Me pareciò inspiradora està historia, la cual, era de un perro, y su dueño, y yo, decidì ambientarla a mi mente, una mente imaginativa y gigante.
A.c.c.
 
Era un verano caluroso, mi vida era tan normal como siempre, yo tenìa solo 7 años, en la TV, vì la noticia: Una fàbrica en Japon habìa creado el primer robot servidor para hogares, existìan de todos tipos, y como mis padres eran, adinerados, compraron uno, que al final se daño cuando tenìa 8 y medio, en serio odiaba ese cacharro, a veces echaba balas de vapor que hacìa que mi cara ardiera.
Lo odiaba. 
Cuando tenìa 15 años, salì luego de terminar con Jessi, mi ex-novia, a una playa a la cual le gente llamaba: la Playa Cacharros de Japòn, ya que ahì tiraban a los Mayordomos electricos, caminando por las calles, notaba que todo el mundo tenìa a sus servidores siguiendolos, pero, no les mandaban a hacer nada, ya habìan perdido la fascinacion por aquellas montañas de basura.
Llegue a la playa de cacharros Japoneses, y sin hacer nada importante, me lance en la arena para extraer de mi bolso, una libreta en las cuales hacìa bocetos. Buscando que dibujar, vi de un lado a otro, hasta que vì, a un señor que estaba dejando a un Cacharro, màs, este estaba en perfectas condiciones, camine hacia esta masa parecida a una gran tetera, que abriò una compuerta para vigilar de aquì para alla con sus ojos biscosos.
Al verme, saco todas sus patas, parecidas a las de un cangrejo, y salto, y no sabìa por que. Busque la manera de esquivarelo y salir de la playa que habìa empezado a ponerse calurosa, y habian mosquitos a monton, pero el Cacharro me seguia.
Hasta quedecidì, llevarlo a mi casa, donde mis padres, no lo querìan, yo les dije que serìa una noche, a la cual accedieron. A la mañana siguiente, busque con quien dejarlo, pero no encontre anadie, no sabìa que hacer, me angustie, hasta tal punto de tranquilizarme jugando con Cacharro, al cual empiezo a decirlos con anticipacion, que le dije con cariño, y el respondìa a ese nombre. 
A la noche, lo oculte, en la Tv, vi mi salvacion:
"harto de su Cacharro. Ya no lo quiere, traigalo para acà, el almacen de cacharros, los cuidaremos hasta que alguien màs lo compre, traìgalo ya" 
tima, me preguntaban: ¿esta seguro de que ya no quiere a su cacharro?lo mire,jugaba con otro cacharro, de otro ,señor que dejaria un cacharro ahì tamvbiebDecìa la propaganda, a la mañana siguiente, lo lleve a la calle, donde deje a cacharro luego de llenar màs de 50 pàginas de formularios, preguntas, en la cual la ùltima, me preguntaban: ¿esta seguro de que ya no quiere a su cacharro?lo mire,jugaba con otro cacharro, de otro señor que dejaria un cacharro ahì tambien: Seguro, respondì...
 
Al salir de el almacen, me dirigì a mi casa donde me mi padre, me pregunto que habìa hecho con mi Cacharro, al decirle donde lo habìa dejado, reacciono de una extraña manera:
-¡como se te ocurre!
-ahì lo van a cuidar.
-cuìdar mis cabellos, hay matan a los cacharros.
Salì lo mas rapido posible, pero, sin embargo, no me devolvieron a mi Cacharro, con  todo tipo de pretextos, no me dovlodieron a mis cacharro.
Yo le habìa tomado cariño, lo querìa, como habìa pasado.
CONTINUARA...