Credo Cmplice; Ella vuela Mam... Ella es la que vuela.-
Publicado en Feb 09, 2011
¡Ay! Mamá
yo no sé que hago aquí, caminando, arrastrándome como un reptil sí, sí sé que lo soy mamá, pero allá en su pueblo por el dote de sus brazos ella me transformó en un dragón que volaba susurrándole el prohibido verso mientras que aquí... solo sangro su nombre en cada pisada hueca dejando caer las lágrimas que no es más que el plumaje que brotó en mi piel por cada beso por cada uno de ellos que era diferente cada uno era nacido en distintos cielos sostuve con mi lengua a la rosa de los vientos y era un orgasmo el más mínimo torrente. No me acostumbro mamá todavía no a pesar de los días que han pasado no me acostumbro a ir al baño arreando con mis ruedas viejas y frías cuando estaba con ella andaba con una nube montado encima aquí en nuestro pueblo solo soy una serpiente que siempre soñará el tener alas un hombre con la boca muy chica donde la solitaria palabra escrita que recae sobre mis labios causa más tumulto que mi necesidad de hablar es por eso que aquí me leen y no me besan. ¡Ay! Mamá si supieras que aquí es tan diferente se va a las panaderías a conseguir calmar el hambre allá, con ella se ascendía al cielo en busca del hijo de dios que se dice reencarnó en el pan y nosotros lo tomábamos gratis y le comíamos disfrutando de la masacre reflejada en la lluvia en las palabras, en las letras, en las caricias, en las blasfemias aquí mamá, para volar se necesita ir caminando a la farmacia y ella allá, me empujaba al vacío tan solo con su saliva y sin necesidad de falsificar alguna receta. -¿Porqué no sales a jugar hijo?-dice mamá Ya no vale la pena salir a limosnear pidiendo una moneda a cambio de un poema mamá. Todas las de aquí no saben volar, en estos días he estado con seis -investigando- y ninguna lo puede, a ninguna le gusta la poesía tanto como a ella pero, ¿cómo volver a verla? si es una poetisa maldita de esas que tienen la costumbre de no creer en la promesa de otro día, de otra noche de otros bostezos clandestinos enrocados en un cuarto vacío de hotel con veintenas de botellas muertas de cerveza porque ella bebe y fuma como nadie no parpadea, no se le revuelven las tripas ni tose y jamás ríe si no es más que por el poema que le recito mientras orina ella es el suspiro de los peatones en la calle principal he incluso la invité a comer, cosa que nunca pensé que haría, y le escribí un poema en una servilleta y suspiró, a pesar de ser maldita suspiró, qué mayor logro para este no poeta tratando de conquistar a una verdadera poetisa mamá y yo era la envidia de los hombres "poetas" al llevarla de la mano aunque pareciese más que ella me pasea con cadena y bozal ¿cómo poder quitarme el vicio de volar mamá? si sabes que siempre he sido un adicto. Yo no sé qué hago aquí, de vuelta de regreso a este manicomio, de regreso a esta maldita realidad donde no hay aeropuertos de carne para el versero callejero y solitario donde no hay esperanza de poder separarte de la tierra de detener la gravedad siquiera por un suspiro mamá por uno, uno tan profundo como sus cielos y tan abisal como sus mares yo no sé que hago aquí frente al refrigerador leyendo las notitas que deja aquella orgullosa que no fue una musa, burlándose siempre, desde que tengo memoria "¿ya encontraste a la que vuela?"-dicen los papeles- ya no la dejes entrar a casa mamá si lo nuestro terminó justo antes de empezar además me espanta al gato y me desacomoda los muebles. -¡Ya no te aflijas hijo!-dice mamá Perdóname, pero es que, en su casa no se llora ella dice que; en su casa no se llora por eso arree con este bulto de aguas negras hasta tu sala sin sillones hasta mi patria sin conocidos hasta tu casa sin mí porque ella se fue por la calle, se marchó con los dos y me dejó solo a mí, pero ya sin mí e incluso, ya no soy tu hijo mamá desde sus pechos alimentó mis otras vidas que no pariste pero, de todas formas te va a encantar mamá, a pesar de todo te va a encantar. No es como la gorda caprichosa, no es como la pintora secuestradora, no es como la escritora psicópata, no es como la francesa ya que con ella no necesitarás subtítulos ni como la griega que siempre te pedía pasteles ni como esa Lu aunque te guste, ella es la misma muerte solo me tendrá muerto, vivo siempre voy a ser de otra, no es como la española Faty esa machorra no es como tu comadre, no habrá más escándalos no es como la prima, no habrá más arrestos no es como todas a las que corrías los sábados en la noche o los domingos de misa no es como la maestra de historia de la secundaria o su hermana o su tía no es como la escandalosa de Denise o la borracha exhibicionista de Abril no es como todas esas como la hermana de la gorda como la amiga de tu infancia como la señora de la papelería o como todas esas beatas del coro o el bistek de la carnicería no, no es nada como eso no temas del todo, no habrá más cosas ilegales como lo que pasó con la inválida o con la que carecía de sus facultades ya no mamá, ya pagué esos crímenes escribiendo textos y poemas de superación personal ya aprendí en aquel retiro espiritual el por qué está mal hacerlo en plena boda con la novia del tío con marcapasos y cáncer terminal... ya aprendí la lección mamá. Pero, te lo juro, ella es diferente de hecho quizá peor que yo ella es asfixiante es veneno me piensa con maldad y yo con culpa ella dice que la bese que me acerque como pueda a su piel de púas y a sus labios de espinas como quiera, dice que quiere estar conmigo para no amarnos que esconderá sus sentimientos tras la sodomía ¿qué puedo hacer mamá? eso es muy lejos moriré sin antes llegar al fondo y tocar su corazón. Ella es una puta, y yo un borracho yo solo soy un insignificante poetastro un bohemio, un goliardo, solo soy eso, pero nada más cuando estoy con ella aquí, en este plano; soy menos que un loco que habla solo un pervertido que baila con su sombra y un alcohólico moribundo sin alma y ella que tiene la magia de hacer el sueño realidad de convertir por fin a la bala en flecha mamá y me disparó, justo en todos mis pechos soy una presa fácil la esperé todo el día en la entrada principal ansiando el atentado. -¿Y crees que te quiera?-dice mamá. ¿Y por qué no mamá? me vio ahí postrado y no se retiró, siguió caminando hacia mí como crees que no me quiere con lo fácil que es para una mujer darse la vuelta sin mirar atrás ella es impuntual sí pero las mujeres llegan tarde a todo mamá; llegan tarde a las citas llegan tarde a los recitales de poesía -y no importa si ellas lo organizaron- llegan tarde a la iglesia para detener la boda del amante -uno no puede ni en esos casos tan fáciles contar con ellas- llegan temprano a las tortillas pero siempre tardarán en hacer la comida mamá, las mujeres llegan tarde hasta para ellas mismas -a veces se les adelanta el periodo, o se les atrasa, ambas son metáforas de tardanza- lamentablemente también, todas las mujeres llegan tarde al corazón casi siempre llegan... cuando se van. -¿Y entonces hijo?-dice mamá. ¿Entonces qué? si siempre estuvo incluso antes de que le leyera antes de que le supiera antes de que le besara y antes de que me quisiera tú sabes lo que siempre dije aún de niño con mis ojos de pájaro. -Que querías volar-dice mamá. Sí, exacto lo sabías, todas lo preguntaban en su momento ahí tienes las notitas que deja aquella en la nevera la mirada con la que me escuchas como si se te viniera un recuerdo de la infancia el primer poema de amor a esa niña Bianca lo decía Girondo lo presagió, viste como aleteaba desde siempre... pero ahora mamá me siento tan solo, me siento tan simple ya no tengo nada que decir, llevo días sin escribir mis estupideces llevo días sin sentir siquiera el rose de los vellos sin oler una flor, ¡ella las odia!, mira como me dejó como el tallo mancillado del geranio que tanto amo ¡ella odia las flores! pero a ella le encantaría que le llevaran serenata a ella le encantan las cosas que no puede tener dice que no podría enjaularme por que nací libre ¡ay! mamá, pero yo no quiero una libertad donde no exista su yugo ya no lo resisto, me estoy muriendo sin antes tener mi vida para desahogarme y es porque se la llevó en ese último beso y su andar indiferente donde pensó en el que la enamoró alguna vez en el metro o en la escuela, o en el panteón... -¿Ella es especial?-dice mamá. ¡No! ¡no lo es! ¡especial No! ¡espacial Sí! ¿después de haber conocido a una mujer cósmica que te lleva arrear por el universo, qué te puede interesar una terrestre que te enclaustre en un pedestal con su pestilente beso? no sé que hacer mamá, no me sirven ni porque salten muy alto, necesito más que electricidad o suspenderme por tan solo un rato el trueno y el asenso fugaz son síntomas simples, ¡yo quiero toda la enfermedad! necesito que en verdad puedan volar dime, ¿es parte de mi inmadurez, de seguir siendo un chico? pero, ¿cómo dejar de ser un poeta niño que traza la belleza con la inocencia, y pasar a un adulto que plasme la simplicidad con su ignorancia? es tan difícil todo esto... ¿qué debo de hacer mamá si me duele, me cala hasta los huesos? -Ven abrázame, y déjame decirte que basta tan solo con que ella te piense para que seas más que un recuerdo, ahora dime como es, tráemela, léemela, seguro me va a encantar ella es la que vuela, y es para mí... uno de tus mejores poemas hijo-dice mamá.
Página 1 / 1
|
Eduardo Fabio Asis
Hoz Leudnadez