ENTRE EL AMOR Y LA POSESIN
Publicado en Mar 24, 2013
Algunas veces se miraba con el espejo sus vellos púbicos, que medio tapaban su morbo individual como una herida ardiente. Esperando aunque sea un dedo acariciador de sus ahogos sexuales o una lengua que mojara lo ya mojado por la espera de esa lujuría penetrante y deshojada en cada una de sus pétalos por el aire del desprecio y la compañía del insomio azul estrellado, que le traía la locura de esa conducta sexual. Fatiga de sus pensamientos asesinos; narradores de muchos capítulos y enemigos de sus creencias religiosas, como el de estar juntos hasta que la muerte nos separe. Inquisidora frase de su sufrimiento y a la vez inspiradora del aumento de sus púpilas con fílmes de horror. Provocaciones de un infame instrumento confuso entre el amor y la posesión, nombrado celos que destruyeron sus sentidos al no poder interpretar esa exquisitez poderosa que nos acompaña largos años en el proceso de la madurez: la vida que para ella fue una llama eterna de sus ojos muertos, porque no tuvieron la destreza de volver a buscarla en otro abrazo, en un te quiero, que se quedaron en su casa en la sombra de sus labios rencorosos de deseos, perdidos en el tren, sobre sus oxidados caminos que sólo envidiaron, odiaron y criticaron con bilis a los otros sin pensar un minuto, esos veintícuatro sueños de colores del día con sus secretos terrenales o espirituales. Buscando en ellos hasta el último de nuestros suspiros nuestra salvación. En su caso, pudo ser también la infidelidad, abriéndose como una flor llena de miel para endulzar su presente y pasado amargo...
Página 1 / 1
|
Katherine
Carlos Campos Serna
monicamabel.bal
Carlos Campos Serna
Es escrito por una ¨ mujer¨, pues me he inspirado en varias de ellas luego de observarlas y sentirlas...
Remy Etienne
Carlos Campos Serna
Remy Etienne