Cuando abrió los ojos, no sabía quién era, ni él tampoco. Eran dos vaivenes que armonizaban con su tierno cuerpo  otoñal ,se caí de a poco y su viejo tronco la sotenia,èl simplemente contemplaba la magnificencia de ese cuerpo, pues estaba lleno de vida, luego presenció el gran espectáculo de esta bella canción …un recuerdo tras otro cuando era un bebé, creciendo con cada gota de lluvia, y cada rocío matinal, tenía encendida su luz cuando se conocieron, él recibió una parte de su estructura llena de golpes, provocados por el viento, no sabía quién era…pero el mar sí. Él acogió sus hojas hasta en su regazo infinito, lo contuvo hasta que se desasieron en él. Él la observaba, estaba uno frente al otro, el árbol otoñal, era hermoso. En el pueblo en el cual se encontraba decían que cuando cae la primera hoja  de un árbol en la mañana significa que ha despertado, yo me pegunto… ¿Cuánto tiempo habré estado despierto? Estoy casi denudo y tengo vergüenza que el mar me vigile, La mundanidad de las personas, y del rocío que salpica en mi cuerpo.
El árbol murió, y junto con él ha muerto el mar…