Anécdota de Regem Angelorum
Publicado en Mar 15, 2014
[Favor de reproducir éste video, escuchar la música mientras se lee la nota:http://www.youtube.com/watch?v=YwJHlb3gPnI#aid=P-0csrCoFbs]
Dentro de las jerarquías del cristianismo, existe una que cataloga a esos seres que de alguna forma ayudan a Dios. Los ángeles, están los ángeles en el cielo, están los ángeles que desobedecieron a Dios, y es por sus malos actos que llegaron al averno. Pero éste no es más que un ángel caído, eso si, no es cualquier angel. Sino un Serafín, el Serafín es la clase de ángel más poderoso que existe, medir su poder y energía en números sería algo humanamente imposible, y después de haber pasado buenos y malos momentos, se tomó un día como hoy para relajarse tranquilamente. Se encontraba lejos de sus dos aliados, la ángel que comúnmente lo acompaña, y el joven mundano al cual entrena árduamente. Sus sentidos comúnmente le advierten cuando hay alguna amenaza cerca, pero éste no era el caso. El clima era agradable, el sol estaba en una pocisión cómoda, no había un calor hostigoso, sino una temperatura agradable. El aire corría refrescando todo a su paso, y en un momento de decisión, el Serafín dobló sus rodillas y posterior a eso dió un salto, después de el salto de golpe abrió sus alas recorriendo todo lo que veía. Normalmente basta con el aleteo de una ala para alcanzar una velocidad de 300 km/h pero ésta vez regulaba la fuerza de sus alas. Para volar más “Lento” Lo único que escuchaba era como él mismo rompía el viento atravesando los cielos, pero no era un vuelo lineal, sino que doblaba a la izquierda, luego a la derecha. Pasó por varias areas verdes, el viento le empujaba sus dorados cabellos, pero él seguía contento, sonriendo y disfrutando de los maravillosos paisajes que su Dios le ofrecía, era ese momento en el que te detienes para ver lo hermoso que es el mundo, o las personas que te rodean. El Serafín estaba en una situación como esa y pronto encontró un cuerpo acuoso. Estuvo volando a un nivel muy bajo, cerca de 2 metros de distancia, en un principio aleteaba mientras veía su reflejo, en el agua motivado aún más por las maravillas de la naturaleza, se acercó lentamente mientras descendía en silencio, disminuyendo así su velocidad. Primero metió uno de sus dedos, el agua fría tocaba su piel, piel que lastimosamente cubría por sus guantes para la guerra. Él quería quitarselos en ese momento, pero detenerse a hacerlo le hubiese quedado la escencia del momento. Unos kilómetros más adelante sumergió toda su mano, pero sabía que no podía descender tanto, alzó su mirada hacia el cielo, dándole la espalda al sol. Después de eso con un aleteo se elevó de nuevo por los aires. Él iba de frente pero ahora giraba sobre si mismo. Disfrutaba su vuelo dando vueltas como si fuese un tornillo, sólo un haz en el cielo podía hacer esa “Maroma”y él era precisamente eso, un maestro de los cielos . En su vuelo y con sus giros, el Serafín soltaba unos brillos extraños de color dorado, como el dorado que portaba en su sedoso cabello. Cuando alcanzó su punto más alto de vuelo, vió un campo extenso, y al final del campo se encontró con un Manzano gigantesco, era tan grande que su sombra cubría varias decenas de metros, y con una sonrisa de oreja a oreja voló a toda velocidad, disfrutando de su transcurso hasta dicho árbol. Llegó al suelo corriendo en pasos rápidos y cerrando sus alas, después de eso dió un salto arrojando su torso, girando nuevamente en el aire y cayendo de espaldas sobre el verde pasto, por debajo de la sombra, después de eso él Serafín recostó su cabeza en la corteza joven del manzano. Ya había puesto sus dos manos por detrás de su nuca para relajarse más, incluso hasta holgazanear. Pero en el extremo de ese gigantesco árbol vió un fruto, un fruto rojo y grande, maduro y exquisito. Los ojos le brillaron en cuanto vió a la manzana fresca que se tomaba a unos metros de él en una pocisión diagonal. Pero su mismo estado de pereza/alegría no le dejaban ser, y puesto que controla TODOS los elementos de la naturaleza. Estiró su brazo derecho moviendo los dedos de su mano hacia adentro, como si jalase algo con unos hilos o como mejor ejemplo, parecía como cuando “Magneto” atrae hacia él un objeto metálico. La rama del árbol, como si estuviese siendo jalada, se inclió de manera natural, despacio y lento hacia abajo, siendo que el Serafín ni siquiera hizo un contacto físico con ella. El frutó tembló, y se separó de la rama, cayendo de manera diagonal y lenta, caía dando vueltas como él lo hacía mientras volaba, la velocidad y la trayectoria que la manzana conservaba rompieron por mucho toda ley posible de la física. Después de ese irregular vuelo, la manzana llegó a la mano izquierda del Serafín, siendo que la estaba atrayendo con la otra. Un círculo de luz se formó en la pupila del Serafín en cuanto la manzana se acercaba a su boca. La música tranquila y relajada que sonaba en un principio, fué tomando un rumbo oscuro, unos tambores gigantescos rompían la paz con un violento sonido que parecía toquín de batalla: [Favor de reproducir éste tema, y regresar a leer la nota para crear un ambiente digno:http://www.youtube.com/watch?v=yMACkCOwalY] En cuanto el Serafín puso su perfecta dentadura sobre la fruta, como un flash back se regresó violentamente a su pasado. Cuando el hombre tenía su alianza directa con Dios, en los tiempos en que Adán y Eva corrían libres por el jardín del Edén. Pero Eva no fué precisamente la primera o única mujer de Adán, Eva nació a partir de una costilla de Adán. Pero antes de ella. Nació una mujer creada desde cero, no tenía nada de Adán. Una mujer independiente, que se valía por si mismo, por ese entonces Adán no tenía sentimientos (Cuales obtuvo después) Lilith, el nombre de la primera esposa de Adán, al no obedecer las órdenes de su esposo. Fué expulsada del cielo de la misma forma, entonces ella llena de ira, decidió cometer los actos más horribles y denigrantes que una mujer haya hecho jamás. Puesto que todos sus hijos, son demonios, y todos los demonios de la actualidad descienden casi directamente de ella. Comúnmente se le veía teniendo múltiples relaciones sexuales, con cientos de demonios, hombres o lo que fuese. Por cada una de sus cabidades y como pudiese en intervalos cortos todo el tiempo. De la misma manera en que se le ve siempre preñada, puesto que es la primer súcubo, y constantemente se alimenta del semen sobrante de los hombres lujuriosos y además de eso, de muy mala fortuna. Tiempo después, cuando la tierra ya estaba bastante más poblada, una legión de ángeles fué a donde Lilith, la cual habitaba una cueva repleta de sus demonios cerca del Mar Rojo. Entonces el líder de ésta Corte de Ángeles se le acercó preguntando: ¡Lilith! ¿Dónde te encuentras? -Preguntó a gritos el líder de esa Legión de Ángeles con su lanza en mano- ¿Para qué la buscas? -Le respondió uno de sus hijos demonios alborotado- El Creador la necesita. Adán, su primer esposo, se siente “sólo”, “Vacío”. -Respondió el ángel- ¡Jah! Ese hombre no es nada sin mi -Exclamó Lilith desde el fondo de su cueva- Sabía que algún día regresaría, rogándome a los pies por mis artes amatorias ¿Porqué Dios no le crea una mujer igual? Ohh cierto, sería con la cabeza vacía, no como yo, que sé muy bien las cosas. Te pedimos, regreses con Adán... ¿Y qué pasa si me niego? No tengo motivos por el cual volver con ese pelmaso... Por cada demonio que traigas al mundo, -Comentaba el líder mientras empuñaba su espada- nosotros mataremos 200 más ¡TE RETO! -Exclamó lilith abandonando su bello rostro, deformándose para dar paso a una cara demoniaca de aspecto horrendo- Pero quien estaba hasta atrás, y de los primeros ángeles en ser creados. Era nuestro querido Serafín, quien veía desde atrás todo con un tanto de miedo, puesto que era jóven, pero desde recién nacido era un guerrero nato. Pasado ese momento se desató una ensangrentada pelea, donde se derramaron los litros de sangre sobre la tierra fértil, tierra que jamás había probado el metálico sabor de la sangre. Pasado ese Flash Back. Los ojos del Serafín brillaron de nuevo, y él asustado retiró la manzana de su boca, ya la había mordido, pero no lo haría nunca más, dejó la manzana del suelo y se retiró del lugar volando a toda velocidad. Escrito por Carlo Trejo ;)
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