Feb 06, 2013 Nov 26, 2012 Nov 18, 2012 Nov 17, 2012 |
Allí estaba él, de pie,inmóvil, esperando algo, alguien,¿un error quizás?Allí estaba ella, muerta en pie,alerta, vigilando, acechando,¿preparando la huída, quizás?Presentes, ausentes,cercanos, esquivos,dormidos, despiertos,cansados, ilusionados,viviendo su realidad distorsionada.Se sumergio en las profundidades de ella,liberó su alma prisionera del control,la elevó, la cuidó y se enamoró.Agradeció su tenue luz,alumbrando entre las tinieblas de su alma,de un pasado que seguía atormentandola.Él quiso desistir, terminar, rendirse,pero no lo hizo jamás,el tiempo se encargaría de cicatrizar,las heridas de su hermoso corazón.Ella siguió el rastro de su luz,esa que dejo de alumbrarel color de sus sueños,tras fuegos fatuos,encontró un hogar,y su corazón volvió a brillar.Deseos de no lastimarse,de no flagelar al otro,síntomas inequivocos,del tierno principio del amor,miedo de anhelar un calor,que no parece llegar.¿Reconducir la historia?siempre juntos, los dos.¿Dictador y sirviente?¡jamás!Pesada carga para dos.pesado y eterno destino repetido.¡A romper el círculo del dolor!¡A recuperar la ilusión!Siempre juntos.Los dos. Una vez me contaron un secreto al oído. La más anciana mujer de una tribu, se acercó a una joven. Hizo un gesto para que ella se acercara. La niña se acercó. La anciana la miró con rapidez diciéndole: -Es el momento. -¿El momento?. ¿Para que? (inquirió la niña con cierta preocupación). -Se acerca la hora de tu maduración. Vete. Cuando superes la última etapa de tu desarrollo psíquico, físico y emocional, regresa. -¿Dónde debo ir? -VETE. La niña empezó a andar hacia delante. Llegó a un bosque, entro en el y se perdió. En el momento de más desesperación llegó un caballero en una montura gris oscuro. El jinete, bajó su montura y acercándosele con la espalda encorvada le preguntó si quería acompañarle. Ella no tenía dónde ir, así que le acompañó. Mientras estaba a lomos del caballo del jinete, empezó a invadirla, una nostalgia que le resultaba cariñosamente cercana. De pronto llegan a una cueva en dónde el jinete frena el caballo y dirigiéndose a la niña le dice: -Entra en la cueva y duerme, mañana vendrá un compañero mío que te enseñará a cabalgar. Ella no pudo hacer más que asentir con la cabeza. Sabía que estaba obligada a hacerle caso, ya que no conocía a nadie más. Siempre había estado muy sola y no quería seguir estándolo. Amaneció un nuevo día y un nuevo jinete apareció. Está vez, se trataba de un caballero de porte distinguido, delgado, esbelto, con una sonrisa muy, muy atrayente. En seguida se mostró muy accesible por este nuevo pero guapísimo jinete. Este se volvió hacia la pequeña y le pregunto si quería ir con él. Ella accedió gustosamente. El caballero se la llevó lejos, entre las montañas y le enseño a cabalgar de nube en nube. Llegaron en medio de un campo y allí la abandonó. Ella empezó a llorar y llorar. Tan desolada estaba y consumida en la amarga desesperación que pronto se le acercó un nuevo caballero. Este con exquisitos modales, le preguntó si quería estar con él, pero ella viendo su descuidado aspecto le rechazó. Le dijo que se fuera. Volvió entonces a quedarse sola y sumida en el dolor de su llanto. Y así de lágrima en lágrima concilió el sueño, provocado por el cansancio de llorar. Cuando al día siguiente ella despertó, se encontró bañada en un pequeño charco de sangre en casa de la anciana de su tribu. Asustada como estaba solo acertó a ponerse un paño en los genitales. De improviso apareció la anciana, quién con el poder de su mirada la instó a preguntarle. La niña le preguntó que le había pasado, contándole toda la historia surrealista de los tres jinetes. Entonces la anciana la miro y le dijo: -Bien, ha llegado el momento de elegir. Diciendo esto, con un gesto con la mano hizo entrar a tres hombres, que justamente resultaron ser los jinetes anteriores. Uno tras otro, por orden de aparición, fueron acercándose a la pequeña, y para saludarla le daban un beso en la mano. Cuando el último se acercó ella bajo la mirada con timidez, recordando el modo en como lo trató y como le despreció. Una vez las presentaciones hubieron finalizado la anciana se dirigió nuevamente a la niña con la mirada. La mujer le explicó que esos eran sus pretendientes y que antes de tres días tenía que escoger uno de ellos. Es decir, debía besar a los tres y el que más le gustara, ese sería su esposo de por vida. -¡¡¡¿Cómo?!!! (Exclamó la niña horrorizada). Pero la joven sabía que no podía negarse. Si lo hacía, todas las demás mujeres se burlarían de ella por cobarde. Así que a regañadientes accedió. Decidió besar a los tres, ya que si los besaba sin sentir nada, habría pasado la prueba. Así, pues, besó al primero, besó al segundo pero al tercero le flaquearon las fuerzas y no pudo hacerlo. El tercer pretendientes era de su edad, con un aspecto mucho más cuidado que la primera vez que se encontraron. Estaba diferente, el pelo le caía sobre la frente y le daba un aire tímido encantador. -¿No quieres besarme?. Bueno, no te preocupes, no es necesario, si no lo deseas realmente. (La mirada de está expresaba un amor puro y limpio). Ella le miró extrañada, pues los dos anteriores le habían obligado a besarles. No estaba acostumbrada a poder elegir. Además los dos anteriores en cuanto la hubieron besado, habían desaparecido. Su visita fue relámpago. El caballero iba a desaparecer por la puerta, cuando de pronto. -¡Espera! Él la miró con expresión sorprendida, y con la mirada se preguntaba si le besaría. Ella comprendió la mirada y le dijo. -Perdóname, pero no puedo besarte, sin embargo me gustaría pasar la noche, conociéndote un poco más. Él gustosamente accedió, se sentó a su lado y entablaron, una animada conversación llena de risas. La tercera noche transcurrió, y ella había besado a solo dos de sus pretendientes. Al cuarto día la anciana apareció recordándole, que era un día y una noche con cada pretendiente. -¿Y bien? (Dijo, mirándola fijamente). Ella no sabía cuál escoger, así que la anciana viéndola tan confundida, le exigió que hiciera el amor con los tres. -El hombre que sea capaz de lograr que tu te sientas libre en el momento de hacer el amor, ese será tu esposo. Ahora retírate a tu tienda, tienes tres días y tres noches como la anterior vez. La niña se volvió a su casa y se la pasó llorando triste y amargada. Sabía que las normas de su pueblo eran estrictas y que tenía que acatarlas. Pronto vino la primera noche, he hizo su aparición el primer jinete. Este volvió a ordenarle que lo amara, cosa que hizo que lo mirara y que viendo su desgarbado y desagradable aspecto, con su capa rellena de mugre le dijo entre lágrimas que jamás le amaría. Lo mismo sucedió con el segundo. Aunque este hombre la atraía mucho, de algún modo no podría entregarse a él. También tenía muy presente que el le abandonó por lo que jamás se entregaría a un hombre que la dejo sola a su suerte. Entonces empezó a pensar en su tercer pretendiente. Su cara, empezó a iluminarse, tenía deseos irresistibles de estar con el tercer jinete pero no iba a amarle. Le daba vergüenza. Aunque con seguridad, esa noche sería maravillosa como la anterior. En la sexta día, apareció el tercer pretendiente. Quién tímidamente aparto la tela de la entrada y se acercó a ella. -(Tímidamente) ¿Quieres? -No, pero no te vayas por favor. No me dejes otra vez sola. Él accedió, pues también el se estaba enamorando de ella. Las cosas iban surgiendo sin forzarlas, poco a poco. Al caer la noche, él se iba a ir pero nuevamente ella le detuvo. -¡No te vayas! Quédate a dormir está noche conmigo. El volvió a complacerla nuevamente, pero cuando ella se durmió, el se fue de la tienda, y velo por ella fuera de esta. Cuando hizo su aparición el séptimo día, fue a encontrar a la anciana de la tribu. Llegó el momento de decidir. -¿Y bien? Pero la muchacha estaba compungida, porque no había hecho el amor con ninguno. Viendo la anciana, lo que ella dudaba, decidió preguntar a los tres pretendientes. Los dos primeros afirmaron haberla amado, sin ser verdad. Pues empezaban a estar celosos, ya que la niña pasaba mucho tiempo con el tercero y este había montado guardia en su tienda por lo que no habían podido forzarla a tomar una decisión. Cuando la anciana preguntó al tercero, esté fue sincero, y con mirada tierna hacia la joven, contestó con la verdad, que no la había amado. La anciana se dio cuenta que los dos jóvenes estaban muy accesibles el uno con el otro, y forzó a la niña a tomar una decisión. El tercer muchacho ya no confiaba que ella lo escogiera, así que iba a darse media vuelta para irse, cuando la niña rápidamente contestó. -Quiero mi tercer pretendiente. El tercer jinete se sonrojó, y aún sin poderlo creer del todo, su cara empezó a iluminarse. Los dos jinetes anteriores se enfadaron y la anciana les ordenó que se fueran. -Bien, pequeña. Ahora voy a explicarte tu elección. ¿Recuerdas tu primer pretendiente?. Bien, si lo hubieses escogido, hubieses escogido seguir en el PASADO.¿Recuerdas el segundo jinete?.Bien, si esa hubiese sido tu elección, te hubieses comprometido a vivir el FUTURO, así que siempre hubieses vivido persiguiendo un espejismo, a parte de vivir condicionada y siempre estando obligada por las situaciones. Escogiste el tercero. Con este hombre te casarás y te comprometerás a vivir el PRESENTE. Así que por lo pronto voy a preparar la ceremonia nupcial. Y dicho esto desapareció por la puerta. Dejando solos a los dos enamorado. Ella se le tiró a los brazos agradeciéndole todo lo que había hecho por ella y pidiéndole perdón por haberle rechazado todas esas veces. Él le correspondió el abrazo y mientras acariciaba su larga melena, le dijo al oído: -Yo hubiese seguido amándote siempre. Ahora puedo compartirlo contigo. Ella rompió a llorar, comprendiendo que nunca más estaría tan segura de una elección, como la de haberle escogido a él. Y esta es la historia de una niña, que un día se levantó siendo mujer y al cabo de una semana, sabiendo que quería hacer con su vida. JAMÁS DEJES ESPERAR ALGO QUE ANHELES HACER. CUMPLE EL DICHO “AHORA O NUNCA” Y TU VIDA CAMBIARÁ.......... (ÉL)Un lejano reencuentro... una fecha particularmente familiar...caras conocidas, desconocidas en la actualidad... un leve susurro a mi oreja...un olor muy distinto...recuerdos de una pasado juntos...un sentimiento extraño que vuelve a impregnar el alma...Un gran tiempo a su lado...una gran felicidad junto a ella...cruzando las manos en mi pecho la siento otra vez... su ternura, su dulzura, su pragmatismo... su misteriosa belleza...Sus refinados sentimientos...su candidez...su pureza... su fortaleza... su entusiasmo su preciosa sonrisa... esa sonrisa que no consigo hallar en nadie... solo el ella...desearía verla de nuevo... enamoró mi alma... nunca conseguí olvidarla...¿dónde estás ángel?,¿dónde estás ángel mío?,¿dónde estás? Sus manos sellaron mi cuerpo... Nunca nadie me acaricio las entrañas de mi ser como hizo ella... sabía hacerme enloquecer... sabía ser una tigresa, una mimosa felina, y la dama más recatada y pura que existió en mi vida...su brújula giraba y giraba, nunca paraba de girar, en un instante era la dueña de la situación... la dueña de mi amor embravecido al regalar su armoniosa coquetería, perdí la cabeza... por ella... por ella fui un loco enamorado sin saber que tras esa mirada inocente se hallaba un diablesa que sin que me diera cuenta envenenaba mi alma con su fuerza... un fuerza que nunca percibí y que me hizo acabar en un laberinto sin fin...Ella se convirtió en mi única existencia... con un suspiro suyo me daba la vida, con una fría mirada destrozaba todo yo....Era la señora y reina de mi mundo y acabé sin ver a nadie más que no fuera ella, solo tenía ojos para ella... para esa princesa sacada del diabl* que hipnotizó mi alma. Pero ante todo el mal que ella contenía en su interior, era tal la delicadeza de sus sentimientos que no me arrepentiría de enloquecer otra vez, por ella, por mí... necesito sentirla a mi lado y sin embargo aún no la conozco... no creo que me brinde el destino la oportunidad de conocerla... Quisiera conocer a la mujer que consiguió calmar la fuerza de mis emociones, la que consiguió aumentarlas hasta perder la cordura y la que se convirtió a parte de confidente en mi amante... ella me enseñó... ella me enseñó a amarla con su plenitud...Beso todo mi cuerpo... lo hizo de tal manera que nunca sentí lo que ella consiguió con nadie más, con uno solo de sus besos llegaba a lo más hondo de mi...éramos tan felices...tanto... decidí pedirle que conmigo se casará y me rechazó... nunca entendí porque... si ella estaba tan bien a mi lado, tan satisfecha, tan feliz conmigo... no logró entender que pasó para que se fuera y no volviera más después de preguntarle si deseaba ser mi esposa... (ELLA) Sentada en la hierba y con las manos en mis rodillas con cabeza apocada vuelve a mi ese recuerdo lleno de armonía...¿dónde estás?,¿te encontraré?¿vencerá en mi antes la resignación o seré capaz de sobrevivir a ella? Quiero gozar a tu lado... quiero sentirte en mí...quiero comprender porque te dejé...¿por qué lo hice? Recuerdo tu cariño... me tratabas con tanta dulzura, en cuanto menos me lo esperaba me encontraba rodeada con tus brazos, ellos me transmitían una seguridad y una paz que nunca había hallado con nadie...tus besos dulces me dejaban tranquila y con una sensación tan romántica... tanto...cuando cogías mi cuello entre tus manos me sentía morir... acariciabas con tu amor los hilos de mi esencia de mujer...Sabías como rozar mi piel para que me dejará llevar, aunque en momentos no sabía muy bien que ocurría me sentía bien, segura, tranquila... Eras mi inspiración... a un sueño escribía miles de palabra bellas... pero desistía de encontrarte... y escribir me ayudaba apaciguar mis emociones...emociones que sentía que nunca hablaba, que no sabía expresar...era más sencillo escribir...Ahora en estos momentos recuerdo esa ternura soñada... besabas mi alma con los labios del espíritu...Eras mi escolta fiel, siempre contigo, sencillamente estaba segura necesitaba lo que me dabas, lo único que podía retenerme... lo sabías bien y no fingías ya que tu así sentías... ¿Te encontraré?,¿estarás aquí? “Sería un sueño de amor realizado...” Tu y yo estábamos en la playa sentados dejando que el suave aire del mar nos envolviera, dejándonos llevar por su suave fragancia vamos regenerando nuestros corazones, el agua nos habla, nos aconseja. Pronto, ya de noche, la luna dio su toque mágico a la velada, anocheció y en su máxima plenitud nos pareció sentirnos solos. No veíamos las luces de los apartamentos, era como si esos instantes fueran nuestros, solo tuyos y míos, nada nos molestaba, nadie podía vernos, solo nosotros sabíamos porque estábamos ahí, porque permanecíamos sentados sin levantarnos... Nos gustaba contemplar nuestros rostros, solíamos quedarnos en silencio, estábamos escuchando nuestros corazones como cantaban a unísono, cantaban y cantaban, no se callaban convirtiendo la noche en un mágico encuentro entre dos almas que aman en la quietud de la noche. Echados contemplando el estrellado cielo te acercaste a mí y me diste un pequeño regalo. Me dijiste “Espero que te guste, eso es mi corazón ahora” y viendo lo que ocultaba tu mano, me sorprendiste, cogiste una estrella fugaz para mí. Con mirada aún sorprendida y llena de gratitud te respondí, “no hacía falta cariño”. Te sientas de rodillas frente a mi, me dices, “tu eres mi luz, la que siempre busqué y que jamás hallaba... Gracias”. Lentas transcurren las horas pero no estamos pendientes del tiempo, estamos tan bien, es maravilloso poder sentir el reencuentro de nuestras almas, es hermoso estar así, en la tranquilidad y la quietud de una playa. Las olas del mar, acercan el agua salada hacia nosotros, mojando nuestros pies, el esplendor del mar en una noche veraniega quiere ser partícipe de nuestra comunión. Estamos bien, muy bien, es agradable sentir, percibir que todo tu alrededor parece un sueño. Los dos aprendemos de su quietud, de su hermosa majestuosidad, nos sentimos en armonía con el paisaje. Esa es una imagen tan etérica que parece haber sido sacada de una fantasía, de un cuento de hadas. Es que de día estamos tan inmersos en dudas y sentimientos negativos que no deberían tener poder para ofuscar la gran luz de la obra divina. “Diametralmente somos tan opuestos que conseguimos un equilibrio mágico y místico, pues tu posees sentido práctico racional, empiezas a creer en sueños, sueños que sientes que son realizables, y que posiblemente si estuviera el astro rey con nosotros, no darías pie a que es posible todo, que nada es imposible... yo sueño pero nunca seré como tu, yo pertenezco allá y solo cogeré de aquí lo que necesite para sobrevivir y mantener mi propia integridad. Yo seguiré soñando día y noche, es mi vida, yo necesito soñar, no importa si se realizan o no, lo primordial es tenerlos y poder conservarlos intactos, preciosos, trozos de mi misma, sentir la calidez de cada fantasía y entender que los sueños si no se convierten en realidad y siguen siendo sueños, serán siempre hermosos y ya no habrá necesidad alguna de sufrir por si se cumplen o no. Me preguntaste...”¿Eres una elfa verdad?”. Me sorprendiste de nuevo y te contesté “¿por qué?. “Miráte, es obvio, eres tan distinta a mi, cuando estás conmigo me parece que crezco, no es por inteligencia, pero me siento más abierto, no se como explicarlo, es como si aumentara en algún aspecto y a parte de esto... mírate... tienes la piel blanca, los ojos claros, acuosos y rasgados, las manos estrechas, finas y delgadas, los dedos largos, el pelo sedoso y rubio que recubre tu espalda que parece ser tan delicada que se vaya a romper, los pies pequeños y el cuerpo tiene una gracia especial cuando vas andando, pareces venida de otro mundo, pareces tan especial, mágica, mística, distinta... no sé... eres diferente, es a lo único a lo que puedo aferrarme para tratar de entenderte”. Te contesto. “Quizás sea eso. Eres el primer chico que me dice algo medianamente inteligente. Te sorprendo con la respuesta y me preguntas porque te he dicho eso. Te explico. “Es evidente que mucho mes dicen que soy muy hermosa y me molesta. A veces cuando ando por la calle, ves o percibes que te observan de manera lasciva y te retraes, algunos se acercan, otros no y me veo conducida al abismo de mi soledad para entender la situación. Alguien me dijo una vez, en algún lugar que no recuerdo, en otro tiempo, con otra claridad de consciencia que eso me sucedía porque muchos hombres veían en mí una Luz diferente y que lo traducían en instintos carnales. ¿Sabes?... no quiero creer que es eso, pero voy acabar creyendo que muchos de vosotros sois incapaces de ver más allá de los instintos básicos. Dios mío, ¿dónde están las almas afines a mí?, ¿dónde están los hombres con los que puedo conversar de todo?, ¿no ha venido nadie?. Y cada noche siento la esperanza que lleva mi alma, aunque cada día se marchita más y más. Por suerte Dios respondió a mis preguntas y ahora que estoy junto a ti me siento capaz de poder abrir mi corazón y mi alma sin temor a malos entendidos, por eso eres tan especial y tan importante para mi. Conseguiste entender cosas que otros se niegan y debo darte las gracias por acompañarte en un sendero solitario en el que pocos se atreven aventurarse. “Yo te dije que eras bella”. “Ya lo sé, pero es distinto en ti”. “¿Por qué?”. “Mira, tu te has acercado a mi y me has hablado en unos términos, así cómo de ciertos temas que es inútil intentar hablarlos con otros. Hemos empezado a hablar en un profundo silencio, eso significa que me puedo comunicar contigo por otros medios. No sabes lo gratificante que ha sido para mi encontrarte. Yo suelo ser desconfiada con la gente y más con la que no conozco y dime.. ¿Cómo te trate a ti, que es la primera vez que te veo?” “Muy bien, es cierto...¿por qué?”. “En primer lugar, siento una gran afinidad contigo, como una corriente especial, percibo buenas vibraciones y creo que estamos en el mismo plano de evolución. Yo diría que tu eres más <> que yo solo que te has dejado influir demasiado por los conceptos y las normas terrenales, no te preocupes y libérate, aflójate, no tengas miedo,yo estaré contigo en ese proceso que has empezado hoy.” “¿Sabes?, te miro a los ojos y me pareces tan transparente, tan hermosa, veo lo que sientes, veo como estás conmigo, gracias por hacer que sienta una complicidad que nunca había sentido con nadie. Es tan bellos estar aquí, a tu lado, contemplando esta noche de ensueño. Mi alma crece, minuto tras minuto en este ambiente extraño, misterioso y mágico. En estos momentos doy gracias por haber paseado casualmente por la playa, teníamos que encontrarnos, era cosa del destino.” “Pronto amanecerá y tu lo olvidarás todo, seguirás con tu vida habitual, te olvidarás de mí y de todo lo que has vivido esta noche hasta que estés preparado para asumirlo.” “No quiero olvidarlo... ¿porque dices que lo olvidaré?, ¿quién eres?, ¿qué eres tu?. Quiero estar contigo... permanecer a tu lado...” “Lo olvidarás todo y será mejor para ti, pero en el fondo de tu alma, los recuerdos acudirán a tu mente. Buscaras respuestas y cuando estés preparado, las encontrarás. Yo seguiré cerca de ti, siempre vigilando cada paso que tu des. Te cuidaré con celo, no intervendré en tu vida, seré tu inspiración en momentos de duda, tu consuelo en momentos de dolor, tu luz en la oscuridad, seré tu victoria en momentos tempestuosos de crisis emocionales, seré tu sostén y apoyo, seré quién taerá motivos de alegría a tu vida, seré quién te cuidará en las batallas que tu libres, yo sanaré tus heridas, yo pediré ayuda por ti al cielo, seré tu sabiduría desbloqueada, yo estaré todo el tiempo junto a ti. Si me llamas acudiré en tu ayuda aunque no seas consciente de que estoy ahí, incluso, si no me lo pides, te ayudaré solicitando un permiso especial. Seré tu amiga, la que te escuchará en silencio cuando nadie lo haga, seré con quién tu podrás conversar, seré quién te dará consejos que entenderás, yo seré quién te empuje cuando necesites impulso, yo seré quién te ayudará a conseguir tus sueños, por eso no te entristezcas ahora porque siempre estaré junto a ti. Tu dolor será mi dolor, tu llanto el mío, tu gratitud la mía, tu alegría la mía, tu suerte la mía... ahora debo irme”. “Quédate por favor... quiero estar contigo...” “Te he dicho que siempre estaré contigo, hasta siempre” Y ella se alejo en el espacio. “Ahora lo sé. He estado con ángel, mi Ángel de la guarda” Tal y como ella le había dicho, siempre estaba a su lado. Pero lo que ella no supo es que le permitieron verla hasta que un día él la abrazó dándole las gracias por todo lo que hacía por él... Retumban en mis oídos, el suave canto del jilguero, su canto es el lenguaje, del tiempo, la llegada de un romance, bajo un enrojecido Sol, de sangre y lágrimas, ahora estoy sin ti... 130 monedas, eso es lo único que me das, eso es lo que vale el amor que te dí, te olvidé, no existías para mí, eras como un verso incompleto, eras como una rosa sin espinas, eras mi ideal, mi ideal de mujer, te entregué la mejor parte de mí, esa parte que nunca supiste amar, esa parte que nunca supiste entender, esa esencia de mí, que nunca quisiste para ti. Llantos y risas, así era tu hiel, pues ya recuerdo tu sabor, tu ardor, tu juego diabólico, me hacías enloquecer, y no me sabía defender, te entregué el cuerpo y alma, y lo desechaste, no era suficiente para ti... Me esforcé por entender tus caprichos... y ahora que... y ahora que al fin te entiendo, ya no estás junto a mí... Te odio por todo lo que te dí, y jamás recibí de ti, cuando me dabas calor, solo era para enfurecerme después, tus espinas ocultas, como un poema sin estrofa, como una canción, de la que no pensaba encontrar las letras, aprovechaste la ocasión, para romperme el corazón, para vaciarlo de razón y amor, robaste mi fuerza, me dejaste sin nada, desnudo ante el mundo, nunca me quejé, siempre intenté complacerte... ¿para que...?, ¿para que te deje entrar? pues hoy solo siento dolor, sin exteriorizar el llanto, que sangra por mis heridas, mi lamento grabado en fuego vivo... por ti... por ti bruja hipnótica, lías mis sentidos, envenenas mi mente, das muerte a mi corazón, y aunque las conciencia, (lo único que me queda sano) me dice k me aleje de ti, jamás podré vivir sin ti. Bruja... bruja pro encontrarme, bruja por conquistarme, bruja por ignorarme, bruja por regalar los pedazos de mí, que aún posees... bruja... te odio, y sin embargo... sigo amándote, hasta la muerte, hacia más allá del tiempo-espacio, porque ya no tengo alma, ya no tengo cuerpo, ya no tengo vida, parece que me convertiste, en un espíritu errante, sin rumbo fijo, siempre esperando, a que abras tu corazón, si es que lo tienes... El dolor de una canción oculta, el temor de mostrar mi parte más tierna, la que despedazaste sin compasión alguna, las cicatrices que me dejaste... Amor, fruto del veneno del diabl*, yo ya lo sé, ya no hay antídoto, que no hay remedio para mi, bruja... bebí tu veneno, y ahora no puedo saciar mi sed de ti... bruja... te odio, te amo, te añoro. ¿Porque ni tan solo compadeces, mi desdichado corazón? Siempre fuiste de hielo, Nunca puede mostrarte, el valor de un amor, que ya se que jamás tendrás otra vez, así pues perdiste mi corazón, 1 corazón calido, húmedo aún por las lágrimas de ayer, tu lo sabes bien, una bruja como tu no será amada nadie te amara con total entrega, como hice yo, harán lo que yo no hice... huir... porque nadie es tan ingenuo, nadie es tan calido, nadie de juega toda la integridad, por ti, bruja, por ti mi muy amada bruja... Espero la noche,aparece la luna,anuncia tu llegada.Marca la hora,el viejo reloj.En breve llamarás.Acondiciono el lugar,velas bicolor, suave música,lencería roja,y la puerta abierta.Tumbada en la cama,leo una revista,el sonido particular,tus llaves en la puerta,mientras tus firmes pasos,me anuncian tu llegada.Mi puerta se abre,apareces en el umbral,en el lecho me ves,esperando... esperándote.Con calma, desvistiéndote vas.Unos vaqueros, una camisa,¡que comodidad!En cueros,ignorándote,doy media vuelta.No te demoras,y me abrazas,sin responder estoy,sigues tu danza,el baile de tu fuego,que pronto cubre,mi torso semidesnudo.Tu amor,debería conservar,es una bendicióny se que no haymuchos así.Mi frialdad impuesta,me impide ser más cálida.Sale el sol,suena el despertador,te levantas,hoy temprano trabajas, hasta la noche entradano aparecerás nuevamente.Suena el timbre,te abro y te miro,por primera vez siento el frío miedo,que apesumbra tu ser.Temo una mala noticia,tu mirada baja,y la tristeza que intentas ocultar, me confiesa,que la verdad helará mi alma.Vas a irte,sin darme una sola explicación,te detengo,sujetando tu brazo,con firmeza poco acostumbrada en mí.-¿No dirás nada?-...-¿Hay alguien más?-...Odio ese silencio,por hacerse eterno.Sigues sin mirarme.-¿Porque no me miras?-...-¿Quién es?No puedes ni hablar.-¡Contesta!-Bueno... ciertamente, hay alguien.-¡¿Cómo pudiste?!-Poco, a poco,a diario trabajando,fui enamorándome-¡No te pregunte cómo!Mi cara enrojece de rabia,no se como contenerme,hago esfuerzos por hacerlo,mientras tu hablas.-No quería, que sucediera,lo intenté todo para olvidarla,todo probé,mas me es imposible.Mi mano se levanta,ganas de darte un bofetón tengo.Entre lágrimas,-¿Por qué?Bajo la mano.-Perdóname, ¿podrás?.-...-No es justo, lo sé, pediría tu comprensión,la que me has regalado,tantas otras veces,con mis defectos de hombre imperfecto.Finalmente,hago acopio de voluntad,finjo comprender una vez más.-Con una condición...-Tu dirás...-Hazme el amor, una sola vez más. Que la despedida de esta relación sea cálida y de ensueño, para almenos conservar ese momento como un tesoro dentro de mi.Lo piensas unos minutos,no es tan mala mi proposición,una noche de amor,para que mañana te dirijas a un nuevo destino.Igual que noches anteriores,visita la luna nuestro lecho,lleno de las locuras y amorque nos dimos.Te dejo preparándote,en la contigua habitaciónmientras a la cocina voy,un cuchillo cojo,en el calcetín lo pongo,me acerco en la camatumbándome,aguardando tu llegada.Llamas a la puerta,te abro, entras y cierro con llave,te extrañas, pero te calmo mientras cojo tu rostro entre mis manos.-Así nadie molestará.No recuerdo,tener una noche tan especial,tan romántica y tan distinta a las demás.Acaba la noche,ya escucho tus ronquidos.Mis ojos poblados de lágrimas que no puedo contener, preguntándome que hice mal, para que nuestra historiaasí finalizara.Solo la respuesta de mi frialdad,por tu indiferencia de los últimos tiempos,es la respuesta que se me ocurre.-¡Oh no!, esto no puede aquí finalizar. Tu eres mío,ahora y siempre lo fuiste,por eso perdóname amor,pero una vez más me traicionaron los celos.Cojiéndo mi puñal, me acercó a dónde estás, mientras mentalmente,la misma pregunta me asalta.”¿Porqué?”Me tumbo cuidadosmentejunto a ti.-Pérdoname, pero esto es más de lo que puedo soportar.Diciendo esto cojo mi arma, y te lo hundo en el pecho,hasta cerciorarme que no respiras más.Muerto acabaste tus días,don Romeo,sin vida está,en el lecho que me amó.Me acerco a tu cara y mirando tu cara serena,te digo: “Lo ves amor,lo ves como ahora, estarás junto a mí pero para que eso sea posible,tan solo queda finalizar con un pequeño detalle.Me clavo el puñal, me deje desangrar a tu lado,por eso amor,siempre estarás junto a mí.NOTA: Ella dejó una nota con los motivos que la llevaron a este asesinato. Al final en la nota que encontró la policía acababa poniendo. “Zorra... zorra maldita, ¿ahora te sirve?. El siempre será mío”. Lo que los dos protagonistas no sabían es que la mujer de la que se había ido enamorando jamás albergó sentimiento de amor alguno hacia él. Luna Nueva,hermosa dama nocturna,dame una respuesta,anhelaba tanto,saber amar.Triste y apagado sol,que confundido estabas,casi a punto de venderte,solo por un breve tiempo,solo por una ocasión.Volví a verte,mi amada luna,la conocedora de mis secretos,alcancé tu luz,pero bañada estuve,en oscuridad.Iluminaste mi senda,mi gratitud volvió a ti,trate de ayudarte,sin darme cuenta,que era yo quien más necesitaba.Apareciste en mi vida,como un rayo de luz iluminaste mi senda,llenaste mi alma,me enseñastey te adoré.Bellísimos ojos azules,fríos, dulces y calmos,paz trasmitías,amor, que distinto era,que extraño para mi.Ilusa, banas fantasías,perdida crecí,ofuscada bajo lúgubres sombras,el paraíso encontré,mi felicidad hallé,gracias a ti, amor.Mi alma, mi mundo,todo lo encontré,desnudo te ví,paciente, esperándome,al fin encontrémi última aspiración.Abrazaste mi alma,me entendiste, me respetaste,me amaste, me acariciaste,al fin me entregue a ti.Miro al cielo,anhelo oír tu voz,que dulce melodía,eleva mis fantasías,contigo, junto a mi.Abriste la brecha,iluminaste mi camino,una hermosa verdad que debía seguir,de ti aprendí a amar,de ti aprendí a tener coraje,Luz... Luz... solo luzYa no existe la oscuridad para mi,gracias a ti,ven, que te amaré,ven, que te haré feliz.Abro los ojos,me sonrojo al besarte,que dulzura... que carita tan tierna,pues mis manos toman el mando,acariciando tu rostro.A la luz de un nuevo día,despiertas,giras tu cuerpo,fijas en mi la mirada,con esos bellos ojos mar,que me miran con amor.Es de noche, despierto y te veo,me abrazas, me sonrojo,te devuelvo el abrazo,te ofrezco mis labios,y fundiéndome vas en el más dulce beso.Tras largas noches,que soñaba tus besos,que soñaba tus ojos,te veo junto a mi,y al fin soy feliz.Siempre a la sombra,siempre turbulencias acechadoras,que hacen que acudan dudas,sobre este amor que se nos escapa,este amor que nos desborda.Si tan solo mirarte a los ojos,mi alma se funde,deseando un beso que me das,me derrito al pensar en ti,me endulzo cuando me amas. Este usuario no tiene textos favoritos por el momento
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