Empeñe mi Corazón al precio de un insomnio desquebrajado,

una sonrisa sin un beso, una palabra sin amor.

Empeñe mi Corazón sin interés oportuno, sin causa y sin efecto...

sin cuotas y sin manejo, con la simple intención de obsequiarlo,

como se obsequian rosas en verano, o caricias demoníacas en invierno.



Tu decides... si con este precio vasta!

¿cuanto puedes tu pagar, por su ausencia inerte?

¿cual es el precio que dispones a pagar, por el parafraseo, retahíla y tartamudeo?, fenómeno parcial de este circo ¿por este payaso sin carmín? ¿por este mimo embelesado en su actuación?.

es tu decisión; si recibes este prospecto y regalo que carece de pulsaciones, de vida y de calor.

pero ten presente algo al momento de la adquisición; Este no es mi Corazón!!

el mio vive aún aprisionado en otros recuerdos,

y con pueriles y diáfanas aspiraciones, he pagado mensualmente y con creces, el precio de su cada vez mas caro latir. 



Por tanto te ofrezco mujer desnuda! un corazón impreso en una estatuilla color de plata,

envuelto en papel de trofeo, compuesto principalmente de hojalata. 

y cuyas aspiraciones por recordar escribir o palpitar, son lo único que tengo para ofrecerte; nada mas...

Este es mi obsequio! o llámalo como quieras: (ofrenda, negocio, venta, empeño, trueque o trampa) me da igual!

esta masa nervuda de remembranza, nada tan inocuo y verdadero.



Te concedo, provocadora venus de pechos al aire! esta caja llena de potencial pandorico,

pues confió con certeza, la adquisición que tu has guardado de la correspondiente llave.

y solo esta llave que tu has de poseer, es capaz de irrumpir con un solo estruendo

entre este medio kilo de sangre y carne, ubicado en el extremo inferior izquierdo de mi pecho en custodia de 4 huesos y un suspiro.

Con el fin de librarle las alas, para que vuele en fuga y muera lejos...

Te obsequio un Corazón con forma de fetiche,

y tu; ¿que me darás a cambio? 
yo solo busco y pido el precio necesario para poderle recuperar de su presente exilio, de la simplicidad y del remordimiento del mundo cotidiano. 

¿estas dispuesta a pagar por el?