- ¡Hola! ¡Aquí el Jefe Superior de la Policía de Madrid, Diego Castillejo Rios! ¿Quién es usted?
- Yo soy yo, tú eres tú y él o ella es él o ella.
- ¡Escucha, gracioso! ¿Te olvidas de que éste teléfono graba todo los que se dice y desde dónde me están llamando? No me gusta que nadie se pitorree de mí, pues tengo muy mal humor porque éste no es mi día ni tampoco el tuyo.
- Bueno es saberlo, Jefe ¡Oiga, Jefe, no se enfade tanto que le van a dar retortijones en el estómago por culpa de las lentejas! 
- ¡Hola, Juan! ¿Cómo has sabido que estoy comiendo lentejas en lugar de pollo con arroz que es mi costumbre?
- Porque todos los días lunes su linda esposa le da de comer lentejas diciendo ¡si las quieres las tomas y si no las dejas! ¿O no es cierto que eso también lo dice mi abuela materna?
- Mira, Juan... no estoy de buen humor. ¿Puedes decirme para qué me llamas? ¿Estás bien de la cabeza?
- Quizás es que se cree que está hablando con otro porque yo de la cabeza siempre he estado muy bien ya que nunca se me ocurre intentar romper un teléfono de pared con un martillo. Yo no estaré, según usted, bien de la cabeza pero nunca tan mal como quien intenta hacer eso con un teléfono de pared. O sea, Diego, que si yo estoy loco según tú vas diciendo por ahí, no veas cómo debes estar tú. ¡Entendido, Jefe!
- Perdona, Juan, no quise decir eso... pero estoy de mal humor...
- Pues si estás de mal humor dedícate a irte de cacería de patos porque yo estoy muy a gusto con ella. ¿Entiendes o no entiendes, tipo nervioso?
- ¿Quién es ella?
- Los celos son muy malos a la hora de hacer la digestión después de cenar lentejas. Pero sólo me estoy refiriendo a mi chavalilla porque, para que te enteres, yo no soy como otros que se fijan en las chavalillas de los demás y, por eso, en vez de enfadarte conmigo te recomiendo que hables con ellos para que te lo expliquen y si deseas romper el teléfono a martillazos para desahogar tus celos pues te digo, como diría Don Quijote a Sancho Panza, lo de ¡pluguiérame el Santo Oficio que es un oficio muy raro esto, amigo Sancho, de dedicarse a romper cualquier clase de objetos a martillazos limpios que más pareciera oficio de cacharrero que de policía! ¡Yo no estaré bien de la cabeza, según tú y otros como tú que están a tu alrededor dentro de tu Cuerpo de los Elegidos, pero es muy malo para el jugo gástrico tener celos infundados o, mejor dicho, infundidos por otro tercer sujeto que, escondido entre las sombras, te los produce haciéndote ver fantasmas en las noches cuando los verdaderos fantasmas siempre actúan por el día. No te enfades conmigo por decirte la verdad no vaya a ser que salgamos a tortazo limpio y te limpie yo el pensamiento dántote algún mojicón para que aprendas que también yo sé practicar artes marciales. ¿Me has entendido ya o te lo explico con palabras más claras? A veces nos salvamos de recibir un golpe mortal porque Dios es Grande y Jesucristo nos cuida, hermanito... pero cuando tengas celos no los tengas de mi sombra sino de la sombra de quien se oculta para que no se le vea. Porque te hago entender que yo trabajo bajo el Sol pero no me escondo bajo la Luna. 
- ¡Habla en serio, Juan!
-Si mis intuiciones no se equivocan te demostraré en algún momento que estoy hablando en serio. Dale tiempo al tiempo, Diego, y te darás cuenta de que es verdad eso que tanto dices de que por sus obras los conoceréis. Quizás, si Dios lo quiere, hasta te pueda yo demostrar que es cierto que algunos cardan la lana y otros tenemos la fama, como se dice mucho por esta mi amada ciudad de Madrid. ¿Estás cogiendo la onda?
- Pero... ¿entonces quién es ella?
- Escucha, Diego. Tienes algo muy importante que decirles a todos los Elegidos de tu Cuerpo sobre algo que he de informarte si llega el momento de hacerlo, que llegará por supuesto, pero como muy buen informador que soy, te cuento que estoy cenando en Casa Mingo con una persona muy especial. 
- ¿Algún nuevo ligue tuyo?
- En cuanto a ligues desde luego que de ti no tengo nada que aprender. Yo me las como y yo me las guiso a solas. Me parece que tú también te equivocas como ese tal Benito Agapito que ya ha detenido tu amigo el Jefe Superior de la Policía de Alicante cuando dice que voy a coger pocas varillas porque resulta que mis ligues nunca han sido varillas sino de las de muy buen ver en todos los sentidos externos e internos. ¿Sabes lo que es saber ligar o te lo explico con más detalles? ¿Quién te ha dicho a ti que yo estoy ligando con todas? Soy muy selectivo y muy exclusivo cuando ligo así que alguien te ha dado un número cambiado. Mi número preferido es el 56 y no ligo con  nadie menos con la que tiene el número 56 grabado en su genética. ¿Cuándo me has visto tú a mí ligar con todas sin fijarme en su genética física, corporal, ética y espiritual? Tengo muchas posibilidades de ligar con muchas, te lo creas o no te lo creas, y no me importa lo que te vayan diciendo de mí desde la oscuridad de las sombras nocturnas, porque yo he decidido desde siempre ligar solamente con la número 56 de la lista genética de las que me gustan. Las que no me gustan no las desprecio sino que simplemente las respeto pero nunca ligo con ellas. 
- Pero... ¿quien es la 56?
- Es la 1. La 56 es la 1 y la 1 es la 56... aunque sólo tenga 16. ¿Me entiendes este jeroglífico hablado en criptograma o te lo explico enviándote un telegrama para que de stop en stop tengas tiempo suficiente para comprenderlo, entenderlo y aprehenderlo para siempre? 
- Ni idea de lo que me dices. No sé quién es ni quién puede ser la 56 que es la 1 aunque sólo sea 16. 
- Pues entonces no hables demasiado ni de ella ni de mí ni de las relaciones entre ella y yo... porque resulta que yo no soy 16 pero sí soy 18 y no olvides nunca que cuando quieras puedo devolverte la placa de capitán. 
- ¿Estás queriendo decirme que estás enamorado de la que hace el puesto número 16 de tu lista o que hay 16 tipos detrás de ella porque es la 1?
- No te enteras, contreras. Es la 1 pero juega de 8 como yo. Porque tenemos esa curiosa empatía y afinidad deportiva. 
- Bueno. Es cierto. No me aclaro de nada. 
- ¿Entonces porque predicas, alguna vez que otra, que va a ser peor para mí? ¿Crees que soy sordo y no escucho o crees que he perdido la memoria?
- Es que no me entero de nada. Es dificil descifrar ese jeroglifico.
- ¿Has pensado alguna vez que, además de la hermosa realidad, también se une la hermosa fantasía? 
- Ahora si que estoy perdido. 
- Pues la próxima vez no hables sin conocimiento profundo de las fantasías para decir que va a ser peor para mí. Quien en boca callada piensa no dice tonterías en boca abierta. 
- ¿Para decirme esa patochada te gastas el dinero en una llamada?
- Pues sí, es una patochada pero es que ahora yo voy de oca en oca y tiro porque me toca. ¿Creeías que nunca me iba a tocar a mí tirar de oca a oca porque ahora me toca y pasar de puente a puente porque me lleva la corriente?
- ¿De qué me estás hablando, Juan?
- De fantasías nocturnas, Diego, de fantasías nocturnas que, de pronto, se hacen realidad... para que vayas aprendiendo un poco de un simple capitán que nunca será un Jefe Superior pero que tiene tantas fantasías nocturnas que Jesucristo se las ha hecho realidad. Eso es para que te enteres de que para ser un gran cristiano no necesito ser un gran anciano sino simplemente un niño que sólo evolucionó hasta ser un joven y se quedó siendo sólo un joven lleno de fantasías nocturnas que, al abrir los ojos a la realidad, resulta que son una realidad. Por sus obras los conoceréis, Diego. Algún día muy próximo ya te lo demostraré. Mientras tanto, cuídate mucho de quienes esconden sus sombras en la oscuridad.
- ¡Vaya patochada!
- ¡Vaya manía que has cogido con llamar patochadas a los sueños! De patochada nada de nada, pues otro es "El Pato" y no yo. No es pato lo que estoy cenando en Casa Mingo porque aquí la única especialidad que hay es pollo frito con ensalada, acompañado todo con sidra. Estoy acompañado, por supuesto, con la 8. 
- Pero... ¿otra vez con el jaleo de los numeritos?
- Sí. Otra vez con el jaleo de los numeritos. Escucha bien, si a una 8 le sumas una 8 resulta que el resultado es una 16. Luego la 8 es también la 16 y no la 15 que es la niña bonita. La 16 es la niña bonita más la 1; luego la 16 es la 1. 
- ¿Es que me vas a dar la tabarra otra vez con ese follón de los numeros tuyos?
- Que te repito, falto de entendederas, que yo no armo follones nunca pero... como prometí ante el cadáver de Atilano Eros Amazote... esto sólo es el principio del final. ¿Estás siguiendo bien esta comunicación?
- Sí. Y como me estés tomando el pelo te la cargas. 
- No. Tu pelo no me gusta para nada porque me contento con el que tengo yo y, por eso mismo, no te estoy tomando el pelo ni le tomo el pelo a nadie de manera aviesa y premeditada. Eso lo hacen otras personas y no yo. Prefiero seguir cenando un buen pollo frito con una buena ensalada de lechuga y tomate pero sin pelos en la lengua.
- ¡¡Te voy a colgar definitivamente!!
- Espera un momento, Diego, te voy a comentar algo sobre la tira cómica de Popeye. ¿Conoces la tira cómica de Popeye?
- Sí. La conozco muy bien. 
- ¿Quién te cae mejor, Bruto o Cocoliso? Es más gracioso Bruto... ¿no es cierto?.
- Para mí no. A mi me cae mucho mejor Cocoliso. Con Cocoliso me río más y mejor. 
- Quizás sea porque Bruto repite siempre el mismo chiste enésimas veces por día. ¿No es verdad?
- ¡¡Te cuelgo!!
- ¡Espera, jefe, espera! Toma buena cuenta de lo siguiente. En la calle Amorós, número 15, se encuentra la oficina del antiguo inspector y actual investigador privado llamado Roberto Alcázar de Toledo y Toledo y su ayudante de cama... perdón... quiero decir su ayudante de cámara pero también podría ser hasta de cama a la vez... un niño pijo portugués llamado Pedrín. Lo que te quiero contar es que ese tal Don Roberto Alcazar hace años era un inspector que se llamaba César Augusto Bocanegra de los Infantes y se dedicaba a asustar, con la intención de engañarles, a niños en plena época preadolescentes para llevárselos al Bar "El Paleto" de la calle Alcalde Sáinz de Baranda esquina con Antonio Arias donde, al aprecer, asesinó a un delincuente menor de edad a quien disparó a bocajarro con su pistola sin sacarla del bolsillo de su gabardina y sin darle la oportunidad de un juicio justo; pero antes le hizo cantar de plano sin la presencia de un abogado defensor de menores. Dirígete rápidamente a dicha oficina, mañana a primera hora de la mañana, y les detienes a los dos, a Roberto y a Pedrín, para que cuenten todo lo que han estado haciendo durante estos años. Cuidado, Diego, porque son muy fascistas los dos. ¡Buenas noches y que te aprovechen las lentejas y mi información! 
 
Juan Bautista corta la comunicación. 
 
- ¡¡Jajajajaja!! Un día de estos me vas a producir sun shock traumático producto de la risa. 
- Aquí el único traumado soy yo que no tengo nada de suerte con las rubias platino. Fin de la cena, nena, fin de la cena y principio de la fiesta... voy a pedir una de champán... porque vamos a brindar con un sorbito de champán por el nuevo amor y la tenue luz de aquel lugar hizo latir mi corazón... ¡y entonces fue cuando te besé!
 
Juan Bautista aprovechó el descuido de la despampanante y escultural ecuatoriana española y la besó, sin piedad, en la boca. 
 
- ¡Ten cuidado! ¡Nos está mirando la gente!
- La gente no me interesa para nada. Sólo me interesan las personas. Y ahora se acabó ya lo  nuestro. Ya no trabajas para mí. 
 
Ella se entristeció repentinameente y empezó a llorar ligeramente y en silencio...
 
- Entonces... ¿lo nuestro se acaba aquí?
 
El limpió las lágrimas de ella suavemente con los dedos de sus manos. 
 
- Es del todo imposible que ocurra eso. Es totalmente imposible que se acabe lo nuestro. Lo nuestro no puede acabar jamás porque es amor para toda la Eternidad. No llores, chavala... lo que quiero decir es que ya no sigues ayudándome ahora en este caso porque la cosa es muy grave y no quiero exponerte a ningún peligro innecesario. 
- Pero yo sí quiero seguir...
- De momento no. Solamente de momento, Princesa. Hasta que acabe de encontrar a quien estoy buscando y entregue a toda la pandilla de Águilas Negras que faltan por capturar al Jefe Diego tu labor ya ha terminado. Vete a casa y descansa un poco. Puede ser que echen una buena película en la televisión. Muy pronto estaré de nuevo contigo; pero ahora necesito seguir ocultándote y que no te asocien conmigo a pesar de que ya estamos asociados y undos para toda la Eternidad. No quiero exponerte a ningún peligro procedente de alguno de los Águilas Negras que puede estar muy cerca de nosotros. No quiero que se de cuenta de que eres tú mi esposa verdadera. Hay águilas capaces de comerte viva y, sobre todo, un buitre demasiado hambriento que no quiere saber ni reconocer que el único que tiene derecho a comerte soy yo porque para eso me he casado yo contigo y no él.
- ¿De quién se trata?
- No te preocupes Tú sólo ocúltate ahora de nuevo. Pronto estaré contigo y volveré a necesitar tu ayuda. Quiero mantenerte viva para poder comerte y que no te coma ese buitre. Te cuento un secreto pero no lo comentes con nadie. Existe alguien a quien Atilano Eros Amazote conocía con el nombre de "El Zorro Astuto". No me pudo decir su nombre porque antes de ello se murió cuando estaba a punto de decírmelo. Pero tengo una corazonada. 
- ¿Otra intuición tuya?
- No. Esto no es una intuición normal como las demás. Esto es una corazonada muy fuerte. Como si Jesucristo me lo estuviera diciendo con claridad. Pero tengo que ver si no estoy equivocado. No puedo enjuiciar sin pruebas aunque ya tengo una prueba muy clara que me lleva a la persona que busco. Ahora mismo no puedo concentrarme en eso sino en buscar el origen que transformó a un niño como era Atilano en un asesino en serie como terminó siendo. Le dio tiempo, antes de morir, de darme una pista muy importante cuando descubrió quién era yo en realidad pero tampoco pude aclararle otra cosa fundamental que ya la explicaré a su debido tiempo a la persona que tenga que explicarlo. 
 
Ella volvió a sonreír...
 
- Entonces... ¿volverás pronto a casa?
- En cuanto termine de hacer una diligencia. Prefiero estar solo ante el peligro que ponerte en peligro a ti. ¿Entiendes ya por qué lo hago de esta manera? Soy egoísta en cuanto a se refiere a ti y te quiero comer viva y no comerte muerta. No quiero que te agobies más por mi culpa. Roberto y Pedrín son un chivato y un soplón. Tengo que encontrar a quien busco antes de que le avisen y escape porque si escapa nunca acabará esta pesadilla en la ciudad de Madrid. Así que no te pongas triste y ríe, por favor. 
- Cuéntame un chiste y seré feliz. 
- Érase una vez una chavalilla hermosa que se convirtió en la más linda rosa.  No es un chiste pero puede valer. 
- No sigas más. Déjalo ahí que ha quedado muy bien. ¡¡Jajajajaja!! ¿Me he convertido en la más linda rosa de verdad? 
- Sí. Y es mi última palabra hasta que pueda vovler a verte y te vuelva a cionvertir en una chavalilla hermosa... y así, mientras yo no esté a tu lado, nadie sabrá que eres una chavalilla hermosa sino solamente una rosa cualquiera. Lo cual me beneficia del todo porque no corres peligro de esa manera. Adiós. Sal discretamente, sube a tu Ferrari y vete a casa. Espérame porque volveré más pronto que cante el gallo y no va a cantar hasta tres veces como le sucedió a Pedro porque antes de eso habré solucionado la pista que estoy siguiendo. Estoy hablando en serio. 
 
Ella le dio un cariñoso beso en la mejilla derecha y se marchó discretamente tal como le había pedido él, quien siguió sentado, con la botella de champán por la mitad de su contenido. Se sirvió una copa de la botella y comenzó a pensar hilvanando ideas...
 
- Si algún ismo tengo que aplicar a partir de ahora no es el de la propensión a idealizar las cosas, porque en este asunto nadie ha sido ni es un bohemio romántico sino todo lo contrario, así que no puedo tener a nadie como compañero; y tampoco es cuestión de reducir la realidad al ser y el ser al pensamiento; porque aquí ahora no es cuestión de filosofar sino de tener ideas propias, así que me voy a seguir moviendo por mis intuiciones. Solamente mis ideas, si las ordeno bien, me pueden ofrecer soluciones parciales hasta encontrar la última y definitiva solución. Pero tengo que ir quemando etapas. Ideas. Necesito ideas y nada de ideologías más o menos radicales, más o menos idealistas, más o menos alienadoras. Pienso en que estoy ante personajes verdaderamente dignos de un psicoanálisis profundo. Estoy ante unos Águilas Negras que parece que se mueven por el proceso por el cual el objeo del deseo, que son los niños, se encuentra aumentado por la imaginación de los "viejos verdes" y es que más que animales humanos son animales nada más. Estoy entrando en una esfera de poderes muy peligrosa. Ideas. Debo aplicar ideas para dar soluciones válidas a mis intuiciones y debo saber memorizar bien el pasado para explicarme el presente. 
- Joven... ¿le traigo la cuenta?
- Oiga, camarero, es usted así de bajito o está de rodillas pidiendo perdón por algún hecho inconfesable. 
- Perdón... ¿es una broma?
- ¿Tengo yo cara de broma como la suya? ¿Cree que todos somos tan hipócritas como usted? No es ninguna broma. Le voy a hacer una pregunta aunque ya conozco muy bien su respuesta, ¿es usted partidario de hacer un aborto a las niñas adolescentes o que están en el paso entre la adolescencia y su primera juventud?
- Esto... yo... en fin...
- No diga nada porque ya veo que sí. No he elegido Casa Mingo para cenar por casualidad sino que tengo un buen motivo para haberlo hecho. Y es que veo que ustedes no son lo suficientemente hombres como para casarse con una chiquilla que está embarazada y deduzco, de todo ello, que usted y los demás de su grupito, que los conozco muy bien conocidos, son pro abortistas... ¿o me equivoco en algo?
- No sé qué decir...
- No diga nada. Quédese a solas con su conciencia, camarero. Yo he visto a muchos de ustedes gozar y alegrarse de poder estar con vida y poder vivir lo mejor que se pueda pero... ¿le dan la oportunidad a otros para que tenga el mismo derecho de vivir o los matan robándoles dicho derecho que a ustedes nadie les robó?  ¿Es cierto o no es cierto que es muy agradable vivir sin problemas y por eso hay que asesinar a los fetos inocentes, que tienen vida por supuesto, por eso de lo que puedan decir y murmurar los vecinos del primero derecha no vaya a ser que a la chiquilla la llamen con una grosera palabrota que empieza por p si la ven embarazada sin estar todavía casada ?. ¿Es cierto o no es cierto que es muy agradable vivir a lo burgués de la clase media aspirando a ser burgueses de la clase alta sin importar quitarle la vida a los niños y niñas que están dentro del vientre de una chiquilla porque a nadie le va a importar que se les asesine? ¿Y su conciencia? ¿No le grita todas las noches su conciencia? ¿Sabe usted que es una felonía, una mentira total y absoluta eso que les dicen a las chiquillas de que pueden hacer lo que quieran con su cuerpo pero sabiendo que el cuerpo del niño o la niña que está en el cuerpo de una mujer no le pertenece a su cuerpo porque tiene otro cuerpo diferente? ¿No les explican a esas chiquillas que abortan debido a sus engaños de que pueden hacer lo que quieran con sus cuerpos pero no con el cuerpo de unas pequeñas critaturas que no les pertenecen aunque estén viviendo dentro de sus cuerpos como si fueran inquilinos hasta que salen a la superficie? No les explican nada a sus chiquillas que, ignorantes ellas, asesinan la vida que no les pertenece sino que les pertenece solo a Dios y tampoco les explican que luego sufrirán tales remordimientos de conciencia que, mientras ustedes huyen como cobardes, ellas se quedan solas y terminan por alcoholizarse, drogarse, internarse en un manicomio o incluso suicidándose por culpa de ustedes, miserables. Seguro que son ustedes de los que van siempre a misa todos los domingos y fiestas de guardar junto a los vecinos del primero derecha. ¿Tenéis o no tenéis conciencia, mamarrachos de mierda?
- No sé... yo...
- ¿Tú crees, imbécil, que te está dirigiendo la palabra un borracho porque he tomado un par de copas de champán o te está hablando un capitán de la policía madrileña en plena tarea de investigacion de culpables?
 
Juan Bautista le enseña la placa de capitán.
 
- No sé...
- Ya. Ya sé que eres incapaz de casarte con una chiquilla a la que dejas embarazada y la haces equivocarse para abortar en Londres y entonces sí... entonces te casas con ella pero, en cuanto surgen sus primeros traumas post aborto, pides rápidamente el divorcio exprés porque no puedes aguantar sus continuas depresiones. ¿No es cierto, holgazán? ¿A cuántas las has obligado a hacer eso, morenito espinoso? ¿Por qué eres tan espinoso, morenito, llamándonos homosexuales a los que somos hombres verdaderos desde que hemos nacido mientras tú y los que son como tú os vais haciendo los hombres machitos sin ser verdaderos hombres? Espinoso... merenguito... morenito... dime cuanto te debo... pero te recomiendo que te mires bien en el espejo del water para que veas bien los adornos que tienes en la frente... y no me refiero, precisamente, a esas gafas de sol oscuras que os colocáis en ella para molar y fardar más ante las inocentes chiquillas a las que engañáis vilmente y cobardemente cuando las obligáis a abortar sabiendo que estáis siendo asesinos de vidas humanas. ¿Sabes ya bien cuánto cuesta un viaje a Londres para que ellas aborten y a cuántos tocáis poner cada uno del grupito de "angelitos blancos" para que lleven a cabo esos abortos y así poner cada uno su granito de arena, su cuota alícuota del crimen cometido?. Enano de mierda... ¿qué es un aborto para todos vosotros?... ¿un jueguecito de hombrecitos que no lo son?. ¿Me puedes informar de qué mes es el más apropiado y el más oportuno para realizar este caso de flagrante asesinato? ¿Quizás el mes de julio? ¿A mediados del mes de julio por ejemplo? ¿Sabes que mediero es una palabra que significa que una persona va a medias con otra persona o con un pequeño grupito de personas para llevar a cabo este negocio? ¿Qué es lo que coméis para festejarlo? ¿Tal vez carne de niño o de niña vilmente asesinados? ¿Qué clase de carne coméis vosotros los pro abortistas para que no se enteren los vecinos del primero derecha de que la chiquilla ha quedado embarazada sin estar casada porque si se enteran los vecinos del primero derecha se enteran, de inmediato, todos los vecinos de la barriada? ¿Eso es lo que tenéis miedo de que se sepa en el Paseo de la Florida de Madrid? ¿Quién os ha dado el derecho de asesinar vilmente a un inocente ser humano que tiene todo el derecho de Dios para vivir? ¿Qué opinas ahora?

- Nada... no puedo opinar nada en contra...
- Por supuesto que no tienes ninguna explicación satisfactoria, enano. Parece que te has quedado calladito morenito. Porque no tienes ni puñetera idea de lo que es la vida humana ni de que la vida humana comienza en el mismo momento en que un espermatozoide masculino fecunda a un óvulo femenino. ¿De verdad tenéis conciencia de lo que hacéis "angelitos blancos"? ¿De qué os sirve tener conciencia si es que acaso la tenéis? ¿Sabéis tanto tú como tu grupito de "amiguitos" qué es la conciencia después de haber cometido el peor de los genocidios humanos que se puede cometer? Para tener conciencia, las personas deben tener el conocimiento suficiente para saber que un ser humano tiene pleno derecho a su propia existencia desde el mismo momento en que el óvulo femenino es fecudando por un espermatozoide masculino. ¿No sois todos vosotros, santitos de mierda, ya lo suficientemente mayorcitos, aunque seáis bastante enanos por cierto, sobre todo en lo mental, para ir mintiendo de esa manera tan vil, ruín y cobarde, a las inocentes chiquillas que caen en vuestras manos? ¡Sois unos asesinos! Que Dios os perdone a ti y a todo el grupito de tus "amiguitos" que parecéis todos juntos "angelitos blancos" ante la sociedad, pero que tenéis el alma más negra que el cerote. ¿Tienes algo que decirme ahora antes de irme? ¿Qué tienes que decirme tú y tu grupito de "amiguitos", que solo sois un atajo de mariquitas nada más, sobre lo que es ser un verdadero hombre?
- Nada.
- Pues entonces, cuando le veas, le dices al "santito" del merenguito Fernandito Javierín  Marian Blanco del Real de la Madrid que el maricón y el loco lo es él y no yo. Dile de mi parte a ese paleto de mierda que si sabe cómo son los hombres en su pueblo porque no tiene ni puñetera idea de lo que es ser un hombre ya que sólo es un marica con complejo de "mamitis crónica". Y dile que se atreva a decir lo que ha dicho de mí pero en mi cara y no por la espalda. Pero adviértele que si se me cruza algún día por delante le parto de un solo tortazo la cara de gilipollas que tiene. Díselo de mi parte.
- ¿Cómo se llama usted?
- Dile que no soy El Conde de Montecristo buscando venganza porque no tiene ni una centésima de valor humano como para preocuparme de buscar venganza contra él por las mariconadas que dice y que hace; sino que soy Juan Bautista haciendo la Justicia de Dios. ¿Me has entendido bien, enano?
 
Juan Bautista se levantó de su silla, sacó un billete de 500 pesetas y se lo entregó al camarero pro abortista.
 
- Y quiero el cambio completo porque a los que son como tú y como ese tal Fernandito Javierín Marian Blanco del Real de la Madrid no os regalo yo ni las gracias. 
 
El camarero pro abortista se dirige, rápidamente, a la caja y vuelve con todo el cambio.
 
- Cuéntalo delante de mí y espero que sea exacto.
- Está exacto. No me he quedado ni con un céntimo de más. 
- ¡Entonces, adiós camarero asesino! ¿Has visto a ese bombón de chavalilla que estuvo cenando conmigo? ¡Pues dile de mi parte al maricón de Fernandito Javierín Marian Blanco del Real de la Madrid que esa es mi esposa... para que aprenda a saber lo que es un verdadero hombre con buen gusto cuando elige a una mujer y la próxima vez que haga un juicio sobre alguien que tenga la inteligencia de preguntar antes a los que le conocen bien de quién se trata!
 
Y Juan Bautista se dirige hacia la salida de la Casa Mingo de Madrid dejando a todos los allí presentes con la boca abierta tras haber escuchado todas sus palabras y al camarero pro abortista más rojo de vergüenza que un tomate canario. Juan Bautista dice las últimas palabras mientras está abriendo la puerta de salida.
 
- ¡Dale recuerdos de parte de la canaria a tu amiguito el maricón de Fernandito Javierín Marian Blanco del Real de la Madrid, so mariconazo!