A PROPSITO DEL AMOR
Publicado en Feb 13, 2013
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 En relación al amor, se me ocurre aquel aforismo de Karl Kraus: ¡Quien tenga algo que decir, que dé un paso adelante y se calle!, porque sobre el tema parece que todo está dicho sin haber concluido nada. Dice el adagio popular: “Se habla de la feria, según le haya ido en ella” Así habrá quienes expresen maravillas sobre el amor. Otros, como Arthur Schnitzler, quien circunscribe este sentimiento a este círculo aforístico: “La sensualidad nos quiere persuadir de que estamos enamorados, pero la razón se resiste al engaño. Entonces la fantasía brinda su oportuna ayuda”. Sea como fuere, desde todos los planos del conocimiento humano se ha pretendido definir al amor, incluso desde el coloquial y el del sentido común. Tal vez desde este último, en relación al tema, se me ocurre transcribir algo que alguna vez leí:

“Eros susurra a la dama, la que en quietud espera, ella escribe versos a su amado que ya llega: El que ama,  –le dice Eros–  al amor nunca define, porque el amor se siente, se padece, se goza, se sufre o se imagina; también se ruega, se acepta o se ofrece como moneda de cambio por mórbida caricia. Los que aman, buscan en el amor todos los segundos para sentirlo y cuidan mucho de cometer el error de perder el tiempo en definirlo. Porque el amor... ¡Es para vivirlo!  

Luego Anteros, vehemente aconseja a la dama enamorada: Sí, el amor es lo más sublime, manjar de dioses para los humanos, pero sin el sexo no es nada, sólo volcán sin candente lava, ola perdida en la marejada, ráfaga de viento que no mueve molinos y se desvanece entre suspiro y suspiro.  En cambio el sexo sin ser divino, es la encrucijada de todos los caminos.  La flecha que se retira de la herida, cavidad huérfana, invasor exhausto con la cabeza entre las rodillas, cíclope vencedor-vencido, dador de placer y de vida.

También es receptáculo de pasiones, fruto que se consume con hambruna de satisfacción y ansias de perpetuarse, manjar para todos los blasones solamente acotado por la luna. El sexo es amor y pasión fundidos en un beso. Suma de dos que se convierte en tres, camino sublime del cóncavo al convexo. El amor desde siempre… ¡No crece sin el sexo!”

¿Qué es el amor entonces? Pregunta tortuosa para mil respuestas de aquellos que aman y para los que no. Conceptualizar este sentimiento es empresa mayor, poetas, escritores, ciudadanos comunes, la filosofía, hasta la psicología social han pretendido esclarecer el asunto, no se diga aquellos que “padecen” este sentimiento y vuelcan el ánimo en la inicua tarea de querer definirlo.  

Porque el amor, como sentimiento que es, suele ser ambivalente, puesto que al amar lo mismo se goza que se padece. Es un gozo cuando es complementado por la persona que hemos escogido bien, como nuestro ideal amoroso. Es también dolorosa experiencia y gran desesperación cuando no es correspondido. El desamor, es decir, el no ser o dejar de ser correspondido por el ser que amamos, me parece es la forma más humillante en que se manifiesta el amor, pues el que ama, persiste en su sentimiento, aun sin encontrar respuesta en la persona a quien se ama.

El amor también es policromo y tema recurrente, por ejemplo desde la perspectiva poética, color de rosa cuando la pareja se corresponde, cuando juntos soslayan todos los problemas que en ese devenir amoroso enfrentan, pero también es negro como la noche sin luna, cuando es esquivo, traicionero, enfermizo de celos, violento –que los hay–  interesado, mezquino o mentiroso.

También el amor en ocasiones es incomprendido, se le sataniza cuando está presente en la otredad, a la que nos resistimos a aceptar, cuando no tenemos la capacidad para entender lo que es diferente a nosotros, sólo por serlo y nos volvemos egoístas al no aceptar que existen algunos seres que… “¡Se aman tanto!, como nada el salmón buscando placer en la muerte, ¡contracorriente! ¡Se aman contra todo!, contra la iglesia, contra natura, contra toda esa gente quienes no saben ni quieren saber de eso... que el amor puede ser bueno aun entre el mismo sexo”.

En el amor, como práctica social, convergen varios factores que deben ser tomados en cuenta  por quienes pretendan elaborar una definición de este sentimiento, por sencilla que esta sea: la autoestima, el poder de la palabra en la persuasión o seducción del ser a quien se pretende amar, el libre albedrio, características físicas, psicológicas, sociales y valores morales de los integrantes de la pareja. Todos estos elementos deber ser parte del análisis de la persona a quien le hemos de entregar nuestro amor. Porque en ello nos va la felicidad o la desdicha si nos equivocamos en la elección.

Y si no nos dejamos llevar sólo por la emoción, acudir entonces a la razón, revisar las distintas teorías acerca del amor en pareja, existe una bibliografía extensa, en ella seguramente encontraremos información acerca de la psicología evolutiva del amor –entre otras–   así como  temas relacionados como pudieran ser: sociosexualidad, los roles sexuales en el amor, el amor apasionado, amor de compañía, amistad y muchas otras más.

En cuestiones del amor y por los tiempos que vivimos muchas personas temen arriesgarse en una relación amorosa, porque piensan que van a sufrir un dolor emocional. Han pasado los tiempos en que con sinceridad, espontáneamente, casi con candor se decían las palabras mágicas ¡TE AMO!  que producía un mundo de ensueño. En la actualidad esta expresión entre los amorosos se ha desteñido, ha perdido su magia y lo más preocupante, la credibilidad. Ello, en aras de la mercadotecnia, del interés bastardo, que tiene que ver con la práctica del sexo por el sexo, el dinero o la posesión social.

El “te amo” ha perdido su esencia íntima para pasar a ser sólo una expresión coloquial desprovista de calidez humana, de autenticidad y de afecto totalmente puro que provocaba generalmente un ¡SI! pleno de júbilo que emanaba de lo más profundo de nuestro ser, dando lugar a un momento de total apertura para amarse sin reserva y sin temores. Ahora, difícilmente encontramos parejas que vivan y gocen una mínima reciprocidad de amor verdadero entre ellos. Casi siempre se busca tomar ventaja del otro a quien se dice amar. Por ello también son muchos los que ocultan sus sentimientos, temerosos de sufrir un rechazo o un desencanto. ¿Temor razonado o irracional?

Vivimos, debemos aceptarlo, en un mundo en donde prevalece la actitud del desamor, de los amores a medias, de la ausencia de amor y lo que es más trágico, la práctica oprobiosa de fingir amor por fines aviesos. Ello ha dado lugar a una inseguridad que genera incredulidad hasta desconfiar de nuestros propios sentimientos, con mucha más razón, de los sentimientos de los otros. Irremediablemente hemos ido perdiendo la capacidad de amar libremente, hemos ido acotando el ejercicio de amar porque creemos que el amor traerá conflictos interpersonales.

Debemos pues recuperar la capacidad de amar, porque es muy cierto que el amor es la más grande expresión del alma. Y si es tanto el miedo de amar quien nos consume negándonos la dicha de amarnos en pareja, ser generosos entonces y prodiguemos nuestro amor fraternal entre los demás, porque amar al prójimo también es una lección que no terminamos por aprenderla.
 
 
 
 
 
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Palabras Clave: a propsito del amor. eros anteros diversidad.

Categoría: Ensayos

Subcategoría: Anlisis



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LUMA54

Fabuloso e interesante escrito
con tu permiso me lo llevo
FELICITACIONES
Abrazo de amistad desde la distancia
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February 25, 2013
 

kalutavon

Gracias por leer y comentar, correspondo con respeto y afecto el abrazo de amistad. Afectuosos saludos.
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February 25, 2013

Battaglia

El amor en sí es puro un sentimiento y un don positivos. El amor no duele, somos nosotros los que llevamos las cosas hasta ahí justificando que alguien nos dañó o nos mintió. y entonces solo por el siemple hecho de que las cosas no salieron como yo esperaba, si la situación no me es favorable esntoces justifico mi frustración, enojo, ira, etc diciendo que el amor duele. En efecto hoy en día decir te amo es como decir voy al parque, nos da lo mismo no porque no lo sentimos sino porque el consumismo nos ha educado para dejar de sentir, nos han hecho creer que solo las cosas materiales nos pueden satisfacer y de esta manera vamos perdiendo contacto con nuestro yo interno que es justamente de donde emana el verdadero amor!!!!!

Bastante ilustrativo e interesante Kalu, da para mucho más amigo!!!
a favoritos!!!
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February 13, 2013
 

Fairy

Interesante y necesario de relerlo una vez más, hay varios puntos que me llegan profundamente, vuelvo a decir Interesante, grato de leer y algo más apegado a la realidad...
Saludos amigo
Sachy
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February 13, 2013
 

antonia rico mendez

DESDE LUEGO QUE ES COMPLICADO DEFINIR EL AMOR ES TAN VARIADO QUE NO HAY DEFINICIÓN POSIBLE PERO PARA ESO ESTÁN LOS POETAS PARA PONER ESTRELLAS Y LUNAS Y HACERLO MARAVILLOSO. COSA QUE NO SIEMPRE ES VEDAD, UN ABRAZO
Responder
February 13, 2013
 

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busy