perdía en un abismo sin fondo. Un abismo que se tragó todas mis ilusiones mas bellas. Un abismo que solo ofreció a mi amor desprecios, sumisión y penas. Él no sabía nada de amor, pero si de hacerme daño. Sí de hacerme comprender, que ese amor que yo esperaba, no era para mí. Sus ojos no sabían decir, ¡Te quiero! Su piel era insensible a una caricia tierna e inocente. Para él las tardes de lluvia, eran odiosas. Para él yo, solo era un cuerpo como cualquier otro. Por eso estoy sentada al borde de este camino. Por eso estoy en este precioso bosque. En él seguramente cualquier gacela ha sido mas amada que yo. Mas comprendida y menos humillada. Por eso estoy sola. Sola por que tome una decisión. Si nadie me podía dar amor como yo lo daba. Yo no quería otra clase de amor. No entregaría mi amor a nadie que no lo sintiera como yo. Mí amor no tendrá dueño, pero tampoco será pisoteado ni ultrajado. ¡Mí clase de amor no! A. Rico
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