Es gracioso cuantas cosas pasan en un año, cuantos acontecimientos ocurren, cuantos recuerdos se guardan, cuantas personas se olvidan, cuantas personas conoces, cuantos fallos y cuantos triunfos.Cuando me dí cuenta, habíamos empezado Diciembre, y cuando menos lo espere llegará el 2017. Cuantos aprendizajes hechos... Es interesante, este año fue uno muy dificil, pero quizás no tan terrible como pensaba.     Hace poco habando con una amiga sobre el año que pasó le dije "No tengo recuerdos malos de este año, siento que fue uno muy bueno", y leyendo escritos anteriores veo que tan mal estaba hace unos meses atrás... ¡Que interesante como la tristeza nos enseguece de todolo que nos rodea y como la felicidad inhibe todo el sufrimiento!Me resulta alocado como todo lo malo, en tan pocos meses se alejó. Que loco pensar que me sentía sola y la casa nunca estuvo vacía, siempre había una taza de té de más. No pienso negar mi tristeza, ni mi dolor, pero admito estar mucho mejor, tengo algo de esperanza. Es increible como cuando uno acepta la realidad que tiene, comienza a cambiar, y como hay gente que cae en el momento adecuado, nunca me voy a cansar de creer que son ángeles que llegan sin que nisiquiera ellos lo sepan.       Ya van dos años y ¡Vaya que han ocurrido cosas en tan poco tiempo! Siento que esto va a terminar como la frase de Nanny Mcphee "Cuando no me quieran pero me necesiten me quedaré, pero cuando me quieran, pero ya no me necesiten, me tendré que ir"; Creo que Bs As funciona de la misma manera, siempre creí que Caleta era una ciudad extraña, pero más lejos estoy de allí, más me doy cuenta que no es solo Caleta, sino que todos los lugares por donde transitamos son extraños, interesantes, misteriosos; Todos son sitios de batalla, para gente fuerte, pero es sorprenderte como entre tanto muro de cemento encontré corazones puros, delicados y fragiles. Es interesante como las grandes ciudades ensucian a la gente, pero abren su mente, como te hacen sentir único pero no especial, y maduro pero a la vez tan chiquito.         Buenos Aires tiene una brisa abrazadora pero dura y sofocante ¡QUIEN SABE! Todavía me quedan años en esta ciudad ardiente. Mi mamá siempre me dice que la ciudad no nos deja ver las estrellas con claridad, y que con tantas luces de neón nos confundiamos, no digo que no, pero quizás no te deja ver las estrellas, para que bajes la cabeza y miremos el suelo, la tierra, bajo nuestros propios pies.         Cuanto se aprende y cuanto queda por aprender, por ahora, sé que mi estadía este año a terminado, ¡GRACIAS BS AS! siempre se agradece tu brutal pero inteligente forma de criar y enseñar, ahora, solo queda un grato viaje en carretera, volver a esa ciudad que me vió crecer... LLegar, abrazar a mis seres queridos, sabiendo que un pedazo de mi corazón que quedó en aquel pequeño departamento... Y así entiendo, que tal vez no soy de allá o de aquí, simplemente soy y estoy en donde tengo que estar... 2016 gracias ... 2017... ¿Qué traerás? ¿A quien me harás conocer? ¿A qué me tendré que enfrentar? ¿A quienes no volveré a ver? ¿Quien me volverá a regalar su sonrisa?...                                                                             -Nahir S-