Ella siempre se queda, y el alma se va, se sumerge, se pierde en los desvaríos de los sueños. hay una búsqueda Javier, una continua búsqueda de sí misma... gracias por estar.
Un abrazo.

ELLA MUERE EN LA NOCHE.

Caprichosos oráculos
presagiaban el vuelo
¿acaso lo intuiste, poeta?
Ella lleva el sonido
del olor en su pelo,
voz salvaje, impetuosa

Tù… como el agua corrìas
entre sus dedos
Has dejado que suelte
el alma, se ha escapado
de tus brazos,
no puedes detenerla

Ella no es de esta tierra
no pertenece al mundo
de tus sueños. Vaga
en los confines inmersos
del infinito cielo

Es ave, es viento, pàrpado
azul de niebla, de luna
desprendida, vorágine
de palabras, de verbos

que desgarra, de vocales
que olvida, ella muere
en la noche su muerte
desmedida, ella pasarà
tan cerca, tan cerca,
que rozarà tu espacio
de ternuras desiertas,

se meterà en tu carne,
Y buscarà en tus ojos
crisoles de fantasmas
Y alejarà tus miedos, y se irà
de tu boca, de tì, de ella.

Se irà otra vez, poeta

Mas quiero retenerla
Y cuando en la noche acuda
Cerraré los ojos con fuerza
Pues habré hallado en la duda
Una sombra de su belleza
De la eterna batalla por volver a verla
Siendo un cristal que resplandezca

Materia no será
Pero eso me deleita
Después todo la prefiero
Sensación más que presencia
Placer irresistible para la realidad
Que en incontables horas de paz
Decide soñar y soñar
No verle jamás
Hundir mi boca en su boca
Y luego despertar

Así su cuerpo
Envuelto en oníricas descripciones
Provocará de nuevo al inconsciente
Fabricando singulares olores
Que engañarán a mi mente.
Y dejarán henchido de heridas
A este corazón deprimente
Listo para la huida.