CAPÍTULO 3 “ESPEJISMOS”
El tiempo no se detiene por las penas que alguien pueda sufrir, menos por las aventuras que estén por pasar, ya ha transcurrido una semana desde que los chicos salvaron a Alia, y desde entonces algunas cosas han cambiado, Alia vive con Melissa, pues los padres de Melissa salieron de viaje por un tiempo, Alexander por otra parte sigue con su trabajo y parece acostumbrarse y aceptar esta nueva vida, pues los tres se reúnen con Susana en casa de Melissa para aclarar dudas y practicar un poco de magia, Susana les aclaró el origen de sus poderes, de cómo  Morcus fue asesinado por un hechizo de su medio hermano Darium, entonces Yardeli la mago-elfo envió los 3 poderes de Morcus a tres familias distintas de brujos, además les recalcó su deber de salvaguardar la seguridad de las personas y otros brujos de demonios, así como su objetivo principal, encontrar el libro de hechizos de Darium, pues tanto brujos como demonios buscan este antiguo libro, y si cae en manos equivocadas quien sabe que poder oscuro se abra ante ellos.
Los 3 intentan tener un vida normal, pero para Alia es un poco difícil, pues ella tiene los poderes psíquicos, así que aún le cuesta dominarlos, sabe que puede leer la mente y mover objetos e incluso personas a su voluntad, por otra parte Alexander en ocasiones sus visiones le revelan el pasado otras veces el futuro; pero entre los tres se ayudan,  así que durante este corto periodo los  han desarrollado un vínculo de amistad que crece día con día.
Es un sábado por la mañana y los chicos han acordado reunirse en el parque para una pequeña reunión, Susana no pudo asistir puesto que tuvo una reunión con sus superiores.
Cuando llegan al parque se instalan en una banca debajo de la sombra de un árbol, como es un día caluroso les proporciona un poco de frescura y relajación.
Los tres parecen buenos amigos y ríen con chascarrillos sobre la nueva realidad que enfrentan ahora, y en ese momento Melissa actúa como sorprendida, se pone de pie y usa sus poderes en unas personas que caminaban por enfrente. Alia y Alexander se desconcierta, pues es un lugar público y podrían quedar expuestos, para disimular Alia los mueve un poco con sus poderes, rompiendo así la inmovilización que puso sobre ellos Melissa.
- Pero ¿Qué te sucede?- pregunta enojado Alexander-. No debemos usar nuestros poderes en público… eso creo.
- Lo siento, pero vi que iban a impactarse dos chicos en bicicleta- responde Melissa.
- Necesitas lentes querida.
Con el comentario de Alia todos sueltan una carcajada, pero deciden alejarse de la escena para pensar sobre lo ocurrido, lamentablemente parece ser que un extraño hombre vio lo que ocurrió.
Los tres viajan en el coche de Alexander y deciden ir a la casa de él para terminar el día más tranquilos, ya cuando estaban por llegar en la calle de la casa Alexander gira el automóvil bruscamente hacia el otro carril haciendo que casi se impacte con un camión que venía por ese carril, lo gritos de Melissa movilizan a Alia y ella desvía el camión haciendo que todos estén a salvo.
- ¡Pero qué les pasa!...
- Lo siento chicas, de pronto vi que un coche venía directo a nosotros.
- Esto ya no es cuestión de anteojos- dice Alia, luego se estacionan frente a la casa de Alexander. Todos bajan y tras una breve discusión se les corre revisar en el libro negro de la familia de Alexander. Tras unas hojeadas descubren que el responsable podría ser Moux, el demonio ilusionista, crea espejismos en las mentes de almas inocentes para asesinarlos y reclamar sus espíritus, afortunadamente se puede destruir con un hechizo y una poción, los ingredientes parecen fáciles, en una herbolaria pueden conseguirse, excepto los “ojos de la verdad”.
- No pienso tocar ojos de ningún animal o algo parecido- dice Melissa con el libro en las manos.
- No creo que se refiera a ojos reales, dice… usar los ojos de la verdad, es una especie de acertijo- Alia parece tener razón, se queda meditando un memento-. Pero no se me ocurre nada, así que Alex ve por los ingredientes, trataremos de descifrar eso.
En el trayecto a la herbolaria Alexander por poco tiene otro accidente a causa de otro espejismo y en ese momento tiene una visión del futuro, los tres se asesinan entre sí a causa de los espejismos.
El sol está por ocultarse y el cielo rojizo es parte del escenario, os tres están preocupados por la visión de Alex y tratan de descifrar el último ingrediente, cuando son sorprendidos por el estremecedor ruido de la puerta del patio al romperse pues es de vidrio, y entre humo se dibuja la forma del demonio Moux, grandes cuernos y dedos alargados, su cara parece desfigurada por quemaduras y comienza a hablar en un extraño idioma, Melissa comienza a gritar pues ve gusanos por todo su cuero y Alex actúa como si se estuviera ahogando. Todo indica que Alia es inmune a los poderes de Moux, así que intenta atacarlo usando sus poderes para dejar caer el librero que está al lado del demonio, pero este se esfuma entre el humo y aparece al lado de Melissa, Alia la llama desesperadamente pero Melissa sigue aterrorizada por las ilusiones de Moux, entrando en un grave estado de pánico, Alex por otra parte parece estar muriendo ahogado.
Alia no sabe qué hacer, y el demonio revela otro de sus poderes, con la mirada arroja a Alia hasta la otra habitación, desesperada por la situación solo se le ocurre arrojar la poción sobre el demonio y en ese momento descubre que “los ojos de la verdad” no son más que una persona que sea inmune a los poderes de Moux, al tener ella poderes psíquicos, su mente es inmune a los poderes del demonio, así que corre hasta la cocina y comienza a leer el hechizo y a la par de que lo lee, unas llamas consumen al demonio y desaparece. Melissa agitada regresa a la realidad, pero Alex yace en el suelo, parece que no respira.
Unos ojos grandes y negros, acompañados de una roja y larga cabellera son lo que ven Alex al recobrar la conciencia, Alia le ayudó a volver en sí, y Alex se ve aliviado de abrir los ojos y ver esa cabellera rojiza y brillante, todo parece estar bien, excepto la casa, que tiene unos… “pequeños daños”
- Gajes del oficio- comenta Alia, los tres parecen estar bien y Melissa regresa de la cocina con un vaso de agua, se ven contentos al vencer solos a un demonio y demostrar que son brujos poderosos y están aquí para quedarse y hacer historia.