La luz de mis ltimos das
Publicado en Sep 12, 2009
Veo rodar los cantaros hacia lo amarillo.
El día crepita y se incendia su llama. El aire pesca sombras con su anzuelo y mi frente se asila en su grato fluir. Ando sobre suelos sustituidos. Casi a desmedro de mi mismo ando. A pesar de mi hipertensión y mi diabetes y mis piernas largamente débiles me pongo los calcetines y vengo a esta capilla de los aires primerizos y sus verdes monólogos. Fuí guardaguja de los trenes rastreros. Fuí marinero en todo mi vigor. Comí torrejas y calamares y bebí sake y relámpagos. Y archipiélagos de amores tuve y también perdí. Bailaba los mejores valses acompasados y luché contra legiones de licántropos. Llevaba siempre conmigo una armónica celeste que tocaba hasta el arrebujamiento de la media noche. Me hice acompañar de damiselas insignes y hasta una vizcondesa cedío ante mis afectos. Era yo bello en mi uniforme galáctico. Era yo sabio en amores a mi moza edad. Siempre encontraba el norte sin usar la brújula y era mas exacto que reglas y astrolabios. Dominaba toda la dimensión marina y en vados arenosos jamás hice encallar. Pero ahora tengo arritmias y desmayos y mis ojos se alistan a morir entre acentos. Pero me visto, me peino y salgo al aire trémulo a apropiarme de la luz que hay en mis últimos días.
Página 1 / 1
Agregar texto a tus favoritos
Envialo a un amigo
Comentarios (0)
Para comentar debes estar registrado. Hazte miembro de Textale si no tienes una cuenta creada aun.
|