• normando
aprendiz de poeta y declamador
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  • País: Chile
 
 Prodigiosa viene mi bella, Colmada de bien y deseo, Laboriosa,  siempre doncella, Luciendo,  su  talla  y su pelo. Bésame obrera   en celo, El  celo de  tus  primicias, Tentado  con tu anzuelo,  Curado en  tu sonrisa. Regáñame con desvelo, Y   esa  pasión   animal, De  tu boca  tan sensual, Son los labios que yo muerdo; En  ese   inmenso momento y  embriagado  en tu cintura Bellísima  y   madura Ya  desnudo  esta  tu cuerpo…. En un humilde lecho Mi hembra  fértil y pura Me  derrocha su dulzura Y  el  orgullo de sus hechos; Ella ronda y yo  la asecho, Derramando  sobre  su piel, Algunas  caricias de miel, Sonrojadas por su pecho…        Que celo desvergonzado,  el  de mi obrera  dadivosa, no  hay   futuro ni pasado si  te  entregas  tan  gloriosa; Y al amarme así  orgullosa, En celo dame un hijo, Así  en tu vientre cobijo, A mi  niño y  a  mi rosa….    
quiereme en celo obrera
Autor: normando  584 Lecturas
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Romance de la luna obrera 1                                                                                                  ­Luna lunita de niña,Caminas por la calleja,Con tu aire de princesaY tus ojitos de adivina.Hice mi primera rimaMirándote desde la reja,El primer amor que deja,Los  dibujos en la silla.Luna lunita llena,¿Por que me enamoraste?Por que al tocar,  tú cara,La mano me  golpeaste,No pensaste un poco,Que al ser tú tan suave,Viví mi primer desvelo,Corriendo por todas partes.Luna lunita jugando,A tu casa bote mi pelota,Pretendía entre otras cosas,Verte con ella  cantando.Luna lunita sueño,Y Quiero tocar tus trenzas,Si lo logro también puedo,Dormir en la escuela, siesta.Luna lunita crece,Tan serena como bella,Si de niña era una estrella,De mozuela  resplandece.Luna lunita quiero,En mi canto confesar,Que por ti yo vivo, muero,Me distraigo al estudiar.Luna lunita quinceañera,De santiago  entiende esto,Que de quince años puestos,Ya van cinco a duermevela.Romance de la luna obrera 2Luna lunita vengo,Un poema a declamarte,Pues pretendo lisonjearte,Con los versos que yo tiendo.Leyenda de mujer sencilla,                                    Clase humilde y laboriosa,De  belleza campesina,Sosegada y silenciosa.Hija del pueblo puraDe belleza proverbialSu  pecho es un panalque dibuja su cintura,Hermosa, lista, maduraSantiagueña de verdad.Los grillos al pasar,Preparan sus violines,Y los niños volantines,Enarbolan en su andar.Bellísima y  sencilla,Nobilísima combinaciónQue rosa más pura y fina,preciosay  sin ambición. Su figura no admite queja,Sus piernas de perdición,Kilómetros de pasión,Dejaste mujer discreta.¡Que chilena santiagueña!¡Que proletaria impetuosa!¡Que montaña más rabiosa!¡Y que cuello de doncella!En su camino dichosa,Los árboles viejos cantan,Rimas que ella danza,Con batir de mariposas.Pretenciosa pero inquieta,Ella canta  la canción,Y en su voz una emoción,Que el ruidoso día aquieta.Corre lunita solitaria,A la bella noche espumesca,Vigorosa y siempre fresca,Por el barrio legendaria.Luna lunita el cielo,Envió su embajadora,A su luz trabajadora,Entre hojas de ciruelo.En una vereda de lirios                                               Y con gigantes violetas                                           Ríe siempre con los niños,                                          A los que firme mira y sujeta.Por la calle y emprendida,Veinte años luce, encanta,Un coro de niños canta,A su intensa belleza latinaEntonces tu cuerpo danzaEn una comparsa sin fin,Candorosa y cristalina,¿Que respuesta hay para mi?Romance de la luna obrera 3Luna lunita habla,Estoy ciego en el silencio, No es  prisa, no es  tiempo,Inquietud, se lo que me embarga.Que larga la  expectativa,Tu limonero cargo en invierno,No me escuchas ni me miras,¿Viajo al cielo o al infierno?Adonde vas tan pura,Mirando tan altanera,Luna lunita espera,Que ya dejo la cordura.Luna lunita escucha,No me hablas, no me muevo,Si te callas yo me muero,Yendo en paz en esta lucha.Si al contarte yo mi amor.,Solo me pides tiempo,Y  los versos que te tiendoSe convierten en rumor,En un zumbido lastimero,Sin sentido del dolor. Luna lunita oscura,Tú la dura, yo el firme,                                     Y pretendo coincidirteHasta vencer tu armadura,Tanto como la atadura,De este silencio temible.Hasta entonces vas coqueta,Los obreros te suspiran,Y en los micros vas altiva,Caminando entre violetas.El asiento te conceden,Por donde luzcas tu cuerpo,Las ferias de todo el pueblo,También, en los viejos trenes.Yo que te rondo y me ignorasEn la enredadera de tu reja,Un gorrión que ya no implora,Al  gato que, su vida deja.Diez años andando,Al borde de tu brecha,Rodando una bicicleta,Amando, no sabes cuanto.Amor con rabia y quebranto, Luna lunita ilusionoQue escuches pronto mi solo,Para no cantar con llanto.¿Por que tanto me estremece?,Si tú nunca me has amado,¿Y porque voy  enlodado?¿En una vida que no crece?Tanto amor y yo tan terco,Tanta luna y yo tan ciego,A otro prodigias tú apego,Terco y necio, no lo acepto.Luna lunita obrera Por que me despreciaste, Tanto tiempo te tomaste,Que la fuerza ya me deja.Poco amor y mucho daño,Que heredad me dejaste,Ya por ti van quince años,De pálido y amargo desgaste.    ROMANCE DE LA LUNA OBRERA  4   Luna lunita ingrata,Que malsano este cariño,Que te quiero yo de niño,Y no sacudo mi nostalgia. Luna lunita de maldad,Conmigo te ensañaste,                                                    ¿Dónde quedo mi voluntad?¿Por qué duele al levantarse?A ver el mar, con el te fuiste,Mi entrevista con la envidia, Esa que ciega, y quema por triste,Aquella brasa, de cruel perfidia.Mi  bajeza  arrebata,Luna lunita que vergüenza Mi corazón y mi conciencia,Entonan la abulica tocata:Luna lunita espero,Poderme Lugo parar,Pero al ver tan cerca el suelo,Mi herida no puedo lavar,Luna lunita no puedo, Pararme, Ni caer mas bajo,Enlodado en un atajo,Sin brinco, paz, ni fuego.Luna lunita toma,Mi espada y mi escudo,Y al dejarlo ,te aseguro,Que ya no queda nada.Luna lunita no vivo,ni muero por esta pasión,Y con un abrigo de frió,Destruido esta el amor.Luna lunita no canto,Solo entono lamentos,No se que soy, ni siento,Si riego la herida con llanto.Luna lunita embustera,Ya no camino erguido,Y tan solo en el camino,Ya no tengo mi lumbrera.Luna lunita soy, Por tu culpa un desterrado,De un prodigio campo fértil,Que de frió fue quemado.Luna lunita fuí,Tan gallardo y hoy no soy nada,Por tu embrujo nunca vi,El puñal que me desangra.Luna lunita la pena,De pensarte en otros brazos,Acresenta mi fracaso,Tus caricias son de arena.Luna lunita debo,Salir de este fracaso,Si te quise en este paso,Y  mal tú me has pagado, Yo  mendigo tu regazo,Y al destino pido fiado.De créditos rebasado,Como mortal de este siglo,Estoy solo en este abismo,Ni el prosac me ha auxiliado.Romance de la luna obrera 5    Luna lunita tengas paz,Tengo más de treinta años,Estuve veinte enamorado,Mayormente de incapaz,El caso es que hoy el sol,Brilla  con insolencia,Me enrolo para su agencia,Convirtiéndome en farol;Hizo el tiempo su trabajo No te envió al olvido,Pero dio un buen atajo,Y hay consuelo en el camino.De aquel anacoreta,Que te dio su romancero,No lo conozco, ni quiero,Tenerlo de amigo cerca,Tipejo tan lastimero,El pasado se lo llevo,Y a todo los que lo vieron,Un ovni lo  capturo.Ahora que soy empresa,Y surgente emprendedor,Miro, venzo  y voy,En silencio por mi presa;Aprendí por la grandezaDe verme un sollozo aplastadoDios enseña y no es pecado,Lo que daña nos da fuerza;Y pase de pobre quiltro,A pastor de fina tierra,Proveo  protejo y estoy,De caricias requerido,Adelante siempre voy,Y por esto, soy querido.Tengo un jardín prodigioso,Verde todo el invierno,Los helechos mientras duermo,Me presagian exitoso.Y vuelves luna marina,La sal secó tu senda,Ya no eres mí perdida,Y la herida no me quema,Recobre mi gallardía,Mi orgullo, mi ambición.Ahora presumo razón,Al rechazar sin cobardía.Luna lunita lo siento,Tanto giro en esta vida,Si te sientes agredida,No lo escucho ni lamento,Soy hombre de palabra,Por demás, supersticioso,A un amor poco ardoroso,¡Con orgullo se resguarda!                        NORMANDO LÉON  
romance de la luna obrera
Autor: normando  671 Lecturas
Duelo de los encantos       En   la   taberna   “entre   poetas,” Un   duelo  se  ha  iniciado,  Con  el  pecho embargado, Apoyan  a  su profeta. Definen  en   su   libreta, Un  tema  de  alto vuelo, El  cual estallo  en el cielo Convirtiéndose en  leyenda.    La que  canta una nación, Es un   tema discutido, Legendario  y abstraído  Desbordado en su pasión   ¿A que  le entregas tu voto? Sus nalgas o sus senos, Y aunque a ambos deseemos,   Ensoñados por su  foto, Solo un voto  anoto, Por su  encanto singular, El  que nos lleva a trovar Y  del cual somos devotos.       Por el bando de los senos Se apunto raudo Pablo Y sudando por su bando Hablaría con denuedo:   -Honorables de las letras, Recae en mi doble honor, Pues el ser elogiador, Es mi destino y meta; Si,¡ me llamo marioneta! De sus montes y sus cumbres, En la tierra son la  lumbre, Que conjura su silueta.   Apegados estoy a ellos, Inoculado por mi madre, Bien lácteo, y mas tarde, Una pasión, un sello.       Han descubierto mis ojos  El  Placer de lo profano, Aun no nombro mis manos, Embriagadas están de antojo  Por tal, juro con arrojo;  Ser Prosélito de la estrella Que deja  su  bella estela, Erguida en su botón rojo. .     Son descanso sincero Para niños y hombres Que pues; pequeños  o enormes  Yo Con ellos, soy  barquero. En  tesoros el primero Y pido un aplauso sagrado A sus senos he cantado Me consumo por entero.-       ¡Un aplauso  enajenado! Tras el  juramento de Pablo, Salio el poeta llorando, Por sentirse  afortunado; Tras  breve descanso el estrado, Todavía conmovido Señala a un poeta abstraído, En un Canto iluminado:     -No puedo dejar de alabarlos, Ni de rendirle adoración, Y aunque me den sanción, No puedo dejar de mirarlos,  Que feliz  de imaginarlos, Y  los ojos no me miran, Redondos  y   con rima No puedo dejar de amarlos.   Honrado estoy de elogiar, Sus bien trabajados traseros,  El más fino terciopelo,   Con   El más dulce abejar   Midió dios con sus dedos, Dejo unas  curvas  de más, Para amarlos  con desvelo, He ir, de menos a  mas Creaba     un arroyuelo Y una mujer lo tienta  Formas de destino y sueño Sus  nalgas que desorientan.     Con La vida en sus caderas, Yo rezo  esta oración, Contenido  en emoción, De  alabar sus  posaderas;   Pues sus curvas  altaneras, No deja  quien resista, Su amuleto de conquista, Ni  su  cuerpo en la ribera.    Sus nalgas de atardecer, Y de primavera violenta, Mi cuerpo entero tienta, De delirios y rosicler; Luego, en el goce de ver Sus  nachas  de hada enfadada, Desafiando sobre mi almohada, Mi calma  y todo mi ser.   ¡Como es que  sucede ¡ Estrógeno  fertilidad, La sonrisa de deidad Que sus glúteos me concede.   Al   subir las escaleras, A fe,  me desconcierta, Ya que deja en su cubierta, Sus encantos  sus banderas; Sana y fresca en esta  era, Que  bondad tan redonda; Hermanos formad  la ronda,  Amadlos,  pues no hay frontera.           En    el   bar  “entre  poetas”  Un  duelo ha  terminado DECIDA quien   ha  elogiado De  manera más completa.
duelo de los encantos
Autor: normando  610 Lecturas
aquí en  tu resplandor,renuevo mi voto amargo,amapola sin embargome embrujaste en tu fulgor,un conjuro abrasador,tu  Verde salvia mirada,Intensa  y recién celada,amada, mas no mi amor,hurtando tú vergel estaba,mítica cazadora de abril,Vergel prodigioso gentil,atrapa y la rosa clava,y yo , que me precio de  bien,mi fertil campo juvenil,pronto supe que es sufrir,el silencio de tu piel.confundido caminaba, fármacos celestiales,disteboticaria edén,que triste,me curaste y yo cantaba.primavera vital loaba,esa miel  que te  viste,sea la magia posible,por los frutos que te amaban.mi  soledad morbosa,la paz ahora es mesquina,Verbo amor siendo furiosa,no te obligo, flor esquiva.Mi tiempo mejor desdeñas,Hermosa como temible,Me  miras y no enseñas,Si eres fiera o apacible.Impetuosa entre las flores,turgente,  bella y firme,Con anzuelo de ilusiones,ya no tengo donde irme.Te querello, flor esquiva,Tan Soberbia y yo humilde,Preciaste tu fuerza divina,En mi pobre casa de mimbre.Hoy  charle con mi honor,Haz  tu voluntad plena,Reza, mi destino amor,O dame muerte serena.voluntario aquí voy,por galardón llevo pena,suspirando decidido estoya esperarte flor chilena.esperanzado en los confinesdonde muchos pierden el juicioy en hermoso precipicioyo te canto con clarines.no cesare de escribirtealgunos, dicen, es arte,sea mi camino amarte,y sea tu destino herirme.persigo yo con esto,mi templanza anunciar:esquiva , he de luchar,en tu nombre en el invierno.así pretendo con arrojo,extender tu lozaníacubriendo con mis despojos,la lluvía de letanía.                                                        Perpetúese  este sello,No  sientas miedo, florida,Esto, Por ser yo  destello,De tu  alma que cruza mi vida.Por que no solo los dioses,También los que tienen fé,Sepan amigos sin voces:Mi  vida por ella es. .        Normando león
flor esquiva
Autor: normando  597 Lecturas
Excúsame  nativaExcúsame,nativa,Para ti, yo no existo,Si alguna vez te he visto,hoy te tengo por perdida.Ahora que voy a prisa,Sirena ofreces atenciónBanquete  ,vino y paciónYa no eres mi premisa.Con tu sonrisa bandolera,Y tu verde destino vital,Desbordarte y proverbial,De los pies a la cabellera.No te importo el tiempo,Ni tú ciclo hormonal,Solo viste un pasatiempo,Un amigo espiritual.Cedí, como callejera,ni lo quise, ni  me opuse,Que astro el tuyo, ¡que luces!Si gano, no me reluce,Si pierdo, no me convenzo.Así bien, nativa en verso,¿Qué presentas tan  gloriosa?¿Qué pretendes mentirosa ?¿ser de pronto mi universo?Cuando solo buscaba,Tu encanto de sirena,El silencio me otorgabas,nadando en playa ajena.así obtienes lo que quieres,Y quieres buen dinero,A ese perdedor no quiero, Pobre y triste es lo que eres.Lo siento, musa febril,Tarde supiste quien soy,Tengo renta, honra y abril, Adelante  miro, adelante voy.Doy sin esperar,Y recibo sin pedirlo,Sin pensar sin medirlo,Camino con buen azar.Yo  aquí, emprendado de otra,Tú allá   emprende contigo,Ni malicia, ni castigo,Te deseo, ingrata potra,No te apenes por celosa,Que yo sufro el castigo,De no tenerte, ni tenido,Y de no robar tu rosa,por tus labios perturbado,por tu cintura muriendo,no me beses de costado,que sufriendo estoy riendo. ¿Y que con todo esto?Me quede desconcertado,Ya me tienes  bajo arresto,Y de males consolado.Por  dios, que despeinado, Nada me enseña el tiempo,Vamos nativa resumiendo:¿hay consuelo al afectado?Excúsame   nativa, Si almirarte, te desvisto,pues tu  beso no resisto,Y tu celo me cautiva....
excúsame nativa
Autor: normando  577 Lecturas
Aquella  estrella que cobija /, la   luz    de    todo   el    cuento,/  sencilla,       sin         sortija,/   dulzura,  sin     tormento;  / en   buen     y    mal     tiempo  /   de amores     requerida, /señalada    por     temida,  / y  soñada    por    sus besos.  / cantada y celebrada, / por los niños  y  sus risas;  / engreída, según las damas, /  que le temen por querida, / femenina y distinguida /  su paso y su porte / de extremo a extremo el orbe,  /le   murmura   pretendida./   Su mensajero el viento, /  la  acosa  con   solicitudes; / el que la quiera: sude, /pues le aguarda un universo, /  ya que este monumento,  / da  coqueta bienvenida , / a los ojos siempre mira, /  y  te clava  con desvelos. /   Por ser  su rostro y  su aliento, / una ceremonia  divinal, /        con una  figura  fatal;  / que busca siempre  el cielo,  / su vientre   a todo celo, / en  su  alma esplendorosa, / por  nombre lleva rosa, / como rosa lleva por cuerpo. /     A  pocos dejo  el evento /  de alguna  caricia medida,/ en  las calles y avenidas, / su cintura va luciendo, / con prudente  movimiento / y con  ropaje  sencillo, /   una rosa en el camino;  / un suspiro con un verso.  /   fue en el parque forestal, /   de santiago de chile, / encontró a quien le  persigue, / con arrojo  sin igual, /  era un mozo  frontal, /  y  brillante de   mente, / por voluntad y por accidente, /  apegado al verbo amar.  /    dióle  una flor  a  la dama /mientras tomaba su mano/ a los  ojos la    miraba, / y  de  flores embriagado,/  su cara va tomando,  / con  alabado  fuero,/ y ella dice: caballero, /  ya  me estas  enamorando./     tan noble como macho, /  perdida   es que  me tienes, /  por tu verso y por tu trato, / yo  presiento que me quieres; /  y  ya mi atención tienes, / al ofrecer tu confianza,  / adivina  adivinanza: / que con un beso  se selle.   / en los juegos de balancines, /  en un  parque precioso, /  las hojas  cantan  de    antojo,   /en  manitas infantiles,  / en   tonos  sorprendidos, /  de amor y de  nobleza; / este  coro  de belleza /,afinado  por suspiros;  / rosa  (bi)  doceñal: /  soy  quien soy y tu quien eres,/ el  amor  en nuestros seres, /  lleva una historia  inmortal, /  seré  caballero  leal, /  y  te beso por distraída;/ había  una vez, había, /  un   gran amor en el forestal.....  /        Y fue su mismo  encono  /     y  siempre de la mano, /  del  forestal  al cerro / , por  la calle pío  nono,  / diciendo de este modo: /  rosa  de dos destellos, /  por tu alma y por tu sello, /  cantemos  amor a coro.  /  Y    oír el  primer te quiero, /  en  el  balcón de santiago; 7  pulmón   bienaventurado  /patrimonio verde obrero, /  en un  funicular de madero, /  bajar por el zoológico, /  recorrer  museos, lógico; visitar  al    heladero.   /  Tarde  recreo  del año; /  entre amores y consejos,  / toma el camino ermitaño,  / le guiña el ojo derecho,  / se acercan  pecho  con  pecho,  / en  escaleras de piedra;/  con  la mirada en la hierba, /  deseada  por lecho.... /   Ella es de el y el su dueño: /como la vertiente de la piedra; /  de la cual agua bebieron, /  y con la que su cuerpo refresca./ mientras tanto ella piensa,/ que al igual que el mirador; /   si  sincero es su amor, /  no contiene  la vergüenza, /   Nni las del arbusto florido,  / que les retiene en la esquina, / con sus besos de felina; /  flora  y  alma del camino,   que pasión dice el destino; /  y los eucaliptos duros;  / llaman   a los viejos  muros /  y  los muros a los espinos...   /  El camino brinda un lecho,  / que el adorna con lino, /  ella siempre  con cariño; /  coloca  su mano en su pecho, /  en un escondite  estrecho,  / de arbustos delirantes; /  que temblaban por sus partes /  y  también  por sus hechos.  /   La  magia esta  consumada: /  son  dos  y  una    parte,  / divididos en el arte, /  de ser todo y no ser nada. /  refrescados por las  hadas, /  y  por  un  romance perdido,/ enamorados en un nido, /  que vigila  la  alborada. /  confundidos se encontraban, /  por no perder el aliento; /  encontrando entre su cuerpo, /   las   caricias que faltaban. /  su pelo ella   cantoneaba, /  con furiosa urgencia; /   si  lo  suelta  con  presencia, /  si  lo abrocha iluminada./     Que bien se siente vivir, /  ese    frondoso silencio;  /  amor es más que sentir, / es construir un  imperio, /  instantes  de cautiverio, /  de sudores cegados, /  por gemidos decorados, /  con  engastes de misterio.  /  ¡OH! ¡ gran san cristóbal! /  ¡atalaya     atemporal! /tu  corazón de volcán, /  palpita  en los  danzantes; / con candores arrogantes, /  evaporados de un rosal; /  dejando el  aroma esencial, /  templado en  los  amantes.    /           Teniendo por almohada, /  rondas  de tréboles enanos;  / picaflores desvelados  / suspenden hierbas  agraciadas, /  por   que ella   las rasgaba; /  en su delirio cabal, /  con música estival, / por  la brisa vitoreada /.   Su presente y su fortuna, /  se batían  al momento:  / arboledas que talento; a los amantes arrumas, /  y a  dos almas desnudas, /  les concedes un cielo, /  de un infinito anhelo, /  de sentirse con ternura. /  Y se sigue  murmurando./ de los peumos a las palmas,/ que en su amor hay calma, /  y en su calma hay un tornado; /  pues de su furia tocado, /  en una noche de cerro, /  flores, hierbas, hojas, trébol, /  cómplices son cuando: /  un amor ha germinado, /  y ese amor los va abonando. /       Tendidos y consumados, /  en su infimito cerro; al estar tan cerca el cielo, /  nuevos  males han llegado./  la noche que ha ocultado, / la silueta de los amantes,  /  también  a  espías jadeantes  / y  a  fetiches   enajenados; /  sus sueños han truncado /  de  la mañana  ala tarde,   y  mientras su bien arde: /  su desplome es conjurado. ....    /            Y  rompe en la noche silente: /  cuatro antorchas de fuego,   / los rodea un miedo ciego,  /  junto con cuatro dementes , /  entre   un  nido  serpientes, / escapan   el alma en vilo; /  ella dejo su  corpiño, /  entre  la hierba confidente; / el    lienza    el    presente, /  y lo  que viene a su daño: /  su rosa , su rosa sin  engaño, /  marchitada  y   yaciente, /  secada   su vertiente, /  en  malditos cien años; /  rasgando sus bellos paños /sintiéndose una indecente. .. /   Su amor  no se le iguala, /  consejo le   da su honor,  /si los detiene es libertador;  / ¡entonces cumpla y vaya!  /¡deténgalos con agallas! /  y  libere  a su preciosa, /  por nombre llevaba rosa; /  y   quererla es liberarla.  /      Ella presiente su arrojo, / y le dice en desconsuelo: / si te ausentas yo  me muero, /  si te quedas yo no corro, / por que  eres ni socorro, / ya quedar sin ti no puedo. / el le dice con denuedo:  /  hay mi rosa , mi tesoro:  / yo me voy pero me quedo,  / con tu  amor entre los poros. ...   /        Por  que  solo me  adelanto, /  nos veremos   ya   denuevo, /  y  sea  este mismo cerro: /  cautivado por tu encanto, / volveré  a  ser canto, /  en mejores condiciones; /   virtud  nueva, fuerzas mayores,/ y  para  abrigarte un manto.  /     Un hombre con dos almas, / una bella  en  desamores, /  una vida en los albores, /  ¡del destino  desafiada ¡ / un adiós que no alcanza, /  para un  romance que nace, / ya  que    rompe su enlace,  /  una  maldad  desatada. /   El se encomienda al eterno, /  para librar a  su rosa, /  de  la muerte que deshoja, /  la belleza de lo interno; / que pronto llega el invierno; /  una caricia en la mano,  / una nostalgia  ha dejado, / al no despedirla en un beso. /  Lanzo  a su dama  adelante, /  y se giro a detenerlos; /  su amor siguió corriendo / , con lágrimas en el semblante; /  recordó esa misma tarde , /  lo que  fue  su soñar, /  que  hermoso es amar, /  que  ingrato  es  dejarle.  /  Nacen  flores por los amantes, /  que corren por su vida, /  en una primavera herida, /  por un breve romance, /  ella le llama en el aire, /  y el aire no la ampara,  / su  vida es   transformada,  /  en un tormento errante;  /  y  su bien que fue  abundante /  le mesquina  lo  que ama. .. /     Tan poco lo abrazó, /  tanto daño a su haber, /  el retuvo, hay que ver, /  el  amor  que derramo. /   bien la  ama  y  mal cayó, /   un   cuervo cruzo la luna; /  como cruzo por fortuna, /  la bella  a su salvación.  /  De su amor se supo nada, /  abajo llego gritando: /  ¡mal me tiene quien me ama  ¡ /  socórranme en este llanto, /  vuelve por  su quebranto,  / más  encuentran soledad; / SU  ROSA LE  HA DE BUSCAR,/ PARA  hallarlo entre los santos. /         
romance amante
Autor: normando  571 Lecturas
Orgullosa y medida.Me lo dijeron insistente,Las voces del corazón,Y tras  mi terca razón, Sucedió el accidente.Al verme bien atendida,Tanto mimo, tanta maña,Una casa en la montaña,Junto a un río a mi medida,Un poema siempre anida,Y empluma al caer la mañana. Engreída  y consentida,Impetuosa libertad,Das muy buena partida,Para no saber llorar.pendenciera y tormentosa,Tus versos desprecié:´´te amo luz de mi vidaTe busco de la tierra al sol,Si vienes luz esculpida,Te mezo en un girasol.´´ ´´te llamo con la montaña,Solo mira, sigue el río, Entre los pinos te sonríoTe cantamos soberana.´´Y fui yo tras mi vidaSin oído a tu romance,Que paliza, que trance,Perdí  por  bendecida.Vuelvo muy seguraDe tus brazos encontrar,El asombro va y me apuraA esa potra quieres más.Cuando logré  que conmigo,Rompieras a hablar Rolando,Ya no eres mas mi amigoY militas en su bando,Tratándome la pelusa De  pérdida y despeinada¡Yo que fuí tu musa!¡Yo que fuí tu hada!Que lo tengo y no lo quiero,No lo tengo y lo deseo,Requerido esta, así lo veo,De caricias que no creo,De paciones que no consiento,¡Hay que pena! no me miento,De triste que estoy amiga,Le robo rimas de viento, Así  encontrar el aliento,Y vencer a mi enemiga.¡Atiéndeme Rolando! Soy  tu orgullosa y medida,Un ave se fue volando,Y vuelve trinando tus rimas,Añoro tu verso que mima,Del río, la tierra y el sol,En tu prosa que me  estima,Y me corona mirasol. decide  trabajador,Si quieres, o no, que derroche,Lo que tengo esta noche,Preparado para tu amor.Mi penita  en tu alcoba,Mi cuerpecito  de bolero,¡Hay! mis muslos altaneros¡Hay!mis pechos de caoba.De orgullosa y medidaEstoy  a  su  merced,Mi celo  a ti te rima Y tú ya  no lo ves.¡ Ya No sigas con ella,!¡No prolongues mi castigo,!¡No le consientas  a aquella!,¡No has terminado conmigo!
orgullosa y medida
Autor: normando  565 Lecturas

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