Mi vecino de a lado
Publicado en May 25, 2015
Conozco a Charly desde los diez años, era mi vecino. Aún recuerdo en su cumpleaños número doce cuando me llamó, la pequeñita, por ser un tanto menor que él. Siempre me ha gustado, es muy atractivo debo decirlo, de niño era encantador y conforme iba creciendo su belleza también: el pelo se le oscureció tanto que la noche se situaba inferior y sus ojos se intensificaron en un azul que el océano y el cielo no tenían reflejo en ellos. No solo fue su físico, su corazón también se desarrolló más bondadoso y él más gentil, a pesar de las burlas y tratos de que le dio la gente, pues si no han entendió, Charly tiene preferencias por otros huecos.
De niño era tan coqueto que creo fue esa dulzura la que lo ablandó, o el hecho de que su madre lo haya abandonado a él y a su padre tiempo atrás. Tal vez desarrolló algún complejo psicológico que lo hace rechazar al género femenino por cuestión de rabia u odio. En fin pensé que Charly había salido de mi mente luego de se fuera a estudiar la preparatoria en otra ciudad y cuando por fin yo ya estaba en mi último año lo volví a ver. Corrió a abrazarme en el instante. Sara, Sarita, me decía. Con esa rica voz que siempre supliqué me amara. Seguido iba a mi casa, casi vivía ahí, pues ya estaba de vacaciones. Juntos nos poníamos a hablar de todo lo que habíamos hecho, lo que queríamos hacer. Era evidente que continuaba prefiriendo a los de su sexo, pero nunca perdí las esperanzas ni bajé los brazos. Nuestra amistad creció tanto que me confesó salía con alguien; un chico de su edad, apuesto, inteligente, cariñoso, dulce y todo lo que a él le gustaba. Yo sólo sonreía, pensaba en la total envidia que le tenía a su pareja; poder acariciarle el sedoso pelo a Charly, poder abrazarle el torso descubierto, pasar junto a él muchas tardes y noches en vela, besarle los delicados labios rosas. Cuando al fin me gradué de la preparatoria, me propuse en declararle mi amor y casi devoción hacia él, guardaba la esperanza de que me diera una oportunidad. Le dije que podría demostrarle que su miedo a las mujeres no tenía que quedarse por siempre. En cuanto se lo conté, lloró, dijo que se sentía muy mal triste, alagado y al mismo tiempo insultado por pensar que yo tuviera esa visión de él. Me reveló que su orientación no era por rencor a las féminas, sino porque prefería los sentimientos que le hacían brotar los varones, pero allí no acababa la cosa. Charly me informó en titubeos y prácticamente avergonzado que el romance que tenía era con Leo. Mi hermano mayor. Se habían seguido la pista desde secundaria y hasta hace poco lo habían confesado. Lo mantenían oculto ya que Leo no era declarado abiertamente. Asentí en lágrimas, expresé que conmigo su secreto estaba a salvo. Pero que lo mejor sería que ellos lo dijeran, digo, si se querían tanto que no les importara los prejuicios de la gente, si las cosas fueran distintas, tampoco tendría nada de malo que yo saliera con alguien mayor. Con ese hallazgo mi amor platónico tuvo que desaparecer de mi cabeza, esfumarse tan lejos que el olvido lo olvidara. Seguimos siendo amigos, aún sueño con él, lo siento en mí. Muy dentro de mí, de cierta forma, Charly se conecta con mi sangre.
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Gustavo Adolfo Vaca Narvaja
Felicitaciones
Alicia Chilena
Me alegro en verdad que mi relato te haya gustado. Eso de los amantes y los hermanos siempre ha existido en todos lados, lo curioso es la manera en que se presentan las cosas.
abrazos amigo
Tatiana
Tu historia me conmueve. El amor siempre es algo puro que nos eleva, sin distinciones ni prejuicios. Un besito. Tatiana
Alicia Chilena
Gracias por tu visita, espero leerte seguido
abrazos.
Carlos Campos Serna
Alicia Chilena
brazos
Maria del Rosario
Los nacidos en las generaciones del 40, 50, 60, hasta los años 70 No lo tienen DEL TODO "asumido" como algo natural y aceptable.
Yo quise mucho a alguien que jamás aceptó su homosexualidad, nunca pudo ser feliz con una mujer ni con un hombre....
Es muy triste, el resentimiento siempre es mas doloroso que el rechazo por parte de los demás.
Bueno, es una historia muy larga de un amigo mío, no puedo contártela "toda"- en público- Igual, yo sé que tu comprendes, eres astuta y sutilmente incisiva....
Un abrazote Amiga
Maria del R.
Alicia Chilena
comprendo tu anécdota amiga
abrazos y bendiciones infinitas
Enrique Gonzlez Matas
ME HA GUSTADO TU RELATO: BIEN DESARROLLADO Y BIEN CONTADO.
TE FELICITO CON MI ABRAZO.
Alicia Chilena
Lucy Reyes Neira de Lozano
Personalmente pienso que si los que tienen diferencias sexuales no lo ocultaran, lo dejaran ver como algo natural, vivirían muy tranquilos su propio mundo..
Cordial saludo,
Lucy.
Alicia Chilena
comparto la misma opinión.
un abrazo amigo