Soledad sin Silencio
Publicado en Mar 18, 2018
Silencio. No hay sonido. Nada se oye, nada se siente.
No me gusta el silencio porque significa que hay ausencias y esas ausencias tampoco me gustan. Hay quien necesita silencio para pensar, para estar concentrado en uno mismo, pero yo me distraigo con el silencio. Parece incoherente centrarse en algo que no hay. Pues no es mi caso, porque permanezco atenta a la producción de algún ruido a mi alrededor y no en mis pensamientos. Me desagrada el silencio pero no la soledad. La soledad implica ausencias también, pero en ocasiones, esas ausencias son necesarias. Yo necesito soledad puntualmente. Necesito pensar, ordenar mi cabeza, mis caóticos y múltiples pensamientos deben organizarse. Sin distracciones de la gente que me rodea puedo razonar con claridad. La soledad me hace compañía, me ayuda a obtener respuestas, aunque no sean importantes. Siempre quiero tener una respuesta a todo. Necesito una razón del por qué de las cosas. Sin obsesiones, no obstante, porque puede resultar insano. La soledad actúa como una cámara, ves el marco, el encuadre global y eres consciente de más cosas al verlo todo en perspectiva, apreciando más detalles. |
Raquel
CELIA
Lucy Reyes
Felicitaciones.