Inocuo dolor, amargo pensamiento.
Publicado en Oct 24, 2013
El pensamiento es abstracto, intangible. De igual forma todo lo que significamos es siempre transparente, además de cambiante y lleno de controversia. Sin embargo, a pesar de ser abstractos, se ven reflejados en nosotros, a veces como en un espejo, a veces como en aguas turbias. Son puentes hacia el exterior del ser. Proyectamos lo que somos más allá de nosotros, no podemos evitarlo, forma parte de la naturaleza de nuestra conciencia, de ahí aquello de que el ser humano se trasciende a sí mismo. A pesar de ello, el exterior es lo mismo que la nada: sólo podemos captar una determinada longitud de onda, quedando limitados a ciertos tipos de sonidos, y también a un número de colores que podemos percibir, dentro del espectro de luz visible. En el caso del "espectro visible" de nuestro pensamiento consciente, no hay un límite definido, ya que no conocemos ni dominamos nuestra propia mente tanto como nuestros sentidos, ni mucho menos; no podemos estar seguros de nada real. El pensamiento se pierde en el inconsciente, y no podemos penetrar en él, por tanto no podemos conocernos a nosotros mismos. Y si pudiéramos ver en los más profundo de nosotros, sería nuestro final, hay varias teorías de por qué el inconsciente permanece enterrado. No obstante, quizá algún día podamos doblegar cada parte de nosotros con un equilibrio racional capaz de controlar todos los impulsos e instintos sin perder la sensibilidad.
En el interior, la oscuridad, el vacío de la nada que amenaza la cordura, en el exterior, más allá de nosotros, está todo con lo que interactuamos mediante a los sentidos. Y nuestra conciencia, no puede más que creer en aquello que siente, y tratar de darle una explicación. Pero por más experiencia que podamos adquirir y por más que tratemos de razonar, jamás comprenderemos la realidad. Existimos en un limbo entre el inconsciente de nuestro ser y la existencia de todo lo demás. A pesar de que nuestra mente siempre va más allá por necesidad. Sólo puede creer, pues, como he dicho unas líneas más arriba, en el exterior es lo mismo que la nada.
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Battaglia
Me parece una excelente aportación....
Saludos
Aserder