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EL ALMA DE UNA MUJER.
Publicado en Apr 12, 2010
 Una mujer que le canta al amor… no suplica amor no es un pecado amar, porque aquél o aquella que ama está cumpliendo un mandato divino… "Ama a tu prójimo como a ti mismo". Y de eso se trata la vida. De amar… y nosotras, las mujeres, tenemos esa cualidad bendita de amar, de llorar y de reír sin tener que pedir perdón. Sin sentir culpas, solo damos todo aquello que está en nosotras. La mujer que le canta al amor, no se busca a sí misma, no deambula perdida en la soledad… ni en los silencios del tiempo, no vende su alma… ni es un espejismo. Es difícil de entender, porque los seres humanos somos egoístas por naturaleza. Queremos poseer todo aquello que deseamos… y entonces ofendemos y juzgamos por amor. A veces sin querer… sin darnos cuenta. El alma de una mujer es un soplo que vuela desmedido. No está anclado a la tierra… no pertenece a nadie. Ni a su cuerpo. Se eleva y a veces no regresa… es pájaro y ángel. O una estrella, no se entrega al primer conjuro de profetas, se desdobla de impuros. No conoce la piedad, el olvido… ni la indiferencia. Pero ama de tal manera como solo una mujer puede amar, como no lo hará nunca… ningún otro ser sobre la tierra.
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Mara Ester Rinaldi
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