Pienso que te siento
Publicado en Jan 05, 2018
Pensé, y pensando llegué a donde estabas tú, y te encontré. Y me dejé llevar, porque pensé que me querías y que te importaba, que era especial y que me habías encontrado. Y empecé a sentirte, a quererte y a comprenderte, y volví a pensar, pero ésta vez con el corazón, y ya no tuve miedo porque sabía que tú estabas donde estaba yo, que también me comprendías y que yo era lo que tu querías, lo que tu deseabas y desearías. Empecé a sentirme pleno, feliz. Y pretendí que así fuera, por mucho tiempo, porque pensaba que había llegado, no sé dónde, pero a algún sitio, porque esa era mi impresión, porque esa era la sensación y porque lo deseaba, tanto como a ti, tanto como tus abrazos tus caricias y tus besos, tanto como a tu sexo y tanto como a eso nuestro a lo que no puedo definir. Porque no quiero. Porque te quiero.
Y por eso me odio, porque te quiero. Porque te engañaste al pensar que te entendería, y porque no debiste creer en mí. Sabia donde me estaba metiendo, sabía que esto pasaría pero me conformaba, me estaba bien el arriesgarme a sufrir, arriesgarme a sentirte. Y por sentir dejé de pensar, por fin, en todo lo que me rodeaba. Empecé a ser feliz y a no ver lo que me estaba pasando. A no querer entenderlo todo y por fin empezar a sentirlo, como un proceso, como un camino nuevo, como algo nuestro, como esto nuestro. Y entonces me atrapaste y me dejé, porque quería ser tuyo y lo quería de verdad, porque te quiero. Y lo siento, muchísimo. Siento el no poder tocarte ni tenerte a mi lado. Siento no poder hablarte ni tan siquiera saber de ti. Siento cada momento contigo, y el no poder repetirlo y también siento el estarte perdiendo. Siento lo nuestro con fuerza y el no tener la fuerza necesaria para que fluya, así como siento el no poder besarte como lo hice en el pasado. Sentiré que no estás aquí y también que me faltas, pero ahora lo que siento es un terrible vacío en mi pecho, y me duele, y me entristece. Y de tanto sentir, he dejado de pensar. Y ya no puedo volver atrás, ni quiero. Porque me he dado cuenta, porque lo he entendido. Que lo que se siente con el corazón no se tiene que entender ni describir, no se puede explicar ni ponerle nombre. Simplemente se tiene que VIVIR. Pero yo no puedo, porque no debo. No soy tuyo, ni lo seré. No te pienso pero te siento. Y aunque lo sienta, te quiero.
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Mariana Flrez