Ni un paso atrás,
Ya el pueblo lo decidió
No podrán doblegar el sentir profundo
Que lo mueve; ¡la sangre de hermanos!
 
Que manchó el decoro de la nación
Y los corazones de las madres, que vacíos están.
Retroceder; ya no es una opción
Si piensas en los jóvenes,  que ya no volverán.
 
Los niños también dejaron sus sueños, sin soñar,
Al arrebatarles sus vidas, sin ninguna grisma de piedad
Y aquellos,  a los que les asesinaron a sus padres,
Serán huérfanos de protección y amor  paternal.
 
Las canciones que se entonan con esperanza
Y las consignas que se gritan al viento.
Rompiendo el eco en las entrañas de la sociedad
 Y limpiando el alma con las lágrimas que se escapan.
 
¡Desigual es la lucha!
Siendo las armas;  la voz fuerte que grita y exige.
La mochila llena de ilusiones, amor, dolor y solidaridad.
las marchas y tranques que se levantan para protestar,
ondeando la bandera azul y blanco, levantando las fotos
de los caídos; gritándoles, “ Presente”.
 
Las cruces con el manto blanco, las velas y las oraciones,
los sacerdotes en las calles, auxiliando a los heridos a media noche.
los periodistas dignos que nos informan la verdad, sin tapujos.
la CIDH, defendiendo sin coraza los derechos humanos.
 
Mientras tanto; el gobierno con las fuerzas armadas
Policía Nacional, antimotines y paramilitares.
Disparan sin piedad, con francotiradores, disparos certeros
al pecho, el cuello y la cabeza, todos de igual manera
como asesinos en serie; Se ensañan contra el pueblo.
 
Y todo;  por el desenfreno desmedido de las ansias de poder,
Pero, el pueblo dice “Ya basta”.
No más hechizos, arboles latas, ni estatuas de Chavez.
Ni pendones de colores chillantes. “Ya basta”.
 
Queremos Justicia, paz y libertad; ¡de verdad! no disfrazada.
Queremos democracia; sin democracia, no hay república libre,
Ni mucho menos con Justicia y Paz.  
Queremos nuestra Patria con una sola bandera;
nuestra bandera nacional; la azul y blanco, para izarla con dignidad
y respeto.