La lluvia acrecienta la soledad,
Corren a sus refugios, a abrigarse y a pensar,
Algunos la contemplarán, detallando sus gotas al bajar,
Las ven unirse a la luz que aclara la obscuridad,
A otros con sus lágrimas confundirá, para sus tristezas disfrazar,
Hay quienes la esperan llegar para ver si el frío los ayuda a olvidar,
Alguien le pide un abrazo a quien no lo negará, tienen la suerte que otros no tendrán,
A mí me encanta la lluvia mirar, trae recuerdos que no volverán,
Días de escuela en mayo y noches en navidad,
El árbol de la felicidad, que tanto cuido mi mamá,
Lo sacaba bajo la lluvia para que se pudiera impregnar,
Eso le inyectaba longevidad,
Hasta que nunca más vio la lluvia y solo se vino a marchitar,
Desde allí sentí que nada sería igual,
Recuerdo el sonido de la lluvia en el techo estando en casa de mamá,
Como no recordar, el chorro de agua bajando en el zaguán,
Estoy odiando ser adulto si crecer es olvidar,
Nadie piensa igual, “a bañarse y a acostarse para que puedan descansar..",
Eso decía mamá, con ese olor a guarapo quien se podía negar, nada mejor para tomar,
El aroma a tierra mojada, sensación de libertad, no se puede comparar,
Un beso bajo la lluvia detuvo el tiempo, y por minutos dejé de pensar,
Sabía que se acabaría y me dediqué a disfrutar,
Cuando por fin siguió el tiempo y desperté en la realidad,
Pensé que cómo la lluvia hacía un instante tan especial,
No creo que sólo sea agua lo que cae de ése lugar,
Serán lágrimas de ángel o algo así de celestial,
Que baja a bendecirnos con su líquido cristal,
Lluvia que trae recuerdos, alegría y soledad,
Sentimientos, amores y momentos de felicidad,
No me vayas a abandonar, refréscame una vez más,
Pues cada vez que te miro, miro a un recuerdo más....
C.P.