PIQUETEROS
 
 
Amanece con un tronar de tambores
que sin ser de guerra, también lo son.
Y por las calles de Buenos Aires
los piqueteros van...
 
¿De dónde vienen esos hombres,
esas mujeres, esos niños?
¿Quién los manda, quién los empuja,
Acaso sea solo el hambre?
 
Son bocas que no tienen pan
son mujeres que han parido muchos hijos
son hombres sin trabajo
son niños descalzos y sin cobijo.
 
Y con ellos el rito del fuego
negras columnas de humo los anuncian
mientras que los citadinos asustados
indiferentes, miedosos los ven pasar.
 
Con carteles y banderas rojas
con consignas que no podemos entender
con reclamos ya muy añejos
difíciles de satisfacer...
 
En torno a la olla popular
se arremolinan para comer
es otra protesta de los de abajo
que nadie puede contener.
 
Hay un grito de rabia
y una mirada llena de esperanza
el alba despierta asustada
al ver los ojos rojos de la trasnochada.
 
Buenos o malos, no lo sabemos
la historia mejor los calificará,
tienen entraña de revolución
y tal vez, la harán.
 
Los piqueteros piden pan
trabajo, tierra y medicina
a pesar que me duelan en el alma
son parte de mi Argentina.