La promesa
Publicado en Sep 22, 2013
Escabulle tu figura en mis rincones, sinuosos laberintos te absorben, te vas; ni siquiera respondes.
Apareces con otro aspecto, otros ojos, otras manos y creo reconocerte; más los nuevos besos contagian de hielo a mis labios, ellos no los quieren y sé que detrás del muro tú sonríes. Espero que el reloj rompa el recuerdo, que las agujas te pierdan definitivamente en esa morada que habitas tan lejos; que no te busque ya; que comprenda que el príncipe azul existió pero se marchó de mi cuento. Te apareces, sonríes con ironía, sabes que te quiero y que nadie podrá contigo. Paseas delante, extiendo la mano y te esfumas. Otra vez cierro los ojos para evitar que me invada la locura. Creo estar sumergida de pronto, en una nueva vida; me desprendo de a ratos de este sentimiento que no puede ser eterno; que existió pero en otro cuerpo hace ya mucho tiempo; el nuevo debe aprender a responder a otro dueño. Y sin embargo, las caricias me lastiman, marcan huellas sobre viejas heridas, abren surcos que destilan verdades que quiero mantener ocultas… fría por fuera, hielo adentro desde tu partida. No me entrego, aunque aprenda de memoria otro nombre y lo pronuncie entre susurros. Es a ti a quien llama mi espíritu, mi mente y mis ganas con silencios que retuercen. Y no estás, aunque creo tenerte, aunque ponga tu foto en la almohada mientras otro me tiene… y no estás; aunque te busque en mil bocas, en miradas de otros colores; no estás. Fugitivo deambulas por ese laberinto, marcando tu presencia etérea, controlando mi vida que extrañamente no se fue con la tuya y recordándome mi promesa; aquella que entre tus brazos pronuncié muy segura. Y la cumplo, en cada momento que transito por los oscuros pasillos donde te busco, adivinando que no podré jamás romperla porque no hablamos de qué sucedería si tú te fueras… por eso sigo así… amándote toda la vida.
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un sentimiento
Silvana Pressacco
LAPIZ ESCRIBE
Silvana Pressacco