Si quieres…
puedes ser habitante de una  cápsula
que evitando el abrazo  de montañas
se escape  por un túnel  y en reversa.

Puedes borrar tus huellas deambulando sin norte,
quebrando los vectores que indican los sentidos
o rompiendo la alianza con tu sombra  aburrida.


Puedes hasta ignorar a los que te aman
y descalzo  de dudas, transitar por los campos
donde ya no germinan las semillas del tedio.


Te puedes ir y nadie osará detenerte
porque lo que apasiona nos dirige
y dejarse llevar es ser auténtico.


Para qué cuestionarse la manera de ser
si se entiende que solo siendo así
y solo así… se vive.