Y no pude curar el dolor detrás de tu sonrisa. Aun así reconocí tus señales, a pesar de que alguna que otra se me haya escapado.
A pesar de que antes del inicio ya nos mentalizamos el final, me deje llevar en la deslumbrante galaxia de tus suaves besos, aunque tan solo por unos instantes. Sé que de alguna manera debía prepararme para topar con la realidad…
Y no pude secar tus inexistentes lágrimas. A tu lado mi vida se llenó de fascinación. Sentía con mis ojos cerrados el cálido viento soplar, ese mismo viento que después enfriaría mi sustancia vital.
Hoy siendo verano, nieva y mi sol no es tan brillante como ayer, lucho para continuar, aunque cada suspiro ya no tiene un porque… un por quien.
Simplemente fue una utopía más alta que el cielo, un sueño ahogado, porque no un paraíso pintado.
Estoy pidiéndote a gritos desde el fondo de mi corazón que me enseñes la comprensión, esa fórmula de olvidar que no compartes con nadie.
La necesito.
 
                              Snooki