Decadencia
Publicado en Mar 12, 2013
Desde el fondo al cuarto
las sombras se alargaron sobre su lecho prolongando extremidades de silencios que asilan al rostro como pedruscos en rebote a cada quijada. Ayer le amaneció en tormenta no se detuvieron los arroyos de sus cuencas y cada horror visible desde el parpadeo abrazaba más la soledad. Es la hora del encuentro no cordial cuando los cuerpos se fatigan en un éxtasis de imborrable decadencia. Agatha M. Seixas
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Enrique Miguel Prigue
Carlos. A. Gutierrez. A
Quelo Tirode Laspata
Te dejo cordial saludo
Agatha Miguel Seixas