No será eterno el tiempo ni tampoco larga la distancia,
para que pueda mi barca surcar los cuatro vientos,
pues más fuerte es el sentimiento que está bordeando mi aura,
y el pulso que mi corazón carga cuando acaricias mi pensamiento,
más la energía del secreto que se oculta en nuestras almas,
puedes esperar con la brisa de la playa que yo zarparé en tu puerto,
que aunque pienses que no es cierto me invaden las esperanzas,
ni el infinito alcanza todo lo que yo por ti siento,
te protegerá nuestro amor indiscreto de tristezas y nostalgias,
manteniendo perseverancia para engrandecer nuestro huerto,
tu nunca me verás muerto aunque no vuelvas a ver mi llama,
pues donde no se escucha nada te protegeré en silencio,
así que espérame en tu puerto que yo llegaré junto a mi esperanza...
C.P.