Orgullosa y medida
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Me lo dijeron insistente,
Las voces del corazón,
Y tras  mi terca razón,
 Sucedió el accidente.
Al verme bien atendida,
Tanto mimo, tanta maña,
Una casa en la montaña,
Junto a un río a mi medida,
Un poema siempre anida,
Y empluma al caer la mañana.
 Engreída  y consentida,
Impetuosa libertad,
Das muy buena partida,
Para no saber llorar.
pendenciera y tormentosa,
Tus versos desprecié:
´´te amo luz de mi vida
Te busco de la tierra al sol,
Si vienes luz esculpida,
Te mezo en un girasol.´´
´´te llamo con la montaña,
Solo mira, sigue el río,
Entre los pinos te sonrío
Te cantamos soberana.´´
Y fui yo tras mi vida
Sin oído a tu romance,
Que paliza, que trance,
Perdí  por  bendecida.
Vuelvo muy segura
De tus brazos encontrar,
El asombro va y me apura
A esa potra quieres más.
Cuando logré  que conmigo,
Rompieras a hablar Rolando,
Ya no eres mas mi amigo
Y militas en su bando,
Tratándome la pelusa
 De  pérdida y despeinada
¡Yo que fuí tu musa!
¡Yo que fuí tu hada!
Que lo tengo y no lo quiero,
No lo tengo y lo deseo,
Requerido esta, así lo veo,
De caricias que no creo,
De paciones que no consiento,
¡Hay que pena! no me miento,
De triste que estoy amiga,
Le robo rimas de viento,
 Así  encontrar el aliento,
Y vencer a mi enemiga.
¡Atiéndeme Rolando!
 Soy  tu orgullosa y medida,
Un ave se fue volando,
Y vuelve trinando tus rimas,
Añoro tu verso que mima,
Del río, la tierra y el sol,
En tu prosa que me  estima,
Y me corona mirasol.
 decide  trabajador,
Si quieres, o no, que derroche,
Lo que tengo esta noche,
Preparado para tu amor.
Mi penita  en tu alcoba,
Mi cuerpecito  de bolero,
¡Hay! mis muslos altaneros
¡Hay!mis pechos de caoba.
De orgullosa y medida
Estoy  a  su  merced,
Mi celo  a ti te rima
 Y tú ya  no lo ves.
¡ Ya No sigas con ella,!
¡No prolongues mi castigo,!
¡No le consientas  a aquella!,
¡No has terminado conmigo!