El Niño del Botón de Oro.
Publicado en Oct 01, 2014
Ezequiel era un niño de baja estatura, pelo corto muy rubio y vestido a la¨antigua¨como hoy en día diría cualquier experto en modas, de otra parte expresión mal utilizada si cabe, pues moda no es si no una corrupción de modo y esta deriva de la palabra modal y eso, no le faltaba precisamente al niño, los buenos.
Pero volviendo a la historia de Ezequiel, paseando por su barrio se encontró con un objeto diminuto de oro, nada que valiera la pena coger a decir de él pues, por más días que pasaba junto a él, más brillaba y nadie se interesaba. Pero la curiosidad pudo con él y lo tomó en sus manos, sólo para darse cuenta que era un simple botón. !Sopla! un botoncito de oro. Debió pensar el niño y lo introdujo en el bolsillo de su pantalón hasta que llegado a su casa se lo dio a su madre para que lo guardara por si era menester un día usarlo. Y ese día llegó cuando al ir a ponerse una camisa amarilla, con botones del mismo color, la madre observó que le faltaba uno y ese botón por su tamaño, era compatible con el de oro. Ni corta ni perezosa, la buena madre cosió el botón de oro que destacaba sobre el resto de amarillos de la camisa y los botones, haciendo un extraño juego. Pero al salir a la calle, la envidia de quienes por allí pasaban se hacía patente, insultando al ¨rizito de oros¨como le iban a denominar desde aquel día. Claro que alguien no estaba de acuerdo con los insultos. Era un modisto anciano y exquisito que le ofreció todas las mejores ropas a cambio del botón. -Te vestiré siempre gratis y si la envidia de tus vecinos cae sobre ti, no tienes más que decir, ande yo caliente y ríase la gente. Y desde ese día Ezequiel fue considerado el niño de Oro.
Página 1 / 1
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|