Perversidad
Publicado en Sep 02, 2013
Solemne voz de coro infernal
son en tus labios los halagos. Frías manos de rencor y de mal acarician con cinismo mi rostro. La ira secó la miel de mis labios, pudrió la dulzura de cálida voz y secuestró el brillo de mis ojos... Renació el odio y la pasión de mis enojos. Forjaste este semblante caído, me transformaste en rocío perdido, induciste mi alma al eterno vacío. Y cuando esfumados veas tus sueños y deseos, sentirás que sin mi no estás completo. Te verás hostigado en la soledad y te darás cuenta de la verdad... Recordarás a tu ya perdido trofeo. ¿Ves cómo tu vida interpreto? Sepultaste en el averno mi sinceridad. Vivirás ya sin calma, sin paz y de humillación repleto por tu jugada fugaz.
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CAZADOR