¡Faro roto en la distancia! ¿Dónde se ha quedado, quebrado para siempre, el liviano pensamiento del pescador? ¡Curuzú en la lejanía! ¡Un hundimiento tan cercano no puede dudar! ¡Faro roto en la distancia! ¡El pescador se ha puesto a pensar en las palabras! Quizás logre, al final, un compás de compañía que le haga llorar más acá de la tragedia. Quizás logre que, en el punto de encuentro entre las lágrimas y la sal, el mar vuelva a ser la mar. El huracán deje de existir para dar entrad a la calma. Si te dijese que existe un gaviota en mi corazón sabrías que entiendo lo de los aromas matinales y esa porción de ilusiones que han escapado siempre de las tragedias para ser alma,. vida y corazón. Posiblemente el rostro que describes sea la imagen que vemos detrás de la pantalla de una inundación de silencios. Pero yo escucho a la mar porque la mar se me ha vuelto Palabra.

Qué impactante tu texto. Creo que la naturaleza de pronto se ensaña con la sociedad. ¿pero nosotros también influimos en esto?. Yo pienso que sí. En mi país han ocurrido estos mismos hechos, pero también creo que la mano del hombre a actuado provocando estas calamidades.

Muy bien redactado tu texto.

Saludos de un hermano chileno.

Lindas letras de una realidad muy triste, qué Dios se apiade de los pobres porque las autoridades están de vacaciones o aducen que no hay plata porque el gobierno anterior los dejó sin un peso.
Estimo que la naturaleza es sabia y está pasando la factura , en lo que atañe a lo que depende de las autoridades es el gobierno quien debe acudir DE INMEDIATO.
Un abrazo
Eva L.

Una cruda realidad que hace sentir a veces la furia de la naturaleza. Si la naturaleza pudiese hablar, ¡cuantos reproches harìa al mundo! que se especializa en destruir y contaminar.
Estas inundaciones si bièn no son anuales, son tal vez, las segundas de importancia en la zona y han creado una situaciòn triste, grave y cuya reparaciòn llevarà tiempo y paciencia
Nosotros somos solidarios en las pequeñas cosas, agua, alimento colchones, pero los damnificados llevan el dolor y la frustraciòn.
Curiosamente las paletas del pintor tiene siempre algo que capturar en estos momentos.
Saludos

Triste realidad, amigo mio; la naturaleza con su ira sorda enmudece el alma y entonces... se entristece la vida . . ..
Oh Dios!!!!
Saludos