No veo esa sequía, querida María, de la que hablas en tu poesía.
Poesía que es muestra de tu calidad literaria. Seguramente te has recuperado.
Marzo inicia un nuevo tiempo que renovará tu alma.
Enhorabuena con mi mejor abrazo.

“El mundo es un Dios que se deshizo…” Juarroz

Imagina la poeta sentada frente a su mesa de trabajo mirando la ventana en una noche estrellada, con su pluma moviéndose al compás del ruido silencioso de la noche. Duele el alma y la nostalgia cubre todo su cuerpo, es entonces como en acto instintivo eleva sus brazos y abre sus manos dejando que todos sus recuerdos e ilusiones tomen un vuelo que esa noche se separa. Pero….ella es no solo una poeta sino una mujer valiente que ha enfrentado situaciones más dolorosas y que supo salir de esos encierros. Después de esas sequias de letras, siempre hay primaveras de poesías, entonces le dice…. Adiós noche de la que fui sepulcro; el amanecer me trajo nuevamente vida.
Felicitaciones Maria

La belleza del poema contradice
a la última estrofa.
Los periodos de sequía de la pluma
son especiales para leer y alimentar el alma con buena lectura.
Felicitaciones por el poema!
Un gran abrazo

Es un buen poema María. Al leerlo y relacionándolo con otro tema, no pude evitar traer a la mente la tradición de la antigua Roma conocida como Los Idus de Marzo. Solo que aquella tradición se refería a días de felicidad. (15 de marzo) y tu poema es nostálgico. Destaco de tu texto el lenguaje literario, apartado del decir coloquial, lo que le da un matiz de misterio intimista alejado de la mundanal generalidad.

Es culpa absoluta del perfíl que ha adoptado la página, en donde su original romanticismo -- ese bello propósito que se abocaba a la calidad, al talento, al ingenio -- ha sido sobrepasado por la idea de convertirle en un certamen de competición.
Sin embargo, mi querida María, afortunadamente persisten valores con pétreos principios que a los soñadores aun nos alienta, como por ejemplo, la hermosa composición hecha con acertados versos que tú nos has regalado apuntando distintos flancos ideológicos.
Ojalá se humedescan tus huertos en sequía y sigas entregándonos frutos utridos con verdades.
Un abrazo
María José.

Bello y triste poema, gracias por compartirlo.