Es extraño levantarse con la sensación de haber dormido entre tus brazos, de sentir como me rodeabas y me dabas calor, como procurabas que mis sueños estuvieran tranquilos, que espantaras cualquier alerta de insomnio o de pesadilla, es extraño haber sentido un ligero hormigueo por mi mejilla, un pequeño calorcito en mi oído, antes de cerrar los ojos, haber sentido como tus dedos se deslizaban por mi cabello, o por como recorrías el dormitorio, recuerdo haber memorizado cada grano de tu piel como para saber que es tu cuerpo el que se posa sobre el mío, Puedo sentir como respiras, como soplas en mi cuello, o cómo has de dar ronquidos, estoy oyendo tu voz, cada vez que cae la noche, como me llamas, o como simplemente prendes el televisor y te sientas a ver tu programa favorito, también como husmeas tus discos de vinilo, Puedo sentirte sobre el tejado, cuando cuidadosamente te subías y te dejabas deleitar por las estrellas, como me cubrías con una manta, y me prometías el cielo, es extraño recordar como vestías, que bien se te veía tu blusa color crema, con tus pantalones color negro, o como jugabas con los colores al combinar tus corbatas con las camisas, también recuerdo como te gustaba el café, o con cuantas cucharadas de azúcar te gustaba, es extraño recordar el recorrido que emprendían mis lágrimas los días en que tú te alejabas, en que discutíamos, y me dejabas sola, en los días en que cruzabas la ciudad, los días en que simplemente te alejabas de mí, están latentes, cariño, aun siento aquellas noches tan frías sin nadie a quien abrazar, no es extraño poder recordar el sabor de tus labios, como fruncías tus labios, en busca de regaloneo, los movimientos que hacían tus manos para recogerte el cabello, nunca ha sido extraño para mi poder recordar tan bien tu mirada, profunda, tus ojos color café claro, con un brillo particular, tan brillosos cuando se trataba de llanto, tampoco olvido las margaritas de tu sonrisa, o el sonido de esta, tus palabras, tu voz… simplemente tu silencio, que de vez en cuando mantenían tus labios tan unidos, tan llenos de ti, y tan deseosos.
 
   Pero comienza a ser extraño que aun pueda sentir el calor de tus besos en mi frente, los que me dabas cada mañana, al salir, ninguno se escapa, escucho los pasos que das desde el baño hacia la cama, en como corres, cuando el tiempo te alcanza, estoy sintiendo tu presencia, y es realmente extraño, ver la sombra de tu cuerpo deambular por la casa, sin aviso, corres por los pasillos, te adueñas de los sitios, es extraño sentir el pesar de tus hombros rodear mi cuerpo cuando yo siento miedo, cuando yo he de llamarte, tú has de venir a abrazarme, estas envolviendo mi soledad con tu dulce esencia, es tan extraño sentir que estas a mi lado, que estas tan cerca de mí… aún convencida que ya no estás.
 
     Los días van transcurriendo de una manera extraña, junto a ti, se hacen apacibles, pero es verdad, los café me los he tomado sola, muchas veces le tomo el sabor al día, como muchas veces, solo leo un libro, y le veo pasar, es extraño ver como dejas señales en casa, como encuentro nuestras fotografías, o tus prendas favoritas, es extraño que intentes decirme algo, estoy viendo todas las fotografías mentales en donde tú estuviste presente, es extraño sentir como en sueños suelo acariciar tu cuerpo, pero muy extraño es como tú me despiertas con tus caricias, es extraño sentirte, si tengo la convicción de que no existes.