Entre los caminos angostos,
El estrecho amanecer le da su aliento;
Y su pluma a la hoja desnuda sustento.
Poeta, que en su vida el tiempo le niega,
Poeta, hacedor de su propia alma,
Su propia moraleja.
 
Tu nombre es tu ruta, es tu escena.
¡Y poeta entretanto escribe su pena!
Pero de amaneceres se ha hecho tu mundo,
Y en los dolores escritos el amor tu escudo.
Poeta que sueña, que ríe y llora...
Poeta que te Enamoras.
Tan inseguro de la suerte que exprese tu reflejo,
Seguro el instante del recuerdo astuto.
 
Poeta que escribe por placer o por necesidad;
Que de la vida su juego es un venir al andar.
Por los paisajes de su lienzo escrito,
Por las prosas y los sonetos rendidos.
Poeta que se encuentra y no se recuerda,
En su realidad que se acerca a una ilusión.
Y su musa, sueño en verso le despierta,
Para que la realidad le respire canción.
 
Que vida la del poeta!
Cuantos sueños dejados,
Cuantas esperanzas por venir;
Cuento amores y besos él ha de seguir.
Eres poeta, que tu reflejo en el agua te alienta,
Eres poeta, que tu vida es un vivo libro,
Tus días, rimas en versos ajenos en el olvido.
 
 Luis J. Cabrè!