Los condados más orientales acabaron siendo incorporados al Condado de Barcelona (pero con sus dialectos catalanes diferentes al dialecto barcelonés) y formaron parte de la unión dinástica con el Reino de Aragón (en 1162), mientras que el Condado de Urgel mantuvo su dinastía (condal nada más y no Estado, ni Nación, ni Reino, ni tan siquiera País) hasta 1413 y, para mayor heterogeneidad, el Condado de Pallars tuvo su propia idenditad condal hasta 1491. Por otro lado, en este complicado galimatías heterogéneo, los taifas (reinos musulmanes de Tortosa y Lérida) habían sido conquistados por el conde de Barcelona (no rey por supuesto) Berenguer IV en 1148 y 1149 respectivamente, y no se constituyeron como nuevos condados sino que Ramòn Berenguer (que sólo era conde y jamás fue un Rey o un Jefe de Estado) adoptó el título de marqués de estos territorios.

Para abreviar (en otro capitulo hablaré más de los condados catalanes y su heteregénea existencia dentro de España) quien quiera estudiar más a fondo el proceso (y no como el ignorante chileno Leonel Muñoz Tigre que nunca ha sabido ni jota de lo que es la Historia de España y que más le valdría empezar por conocer la Historia de Chile en vez de fastidiar diciendo tonterías sobre Cataluña) que investigue a fondo la Historia de España. Yo afirmo que la unión del casal de Barcelona (observen que no digo Cataluña entera sino solamente Barcelona) con Petronila (hija del Rey de Aragón y transmisora de los derechos de su Casa Real) en 1377, posibilitó la formación de la Corona de Aragón y la continuación de la expansión feudal, que empezó por el sur y el poniente musulmán. Además he de explicar que Tortosa fue conquistada en 1148 y Lérida en 1149 por los aragoneses a los musulmanes. El hecho de que los condados catalanes (y vean que hablo en plural porque eran muchos, muy diversos, con dialectos catalanes diferentes y con contínuas batallas y peleas entre ellos mismos) se hubieran unido a Aragón por matrimonio, da a entender claramente que no hubo ninguna conquista de carácter militar ya que lo único que sucedió es que los condados catalanes pasaron de depender de los reyes carolingios a depender de los reyes de la Corona de Aragón. Ningún dato histórico afirma que existiese un Reino de Cataluña independiente.

Además, el Conde de Barcelona, al que se asociaron la mayor parte de los condados catalanes (pero no todos) integró los títulos del Rey de Aragón desde la formación de la Corona de Aragón y, posteriormente, del Rey de España (Monarca Católico o Monarquía Hispánica). Todo el recorrido histórico, desde la Prehistoria hasta la actualidad, demuestra que jamás hubo una Cataluña Unida ni jamás hubo un Estado de Cataluña, una Nación llamada Cataluña, ni tampoco un Reino de Cataluña independiente. Por no haber no hubo un País de Cataluña.

La Historia actual demuestra que todas las tierras catalanas hispánicas (dejando afuera a Andorra y las tierras catalanas galas o francesas) han sido siempre parte de España, desde los Reyes Católicos, los Austrias de Madrid y los actuales reyes de la Casa de los Borbones. Al igual que "la prueba del algodón" la prueba histórica nunca engaña cuando se sujeta a la verdad y no a las mentiras que cuentan los pocos catalanistas independentistas que buscan una imposible independencia para ocultar sus manejos económicos después de haber robado tanto o por memos ignorantes como el chileno Lionel Muñoz Tigre que ni sabe ni entiende lo que es España y mucho menos lo que es Cataluña.